COMENTARIO DE TEXTO ELOGIO DE LA LOCURA, ERASMO

Nos encontramos ante un texto perteneciente a Elogio de la locura, una de las

obras más destacadas de Erasmo de Rotterdam (1466-1536). Erasmo es uno de los

filósofos más importantes de la época renacentista, de modo que conviene explicar el

contexto histórico para comprender mejor su obra. El Renacimiento, como indica el

propio nombre, es una época que se caracteriza en el ánalisis del presente por medio de

la reconstrucción del pasado para proponer soluciones en el futuro. Además, el contexto

de Erasmo está marcado por estos acontecimientos históricos importantes: en 1425,

tuvo lugar el Concilio de Basilea y el inicio de la Reforma Cristiana; en 1440, la

invención de la imprenta (lo que facilitó que llegasen a Lutero los textos de Erasmo, ya

que el filósofo nórdico influyó en su pensamiento teológico); en 1453, la caída del

Imperio Romano de Oriente; y por último, en 1492, tendría lugar el descubrimiento de

América. Respecto a su obra filosófica, sostenía la necesidad de renovar la estructura

organizativa de la Iglesia Cristiana, de modo que se propone estudiar los orígenes del

cristianismo (a través de la traducción de la Biblia y los textos de los Padres de la

Iglesia) para elaborar su pensamiento, el cual está dirigido a la renovación de las

instituciones eclesiásticas. Así pues, El elogio de la locura es su obra más importante,

en la cual utiliza un tono sarcástico para criticar la realidad de su época y afirma que la

locura consiste en un engaño generalizado, dado que confunde lo real con lo ilusorio:

“Para Erasmo, la locura es el impulso vital, la dichosa inconsciencia, la ilusión, la

ignorancia satisfecha de sí misma; en una palabra, la mentira vital. Toda la vida humana

individual y social se funda en mentiras, ilusiones o imposturas, que ocultan la cruda

realidad y constituyen el atractivo mayor de la vida misma. Y Erasmo, haciendo hablar

a la Locura y atrincherándose, de este modo, en un pretexto divertido, puede rasgar el

velo de aquellas mentiras y enseñar la realidad que ocultan”1

. Por lo tanto, como dije

anteriormente, el objetivo de esta obra consiste en cuestionar las instituciones del

cristianismo para renovarlas.

La tesis principal de este texto es la crítica de Erasmo a las distintas corrientes

escolásticas, puesto que el propio autor las denomina “sectas” y las cuestiona en base a

que la gran cantidad de corrientes provocan confusión en el conocimiento de la teología:

“más pronto se saldría de un laberinto que de esa maraña de realistas, nominalistas,

tomistas, albertinos, ockamistas, escotistas, etc.”. Erasmo desvaloriza las obras de estos

autores para exaltar la fe, dado que estas disputas teológicas no refuerzan la fe, sino que

la dividen: “Contra las obras meritorias, la religiosidad formalista y las reglas

monásticas está, según Erasmo, la verdadera religiosidad, que es fe y caridad,, conforme

a las enseñanzas de los Evangelios”2

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