Proceso de Atención de Enfermería Nic Y Noc Apendicectomia
Enviado por lichy22 • 15 de Enero de 2015 • 4.444 Palabras (18 Páginas) • 905 Visitas
2. INDICE
3. INTRODUCCION
La presente investigación se trata de un estudio de caso clínico donde se podrá en práctica el proceso de atención de enfermería el cual es un método sistemático y organizado en la atención al paciente; durante el desarrollo del presente trabajo, donde el objetivo principal es brindar una atención de calidad al paciente quirúrgico, ya que está muy vulnerable debido al destino incierto por la cirugía.
La metodología utilizada fue la recolección de datos obtenida del paciente por parte del personal de enfermería sumado a la exploración física, neurológica y la historia clínica del paciente.
El presente estudio de caso se trata de paciente masculino de 26 años de edad ubicado en la unidad de quirófano del Hospital Yerovi Mackuart presentando un diagnóstico médico de apendicitis.
4. OBJETIVOS.
GENERAL
Aplicar las etapas del Proceso de Atención de Enfermería, a un paciente que se encuentra en la unidad de quirófano del Hospital Yerovi Mackuart con un Dx: Apendicitis para brindarle los cuidados necesarios y asi contribuir con su pronta recuperación
ESPECÍFICOS
• Recolectar datos subjetivos mediante los patrones funcionales de la salud y objetivos mediante el examen físico
• Diagnosticar mediante la evaluación física y mental el estado en que se encuentra la paciente.
• Realizar diagnósticos de enfermería Jerarquizando Prioridades.
• Elaborar planes de cuidados que se adapte a las necesidades de la paciente
• Ejecutar técnicas que puedan eliminar o minimizar los problemas encontrados.
• Evaluar dichas acciones con la finalidad de mejorarlas o mantenerlas
5. MARCO TEORICO.
APENDICITIS AGUDA
DEFINICION
Es la inflamación aguda del apéndice cecal, cuya etiología específica no se puede establecer en la mayoría de los casos.
EPIDEMIOLOGIA
Un poco más del 60% de los casos son de sexo masculino. El promedio de edad es de 19 años y casi la mitad de los pacientes con apendicitis aguda tienen entre 10 y 20 años. La enfermedad es rara por debajo de los 3 años.
Se estima que de los pacientes con abdomen agudo, más del 50% corresponden a apendicitis aguda.
ETIOPATOGENIA
Morfológicamente el apéndice cecal es la continuación del ciego, bajo la forma de un verme con lumen. Las paredes contienen fibras musculares circulares y longitudinales, como en el ciego, mientras que la mucosa posee folículos linfoides en su espesor. La obstrucción produce edema y con ella más obstrucción, para cerrar un círculo vicioso. Menos frecuentemente, el origen de la obstrucción es un fecalito, parásito o cuerpo extraño.
La posición del apéndice es retrocecal y retroileal en el 65% de los casos, descendente y pélvica en el 30% y retroperitoneal en el 5%. La irrigación proviene de la arteria apendicular, rama de la ileocólica.
La obstrucción del lumen apendicular da origen a un proceso que se puede dividir en tres etapas (Figura 1).
Inicialmente la obstrucción comprime los conductos linfáticos, lo cual genera isquemia, edema y acumulación de moco. Este es transformado en pus por las bacterias y aparecen úlceras en la mucosa. Esta es la apendicitis focal, que se caracteriza clínicamente por síntomas que el paciente usualmente interpreta como una "indigestión", y más tarde, por epigastralgia. El dolor en el epigastrio como manifestación temprana es una fase típica en la evolución de la apendicitis aguda.
A continuación las bacterias colonizan y destruyen la pared apendicular. El proceso inflamatorio alcanza la serosa y el peritoneo parietal. En esta etapa hay una apendicitis aguda supurada, que se caracteriza por dolor localizado en la fosa ilíaca derecha.
Más tarde, la trombosis de los vasos sanguíneos apendiculares produce necrosis de la pared y gangrena. Cuando esto ocurre, se llama apendicitis aguda gangrenosa. La pared gangrenada permite la migración de las bacterias, razón por lo cual resulta en contaminación peritoneal a pesar de no existir una perforación visible. El paciente presente signos de irritación peritoneal localizada e incluso generalizada.
Finalmente, el apéndice cecal se perfora donde la pared se encuentra más débil. A través de la perforación escapa el contenido purulento, que da origen a una peritonitis. Si las asas cercanas y el epiplón mantienen aislado el foco, persiste como peritonitis localizada y se forma un plastrón o un absceso apendicular.
Cuando el apéndice es retroperitoneal, el proceso tiende a mantenerse más localizado. En cambio, si el apéndice es intraperitoneal, y además la perforación no es sellada por asas o epiplón, se produce una peritonitis generalizada. En este caso los síntomas y signos corresponden a los de una irritación difusa de todo el peritoneo.
Figura 1. Evolución de la apendicitis aguda hasta la ruptura
SIGNOS Y SINTOMAS
La secuencia clínica clásica es primero dolor, luego vómito y por último fiebre.
El dolor se inicia en el epigastrio o la región periumbilical y después se localiza en la fosa ilíaca derecha (Figura 2).
Figura 2. La apendicitis se inicia con dolor periumbilical que luego se localiza en FID.
Casi siempre hay anorexia, a tal punto que si el paciente tiene apetito, el diagnóstico de apendicitis debe ser puesto en duda. El vómito se encuentra presente en más del 75% de los casos. La fiebre es de 38° a 38.5°C. Sin embargo, en los pacientes de edad extremas -neonatos y ancianos- la fiebre puede estar ausente o incluso puede haber hipotermia, hecho que es aplicable a cualquier enfermedad para pacientes de estas edades. La diarrea está presente en alrededor de 1/5 de los pacientes y se relaciona con la apendicitis de tipo pélvico.
Cuando se sospecha apendicitis, antes de iniciar la palpación del abdomen se pide al paciente que tosa e indique con un dedo el punto más doloroso. Si el punto más doloroso está en la fosa ilíaca derecha, entonces se debe buscar el signo de Rovsing que consiste en la aparición de dolor en FID al comprimir la fosa ilíaca izquierda. Este signo indica por sí solo la presencia de un proceso inflamatorio en la fosa ilíaca derecha, aunque no es específico de apendicitis (Figura 3).
La palpación del abdomen siempre se practica comenzando sobre los cuadrantes menos dolorosos y avanzando a los más dolorosos y de la superficie a la profundidad. En los cuadros iniciales se encuentra dolor a la palpación profunda en fosa ilíaca derecha. Más tarde puede aparecer contractura de la pared abdominal, es decir, defensa involuntaria, la cual es más intensa cuanto más cerca se encuentre al proceso inflamatorio de
...