TRABAJO PRACTICO DE VELOCIDAD LECTORA.
Enviado por gerrera2476 • 19 de Marzo de 2014 • Práctica o problema • 720 Palabras (3 Páginas) • 331 Visitas
TRABAJO PRACTICO DE VELOCIDAD LECTORA.
Ejercicio N°1 “La Pirámide”
Actividad:
- Se debe leer el texto en forma silenciosa.
- Posteriormente se debe leer en voz alta, con otra persona en forma alternada cada una de las líneas de las pirámides.
- Después el niño debe leer las pirámides sólo siguiendo las instrucciones anteriores
Aquella
mañana era
un hermoso día
de sol. Y allí,
al frente de la puerta
de su casa se encontraba. El
señor tortuga, mirando como pasaba la gente.
De pronto pensó que mientras su mujer vestía
a los niños, él podía echar un vistazo a
sus siembras de acelgas que tenía en el campo. En
el trayecto hacia su sembrado se encontró con el señor liebre,
quién
muy orgulloso
miraba su siembra
de repollos. El señor
tortuga lo saluda muy amablemente:
¡Buenos días señor liebre! Este con
su acostumbrada arrogancia, en vez de devolverle
el saludo, exclamó muy burlón: ¡Ujuy! ¿Cómo es
que anda tan temprano por el campo. Señor tortuga
Ando de paseo – señor liebre La liebre mirando burlonamente y moviendo sus orejas le dijo: Creo que podría usar mucho mejor
sus
patas. La
tortuga a pesar
de que tenía mucha
tolerancia y paciencia al escuchar
esta, se indignó. No podía soportar
que hablaran mal de sus patas, ya
que sabía que las tenía cortas y chuecas.
Y respondió prontamente: ¿ Acaso crees, que sus patas son
mejores que las mías. Señor liebre? La liebre respondió: ¡ Sí,
mucho mejores! Entonces la tortuga propuso: ¡Le apuesto lo que
quiera
que le
gano una carrera!
- ¡No me haga reír!
- Respondió la liebre. Usted con
- sus patas chuecas. Entonces la liebre
- exclamó: Muy bien... pero ¿qué apostamos? Mi
- siembra de acelga – dijo muy seria la tortuga -.
- ¿Está de acuerdo? ¿Ujuy! ¡De acuerdo! ¿Y cuando corremos? .
- En dos horas más. Voy a mi casa me cambio
- de ropa y regreso. Mientras caminaba hacia su casa la tortuga
- pensaba:
La liebre
confía mucho en
sus largas patas, pero
no sabe cuán astuta soy.
¡Hoy le daré su merecido por
ser tan arrogante! Apenas llegó a su
casa, le contó todo a su mujer. He
ideo un plan ¡Ahora! - Le dijo – ponte rápido uno
de mis trajes y me acompañaras al campo. Mientras caminaban
al lugar de la carrera él le explicó su plan. Le dijo:
...