LA RETÓRICA EL ARTE DE PERSUADIR

INVESTIGADORES: PEDRO FELIPE DÍAZ ARENAS Y GREGORIO POSADA RAMÍREZ.

ALUMNO: RAÚL LEÓN DOMINGUEZ.

REPORTE DE LECTURA.

TEMA: LA RETÓRICA EL ARTE DE PERSUADIR.

PALABRAS CLAVE: retórica, argumentación, razonamientos, premisas, lenguaje, persuasión, preposiciones.

IDEA PRINCIPAL. Los investigadores plantean las diferencias entre retórica y argumentación. En la primera se emplean estrategias discursivas para convencer a las personas a quien se dirige el mensaje, a través de creencias y deseos, a fin de establecer una realidad social mediante estados mentales colectivos, para la creación y conservación de la realidad social; en este caso, no interesa la verdad de las premisas, solamente se busca la aceptación del auditorio. Mientras, en la argumentación las premisas respaldan plenamente a la conclusión; es decir, la validez es una propiedad formal de los argumentos. Así la estructura lógica y el valor de la verdad de las premisas son las características que definen a los argumentos que pasan la revisión crítica.

1. ¿Qué dice?

“(…) Este caso, tomado del libro Apología de Sócrates escrito por Platón (2003), permite distinguir entre la capacidad del lenguaje para describir la verdad y su igual capacidad para persuadir. El lenguaje es un instrumento que recrea los hechos, pero, a su vez, los puede configurar a los intereses del emisor. Con el lenguaje se argumenta o se persuade, pues no siempre el que argumenta persuade, o el que persuade argumenta. En tanto en la argumentación el criterio para determinar su validez o invalidez es su compromiso con la verdad, en la persuasión es la capacidad para adherir auditorios lo que define su corrección o incorrección (…)”.

1. ¿Qué me dice?

Explica de manera clara que a través del lenguaje se emiten razonamientos verdaderos o solamente argumentos sin sustento alguno, pero tendentes a convencer al receptor del mensaje. De esa forma, vislumbra la diferencia entre argumentar y persuadir. La argumentación es sometida al escrutinio para verificar la validez o invalidez de expresado por el emisor. Se base en opiniones solidas verificadas a través de premisas verdaderas. Mientras la persuasión solamente se concreta a convencer al auditorio, mediante un lenguaje de creencias y representaciones en un determinado grupo social, sin verificar la verdad de lo manifestado; de esa forma el proceso de persuasión desempeña un papel principal para provocar determinadas reacciones.

1. ¿Qué pienso?

Atendiendo al Diccionario de la Lengua Española, la retórica significa el arte de bien decir, de dar al lenguaje escrito o hablado eficacia bastante para deleitar, persuadir o conmover. Teoría de la composición literaria y de la expresión hablada.

Mientras la argumentación se conceptualiza como aducir, alegar, dar argumentos.

Disputar, discutir, impugnar una opinión ajena.

Conforme a ello, consideró que la retórica como el arte de bien decir, se utiliza para convencer a quienes se dirige el discurso. Sin permitir el escrutinio de esas manifestaciones.

Lo contrario sucede con la argumentación, pues quien argumenta permite debatir con su interlocutor a fin de verificar la certeza y verdad de lo expuesto.

1. ¿Qué debo hacer?

En el ámbito de jurídico, particularmente en el área de impartición de justicia, se requiere bastos conocimientos en el campo de la argumentación, porque quienes se ocupan de formular proyectos de resolución, deben emitir razonamientos debidamente estructurados mediante razonamientos lógico-jurídicos, en donde las premisas formuladas sean verificadas, para dar certeza a lo decidido.

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1. ¿Qué dice?

“(…) Mientras que el lógico Wesley Salmon (1965) afirma que los argumentos son relaciones lógicas entre enunciados, y que es independiente e irrelevante la aceptación o no aceptación que las personas puedan tener de ellos, Chaim Perelman (2000) en el Tratado de la argumentación o nueva retórica dice que argumentar es influir por medio del lenguaje en la adhesión de un auditorio a una idea o creencia. Perelman, en su intención de alejarse de los argumentos basados en los razonamientos lógicos y en proposiciones de evidencia empírica, subtituló su tratado sobre la argumentación como

la Nueva retórica. Así, la obra de Perelman, más que un estudio sobre la argumentación es todo un tratado sobre retórica, pues como él mismo señala: “Este tratado se ocupará únicamente de los medios discursivos que sirven para obtener adhesión del auditorio, por lo que solo se examinará la técnica que emplea el lenguaje para persuadir y para convencer” (Perelman, 2000, p. 39) (…)”.

1. ¿Qué me dice?

Se exponen las diferentes opiniones de filósofos expertos en la materia. Mientras Wesley Salmon, sostiene que los argumentos son razonamientos lógicos, sin importar la aceptación o no de los receptores; pero esa argumentación basada en razonamientos sólidos, para verificar las premisas expuestas. Chaim Perelman, considera que argumentar es influir por medio del lenguaje en el convencimiento del auditorio en una idea o creencia. Este filosofo está convencido que la retórica se expresa mediante discursos que conllevan a la adhesión del receptor para persuadirlo, sin importar la veracidad o falsedad de lo expresado.

1. ¿Qué pienso?

Estoy convencido de la teoría de Wesley Salmon, porque la argumentación debe basarse en premisas verdaderas, a fin de obtener un resultado eficaz y asertivo, al margen de que esa decisión beneficie o perjudique a alguien en particular.

Por tanto, no es posible que, en el ámbito de la impartición de justicia, el operador jurídico al emitir una determinación lo hago sobre una mera retórica, sin evidencia alguna para sostenerla.

1. ¿Qué debo hacer?

El operador jurídico al resolver una controversia necesariamente debe verificar que las hipótesis formuladas en la sentencia sean comprobables. Porque solamente de esa manera, existirá certidumbre en la argumentación mediante la cual sostuvo la decisión, ya sea condenado o absolviendo al demandado.

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1. ¿Qué dice?

“(…) Este texto asumirá la argumentación como la relación justificativa entre premisas y conclusiones, relación que se evalúa a partir de la verdad de las proposiciones y de reglas lógicas; y la retórica, en el sentido que le da Perelman, como las estrategias discursivas para adherir auditorios, para finalmente mostrar que en tanto la realidad social está constituida por estados mentales colectivos: creencias y deseos, es la capacidad de adherir a los grupos sociales a cierto tipo de creencias y deseos lo que constituye y sostiene la realidad social (…)”.

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