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El Ser Y Deber Ser


Enviado por   •  15 de Febrero de 2012  •  2.315 Palabras (10 Páginas)  •  3.480 Visitas

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EL SER Y DEBER SER

El mundo del ser se refiere a lo que es de fijo, a lo que acontece en la realidad fenoménica, independientemente de nuestra voluntad y nuestro obrar. Se trata del mundo de la naturaleza, donde todo acontece por necesidad. Así según esta concepción, en la naturaleza impera la explicación casual: a determinadas causas corresponde determinados efectos; por ejemplo si yo arrojo un objeto (por ejemplo un libro) éste caerá inevitablemente al suelo; si no me alimento enfermare.

Pero, al lado de este mundo regido por la necesidad, por las regularidades fenoménicas, por los encadenamientos causales, es posible hablar de un mundo donde reina la libertad humana, donde las cosas no suceden en forma necesaria, sino por la plena voluntad del hombre. Se trata entonces del mundo del deber ser a partir del cual se establecen las bases de la conducta moral, ya que solamente los actos libres, voluntarios y autónomos son los que pertenecen al mundo moral.

En este ámbito del deber ser es donde se ha instalado la ética, la cual descansa en la libertad humana. La libertad, es la condición de posibilidad de la conducta moral y de la ética.

De la conducta moral, en cuanto a los actos libres y consientes de los individuos en la sociedad; y de la ética cuanto a los actos libres y consientes de los individuos en la sociedad; y de la ética, en cuánto a la reflexión sobre la validez universal de dichos actos.

El bien moral puede existir si las criaturas racionales se dan cuenta de lo que deben hacer y, actuando por un sentido del deber, lo hacen. Esto es lo único que tiene valor moral.

Kant decía que los seres humanos ocupan un lugar especial en la creación, donde se han considerado distintos de todas las criaturas y no solo diferentes sino mejores, los seres humanos tienen un valor intrínseco esto es dignidad que los hace valiosos sobre cualquier precio. Según Kant, los seres humanos nunca deben ser usados como medios para un fin.

La educación se basa en un proceso de atrofia de potencialidades, mientras desarrolla limitaciones y dogmas “útiles” socialmente, no podemos negar que el origen de los conflictos profundos de la sociedad se base en la educación orientada al logro de esos conflictos que desde la más tierna infancia adoctrina las mentes maravillosas de los niños, que poco a poco serán hábilmente adiestrados para que vayan obteniendo premios y gratificaciones que les hagan ascender en la pirámide del conocimiento sin experiencia.

El proceso según el cual realizamos una acción y no su opuesta se basa en la capacidad de inhibir y facilitar el funcionamiento de determinados núcleos neuronales, si continuamente recorremos las mismas rutas estas se grabarán a fuego y serán las que seguiremos recorriendo, una acción realizada miles de veces acaba estando facilitada y una modificación ligera de la misma cuenta con muchas dificultades para su ejecución. Con el paso del tiempo los hábitos motores acaban siendo tan específicos de una persona que podemos reconocer a alguien por como se mueve aun cuando esté lo bastante lejos como para reconocer sus rasgos.

Una gran cantidad de células nerviosas acabarán permaneciendo en estado de inhibición permanente, sus potencialidades nunca se desarrollarán o lo harán de forma muy limitada y subyugadas a la acción de aquellas que prevalecen en el darwinismo neuronal.

Podemos ser útiles a la sociedad sin serlo a nosotros mismos, podemos aprender una profesión, desarrollar habilidades sociales y sin embargo tener una escasa capacidad para Ser, para vivir esencialmente disfrutando de este fenómeno que es la vida siendo auto consciente de estar vivo. Aprendemos a considerar que somos valiosos en medida en que lo seamos para la sociedad, y no es cierto, somos seres únicos, irrepetibles.

Sin embargo siendo todos esencialmente distintos, la fuerza del grupo acaba puliendo las diferencias, favoreciendo la homogeneidad, todo el mundo se esfuerza por ajustarse al medio social, los impulsos propios acaban limitándose y se desarrollan aquellas peculiaridades que son más aceptables por el conjunto. De esta forma uno puede estar perfectamente adaptado y ser profundamente infeliz.

Todo logro que tiene por origen un esfuerzo excesivo, que ha limitado de forma severa la experiencia de disfrutar de lo cotidiano acaba transformando al individuo en un ser rígido, disgustado, que descargará su amargura contra sus semejantes, que no tienen culpa alguna.

Si hay algo cierto es que experimentamos la vida según nuestro nivel de conciencia, las personas pueden estar deprimidas en medio de la abundancia o felices careciendo casi de todo, los estados de conciencia se van sucediendo a lo largo del día sin percibirlo apenas, sin llegar siquiera a pensar que tenemos una responsabilidad personal en la calidad de los estados que se suceden, aparentemente sin mi intervención. Ser es conciencia, estar presente en lo que me sucede y pudiendo acompañar el proceso sin enturbiarlo, ser no es seguir el dictado general, anular la propia individualidad, consagrarse al Dios del éxito de turno, unirse a un grupo que te diga lo que has de hacer por siempre. Ser es conciencia, y la conciencia tiene niveles; la tensión favorece los estados de conciencia más bajos a los que un ser humano puede llegar.

La gran diferencia entre el Ser y el Deber Ser, radica en los valores morales y éticos que tengan en sus adentros los individuos de una sociedad, solo aquellos individuos que tengan claro cuales son los valores morales y éticos que deben regir su vida dentro de la sociedad, serán capaces de llevar adelante una vida enmarcada dentro de lo que en filosofía se le ha dado por llamar, “el Deber Ser”.

Por otro lado, aquellos individuos que no posean unos fuertes y arraigados valores morales y éticos o los que posean, nada tengan que ver con la sociedad en la que conviven, serán aquellos individuos que primen al Ser, es decir, al individualismo ante todo, el progreso individual a costa de lo que sea, sin importar en la mayoría de los casos, ni el mas mínimo valor moral o ético, en pocas palabras, cuando un individuo es capaz de primar su individualismo o su Ser, por encima del bien común o el Deber Ser, estará aplicando la máxima universal achacada a Maquiavelo, de que “el fin justifica los medios”.

Analicemos un poco el significado del Ser, este es el concepto que engloba por completo al ser humano, al individuo racional, e irracional, engloba de manera total todas sus habilidades, todos sus conocimientos, todos sus logros y todas sus bases morales, éticas, afectivas, es decir, es el concepto total y amplio del individuo. Gracias al Ser la filosofía logra explicar el comportamiento, tanto racional, como irracional

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