El Hombre Sin Rostro

“EL HOMBRE SIN ROSTRO”

Actualmente el ser humano ha sido arrasado por la globalización, pasando del “yo soy” al “yo tengo”, siendo esta última la base fundamental de su existencia. El hombre se encuentra inmerso en un sistema que le proporciona comodidad y placeres efímeros, este a su vez le dice como vivir, que hacer, como comportarse, que tener, etc.; olvidándose de la oportunidad de encontrarse a sí mismo, de preguntarse ¿quién soy?, ¿hacia dónde voy?, ¿qué quiero llegar a ser ? y forjar su propia identidad.

El hombre actual, vive en la sociedad como fuera de sí, en busca de cosas u objetos, de relaciones momentáneas y vanales, que lo hacen ser un individuo consumidor de todo hasta de él mismo; se ha vuelto incapaz de formularse sus propios ideales y se deja llevar por el tumulto de las masas, porque su vida carece de sentido, el hombre actual ha perdido su identidad, se ha quedado sin rostro.

En el presente ensayo hablaré del hombre de este milenio, que no es capaz de actuar por sí mismo, que no tiene propósitos, ni iniciativa, el hombre mediocre; del hombre que se ha dejado llevar por la ola del consumismo, del poder, del dinero, el hombre enajenado, también comentaré del hombre masa y del hombre de la caverna, que analicé del mes de agosto al mes de noviembre del presente año, en mi curso de Ética y Responsabilidad Social

El hombre sin rostro al descubrir dentro de él, un hombre que no tiene miedo a la vida, al fracaso, al esfuerzo diario para conseguir sus ideales, luchará para encontrar y alcanzar el verdadero sentido de su existencia, que le hará recobrar su rostro.

En el presente ensayo, haré un análisis comparativo de los diferentes autores estudiados en mi curso de ética y responsabilidad social, como también me apoyaré en la observación.

Este estudio comprende los siguientes temas:

 Definición del Hombre sin Rostro

 Características del Hombre sin Rostro

 Posibles Alternativas de Solución

Definición del Hombre sin rostro

“Mucha gente no puede ni emanciparse, es decir, no puede ni darse cuenta de la esclavitud en que le mantiene las ideas en medio de las cuales se ha educado.”

Samuel Butler

Este nuevo milenio con una economía global, una cultura de la virtualidad real y una sociedad red, ha creado un hombre muy diferente al de todos los siglos pasados, este hombre se identifica, por que no se preocupa más que de su bienestar, se integra a grupos sociales rapidamente y se deja llevar por las masas.

Del hombre que estoy hablando es aquel que he denominado como el hombre sin rostro, aquel que ha perdido su identidad y es una mezcla de personalidades ajenas a su ser, por este motivo va siendo condicionado por la sociedad en la que vive y se vuelve esclavo de ideas y pensamientos ajenos que lo someten a un ritmo de vida que no es suyo; José Ingenieros llamaba a este hombre carente de personalidad, como “el hombre mediocre, aquel que solamente es una sombra proyectada por la sociedad” (Ingenieros, 1985-42). Una sombra que solamente ve sombras de la realidad, que no puede ver mas alla de su limitada perspectiva.

Sin embargo el hombre sin rostro es tambien aquel, que esta enajenado por este mundo actual, en el cual los objetos, el poder, el éxito son el principal proposito de su vida: << Estar enajenado, en el sentido de que sus actos y sus energias se han extraído de él; están por encima de él y en contra suyo, lo gobiernan en vez de ser él quien los gobierne>> (Fromm, 2007-45). El hombre sin rostro ha dejado a lado la oportunidad de conocer su ser, de orientar el sentido de su vida y de crear su propia identidad.

Características del Hombre sin Rostro

“El hombre avaricioso está lleno de temores,

y quien vive con temor será siempre un siervo”.

Horacio

El hombre sin rostro se caracteriza por la pérdida de su identidad; cuando el hombre no tiene una identidad propia puede caer a una personalidad creada por los papás, los compañeros, o superiores. La identidad fingida pone en contradicción sus acciones, ideas y emociones. Es incapaz de usar su imaginación para forjar ideales, para crear un futuro mejor. Es una persona sumisa y manejable. Se vuelve un hombre masa << con la libre expansión de sus deseos vitales, por tanto de su persona, y la radical ingratitud hace cuanto ha hecho posible la facilidad de su existencia>> (Ortega y Gasset, 1997). Es simplemente una sombra que no se distingue de los demás.

Otra de sus características es la falta de sentido en su vida, es decir, no sabe hacia dónde se dirige, qué sueños tiene, metas, etc., es un ser consumista, por la falta de valores que en estos últimos años se han eclipsado. El consumismo es la señal de éxito para este hombre y la siembra de adicciones como de violencia para alcanzarlos simbólica o materialmente. Los medios de comunicación, con sus anuncios publicitarios originan a una sociedad consumista; el hombre sin rostro ama las cosas en vez de la vida.

El no ve más allá de su precaria realidad, porque le cuesta trabajo darse cuenta que existe un mundo

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