Historia de la Ética
Enviado por Jesús Rodolfo Carmona Dominguez • 7 de Abril de 2022 • Documentos de Investigación • 1.292 Palabras (6 Páginas) • 112 Visitas
[pic 1][pic 2]
Nombre del alumno: Wendy López Aburto
Grupo 101
Materia: Ética y Valores
Primer semestre
UPAV, VERACRUZ
Docente: Jonathan López Bermúdez
Producto académico: La Historia de la Ética
INTRODUCCIÓN
Es bien sabido que la ética es imposible sin el conocimiento y la práctica de las leyes prescritas por la moral. No hay paz, ni orden, ni felicidad entre los seres humanos; por otra parte, en vano intentaremos encontrar la verdadera constitución y los principios conservadores de la sociedad, y las reglas que nos enseñen a comportarnos decente y moderadamente en sociedad, a distinguir la civilización, la cultura y la gente amable.
Pero, ¿cómo se originaron las bases de la ética, y cómo beneficiaron a nuestra sociedad? ¿Cómo explicar la percepción de que la práctica del derecho ético es la garantía de una vida y un comportamiento pacíficos? ¿Estas leyes aún se están violando y al borde de la extinción? En este producto académico, se anexarán las respuestas a estas dudas.
No es más que una batalla de opuestos y, en última instancia, la debilidad humana debe ser superada por la virtud, el sentido común y la sabiduría, que amenazan con destruir a la humanidad misma.
En este sentido, el primero en creer que el antídoto de la pandemia social es la conciencia moral será seguramente el decisor de arriba, que debe ser capaz de transmitirlo a otros niveles hasta que sea degradado a un nivel inferior.
Historia de la Ética
La ética se ocupa del estudio de la moralidad y el comportamiento humano. Una declaración de ética es una declaración de ética que hace una afirmación y describe lo que es correcto, incorrecto, requerido, permitido, etc. Sobre acciones o decisiones. La ética es opcional, por supuesto, ya que no impone sanciones legales (su norma no es una ley). La ética contribuye a la justa aplicación de las normas jurídicas en el estado de derecho, pero desde un punto de vista jurídico, la moralidad en sí misma no es un delito sino que promueve la autodisciplina.
La ética se puede dividir en diferentes secciones, incluida la ética normativa (por ejemplo, los axiomas éticos y la teoría microbiológica) y la ética aplicada (relacionada con partes específicas de la realidad, como la ética y la bioética). profesionalmente). En la ética normativa, esta puede ser un área de enfoque en los estándares para comprender bajo qué circunstancias el comportamiento debe considerarse apropiado (y viceversa). Se basa en encontrar los principios generales que pueden justificar un sistema de estándares y por qué debemos adoptar algunos de ellos.
Ahora bien, ¿cómo es que se originó la ética en nuestra sociedad?
La ética es tan antigua como el hombre, y las personas más primitivas tenían ideas de bien, honestidad, responsabilidad y virtud, y trataban de definir y justificar sus acciones. La ética como ciencia o filosofía fue iniciada por Sócrates, quien primero teorizó los conceptos éticos básicos del bien y la virtud, y Sócrates lo rodea de características distintivas: nostalgia, escepticismo, relativismo y sofistería.
Protágoras fue el primer sofista que conocemos. La principal dificultad para comprender sus principios filosóficos es que las fuentes de conocimiento sobre Protágoras fueron sus mayores rivales: Platón y Aristóteles. Protágoras dijo: "El hombre es la medida de todas las cosas". De las frases éticamente relacionadas, “para mí todo es como tú piensas que es”, por lo que para él y el sofista en general, todos los conceptos y valores son relativos.
Sócrates no está de acuerdo con esta forma de pensar, porque piensa que sin reconocer la corrección del conocimiento no hay ciencia ni moralidad, porque la ciencia es la base de la moralidad, pero para Sócrates lo más importante es la Virtud, la cual demuestra “la lo mejor en la vida es hablar de la virtud todos los días.” Porque la virtud es el hábito de hacer el bien, la virtud es el único bien, sólo la virtud puede traer. “Nos da la felicidad eterna, porque la virtud siempre tiene poder: nada le falta”
...