Alcoholismo

EDUCACIÓN EN VALORES PARA PREVENIR Y ERRADICAR EL CONSUMO DE ALCOHOL EN LA CIUDAD DE QUITO.

CAPÍTULO I

ANTECEDENTES

El alcoholismo es una droga que se permite vender de forma legal ya que desde los inicios de la civilizaciones los primeros habitantes de la sociedad consumían este tipo de brebajes con fines religiosos o rituales que en ese entonces los realizaban adorando a los fenómenos naturales a quien les temían y les rendían cultos , estos brebajes eran elaborados de diferentes sustancias naturales como la fermentación de yuca, el maíz estos eran los principales ingredientes después con la llegada de los incas que provinieron de Perú que se dedicaron a realizar los despojos de las tierras de los territorios ecuatorianos se dio el consumo con fines laborales que las personas los consumían porciones de chicha para refrescarse y para tener mucha más fuerza para poder trabajar y también era considerado como un estimulante que los incas les proporcionaban a los indígenas que los tenían como esclavos que los hacían trabajar largas jornadas de trabajo en la agricultura y así para que ellos no sintieran dolor ni hambre y rindieran más en su trabajo y se fue expandiendo de generación en generación en la que forma parte de la costumbre y cultura humana. (Estrella, 1982).

Los primeros síntomas, muy sutiles, incluyen la preocupación por la disponibilidad de alcohol, lo que influye poderosamente en la elección por parte del enfermo de sus amistades o actividades considerado cada vez más como una droga que modifica el estado de ánimo, y menos como una parte de la alimentación, una costumbre social o un rito religioso.

El alcohol es considerado erróneamente como el príncipe de todas las alegrías ninguna reunión puede faltar el alcohol ya que sin el dicen que no hay diversión es el que gobierna al mundo ya que está en todas partes en ceremonias, reuniones familiares, ámbitos sociales.

Además es el causante de todos los males, es aquel que fabrica adulterios, nacen en los corazones pensamientos negros y obscuros en los adultos y jóvenes los hace inmorales e indignos acaba con las familias y ocasiona conflictos crea desgracias envenena la raza y la sangre de todos las personas que consumen este tipo de bebidas pero en realidad es el mensajero de la muerte.

En los hogares que consumen bebidas alcohólicas las consecuencias en los niños es la desnutrición, mal formación genética siendo el causante de todas las enfermedades más dolorosas e incurables; ya que el alcohol no respeta raza, sexo, estatus social, profesión ni ocupación.es por ello que siempre tenemos que estar alerta para no caer en este terrible mal que si nos dejamos vencer nos puede conducir a los caminos más equivocados y causar daño a las personas que más nos quieren.

JUSTIFICACIÓN

Quito es una ciudad muy extensa donde existe una población marginal donde muchas familias presentan maltrato individual y social, ya que estas a su vez sufren al ver que sus seres queridos terminan en el alcoholismo; cuando existe divorcios, migración, falta de educación, recursos económicos bajos y ausencia de responsabilidades es donde el alcohol es el punto de refugio para los jóvenes de la sociedad quiteña, y esto ira aumentando si no existen programas educativos e informativos en los colegios y en los barrios, leyes eficaces de regulación y sobre todo una conversación abierta con sus familiares.

Los jóvenes que se encuentran desorientados y tienen muchos problemas la mejor salida para ello es el destino del alcohol, en ese momento podrán olvidar todo lo que les esta sucediendo pero al siguiente día continuaran con sus problemas y se transformaría en un cuento de no acabar por eso la comprensión familiar seria el punto clave para que estos jóvenes no sean consumidos por la sociedad; en muchas familias encontraremos frecuentemente hijos de padres alcohólicos que se hacen alcohólicos y las hijas de los alcohólicos que se casan con alcohólicos y esto se transforma en una cadena de alcoholismo donde se irá deteriorando vínculos familiares, educación y trabajo.

El consumo habitual en jóvenes es alto El 56% de los ecuatorianos ingiere alcohol, es la sustancia de mayor consumo en el país. Así lo demuestra el estudio Percepciones sociales sobre drogas en Quito, elaborado por la Fundación Ayuda contra la Drogadicción. Una de cada cinco personas entre 18 y 24 años consume alcohol habitualmente. Tomando en cuenta la frecuencia de consumo, el estudio reveló que un 51,5% ingiere bebidas alcohólicas entre una y tres veces al año, 19% entre cuatro y 10 veces; 13,6% entre 11 y 20 veces; 14,6% afirmó que casi todos los fines de semana toma y solo un 0,5% bebe todos los días. El estudio también arrojó resultados sobre el género de los consumidores. Uno de cada cinco hombres declaró un consumo habitual, mientras que el 40% de las mujeres consultadas confiesa tomar frecuentemente. El estado civil también influye en la frecuencia. El 21,5% de los solteros bebe, el 22,2% de los divorciados y el 25% de los viudos. Datos que vinculan a la ingesta de licor con estados anímicos. A nivel educativo, quienes no estudian toman menos (13,4%) que los que acuden a alguna institución educativa (19,7%). Programas Educativos, Psicología y Salud (Proeps).

OBJETIVO GENERAL

Concientizar a todas las personas de la ciudad de Quito acerca del gran daño que está causando el alcoholismo no solamente en la salud sino también en los hogares y la sociedad y de esta manera poder contribuir al cambio justo y equitativo.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

Determinar el grado de afección que el consumo del alcohol genera en el organismo del ser humano, teniendo en cuenta las causas y consecuencias que lo producen.

Identificar los distintos problemas sociales y familiares que se generan cuando se frecuenta el consumo de bebidas alcohólicas en jóvenes y adolescentes.

MARCO TEÓRICO

El alcoholismo no sólo afecta a los alcohólicos sino que puede afectar profundamente a los familiares que estén a su alrededor, específicamente a los hijos. Los problemas sociales que se derivan del alcoholismo pueden incluir la pérdida del puesto de trabajo, problemas financieros, conflictos conyugales y divorcios, condenas por crímenes tales como conducción bajo la influencia del alcohol, desórdenes públicos o maltratos, marginación, falta de respeto de gente que llega a ver al alcoholismo como un mal que el alcohólico se inflige a sí mismo y que ven como fácilmente evitable. (Higashida, 1995).

Comparto la idea del autor, pero sin embargo considero que la única forma que la persona puede salir de esta enfermedad es que reconozca y acepte que necesita

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