BORRADOR BLOQUE II CAPÍTULO V PLATÓN

Borrador (parte de este fragmento pertenece al capítulo V del bloque II)

-1 Intelectualismo moral: asunción del compromiso moral que entraña el cuidado de sí mismo que no es sino el cuidado de la polis y de sus individuos (justificación: 3.2 apuntes).

-2 Los fundadores escogen las mejores naturalezas con el propósito de educarlos a través del método dialéctico o mayéutica (oposición al método de educación de Protágoras y Gorgias).

2.1 Esa formación deberá ser devuelta: han de aplicar lo adquirido en la polis para dirigirla justa y sabiamente. De modo que hasta que no coincidan en un mismo sujeto ética y política jamás se podrá decir con certeza que un gobierno es legítimo (donde legalidad y legitimidad sean una y la misma cosa)^[1].

2.2 Aquellos cuya educación no ha recaído en el Estado, sino que se han formado de manera libre, no están en la obligación (moral) de prestar sus servicios a la sociedad: “cuando alguien se forma solo y no debe a nadie su crianza, es justo que tampoco se preocupe de reintegrar a nadie el importe de ella”

2.3 Ese compromiso moral del que carecen se deben a que no han sido educados rectamente: al no adquirir la Idea de bien, no son conscientes del deber moral que entraña la educación para con la sociedad, teniendo como consecuencia una actuación egoísta.

-3 Sólo el virtuoso deberá gobernar la ciudad: “Pero a vosotros os hemos engendrado nosotros, para vosotros mismos y para el resto de la ciudad, en calidad de jefes y reyes” siendo el virtuoso aquel individuo que ha finalizado el proceso de educación.

- 4 El descenso al mundo sensible muestra la aplicabilidad del intelectualismo moral

4.1 ¿Contradicción con 4? El filósofo no quiere gobernar porque conoce los problemas que atañen a la gobernabilidad^[2] -eso se expresa en el fragmento anterior cuando hace referencia a que los filósofos quieren alargar su estancia en la isla de los bienaventurados-: “Mas la verdad es, creo yo, lo siguiente: la ciudad en que estén menos ansiosos por ser gobernantes quienes hayan de serlo ésa ha de ser forzosamente la que viva mejor y con menos disensiones que ninguna”

4.2 No hay contradicción: pues no antepone sus intereses personales (que equivale a no prestar sus servicios a la sociedad) a los intereses comunes.

4.3. Sólo el filósofo, que ha visto previamente la luz (= que está en posesión del verdadero conocimiento) tiene los conocimientos necesarios para dirigir rectamente la ciudad: “Y así la ciudad nuestra y vuestra vivirá a la luz del día y no entre sueños”

[1] Esa premisa platónica según la cual sólo el virtuoso es apto para gobernar una ciudad será objeto de crítica tanto por parte de Maquiavelo como de Spinoza. (puntos 4 y 4.1 de los apuntes).

[2] La tesis de Platón es que aquellos que no quieren gobernar, son los que deben hacerlo.

...