Etica para jovenes resumen
Enviado por charlestonlisy • 7 de Diciembre de 2017 • Resumen • 1.327 Palabras (6 Páginas) • 790 Visitas
CAPITULO 8 Ciudadanía democrática.
- La semilla de Atenas o La democracia clásica.
La democracia no es autocracia. Esta última consiste en elegirse a uno mismo como gobernante e imponer su poder sin límites a los demás.
En cuanto a la democracia, es el sistema en el que nadie tiene derecho a exigir para sí un poder sin condiciones e ilimitado. Toda autoridad emana del pueblo.
La esencia de la democracia es la igualdad.
PARRESÍA: LIBERTAD DE HABLAR. ISEGORÍA: IGUALDAD EN EL USO DE LA PALABRA. ISONOMÍA: IGUALDAD ANTE LA LEY.
La política es solo una parte de nuestra vida y no la principal. Precisamente queremos resolver los asuntos políticos del mejor modo posible para poder dedicarnos a nuestras cosas, que son las que más nos importan.
La democracia antigua era directa. Quiere decir que nadie representaba al pueblo, sino que todos los ciudadanos reunidos en asamblea tomaban las decisiones.
En la actualidad la democracia es indirecta o representativa. Es decir, nosotros no decidimos directamente sino que nuestra participación se produce a través de representantes elegidos.
- Discusiones interminables o la democracia dialógica.
Según varios estudios de la política, dos requisitos son básicos en una democracia: que exista la máxima libertad de debate público y una gran participación de los ciudadanos en la vida política.
Sin libertad de debate solo habrá apariencia de democracia.
El sabio es quien sabe ver a través de los ojos de los otros. Si escuchas verdaderamente al otro, intentando descubrir la intuición que él ha tenido, y lo combinas con lo que ves tú mismo, entonces habrás conseguido una idea más clara del asunto en cuestión.
Es necesario estar convencido de que nosotros no nos bastamos solos para saber cómo son las cosas.
ASPIRA A SER MÁS INTELIGENTE QUE TU INTERLOCUTOR, AFRONTA LA DISCUSIÓN CON LA CREENCIA DE QUE NO LO SABES TODO. Y SÉ AMBICIOSO: INTENTA SABERLO TODO. ¿CÓMO? DESCUBRIENDO LA VERDAD DE LA QUE EL OTRO ES PORTADOR.
El dialogo entre nosotros es necesario para comprender el mundo y la realidad. Solo contrastando, enfrentando, combinando sus ideas con las nuestras alcanzamos una imagen más fiel de la realidad.
- El ciudadano relativista o la dignidad de la persona.
No todas las verdades absolutas son intolerantes y perjudiciales.
En realidad, la democracia sólo puede basarse en una afirmación rotunda de la igual dignidad de todos los seres humanos, de la que se derivan sus derechos.
Se ha llegado a afirmar, en esta época relativista, que “quien cree en verdades absolutas llegara a matar por ellas”.
La voz de la mayoría no es sinónimo de justicia. La afirmación de la dignidad humana es el fundamento de la democracia.
- El ciudadano televisivo o las desviaciones de la democracia.
Cuando hay que tomar una decisión, votación. Cuando hay que saber, reflexión.
Cuando se discute cualquier asunto lo mejor será atender a “la esencia” de la cuestión.
El peligro de nuestra democracia es el “ciudadano televisivo”. Aquel que solo se entera de lo que pasa en el mundo por la tele.
Ver no es analizar. Ver no es comprender. Ver no es conocer.
La política por televisión es un espectáculo para distraer. Siempre es de emociones, nunca de razones. Es una política de ideas simples y de consignas.
Lo que siempre se ha de respetar es a las personas. Las opiniones no. Piense lo que piense, debe ser siempre tratada con respeto.
Cuanta más autoridad exista, menos falta hará forzar y coaccionar a los ciudadanos.
La democracia necesita que el poder este respaldado por la autoridad. La autoridad es la forma de poder democrática por excelencia.
En realidad, “democracia” es el nombre de un ideal. Es el horizonte que marca del camino.
- Capitalismo frente a consumismo o la democracia liberal.
Lo que queremos es comprendernos hoy, y por eso necesitamos investigar nuestro pasado.
La meta es que cada individuo sea libre. Si el poder colectivo es muy grande, termina por ahogar a la libertad individual.
Ya lo decía Rousseau: “El mayor bien de todos, que debe ser la finalidad de todo sistema de legislación, se reduce a dos objetos principales, la libertad y la igualdad”.
El mayor reto para las democracias del siglo XXI es conseguir una sociedad en la que seamos libres, y exista realmente igualdad de oportunidades para todos.
- Las películas de Hollywood o la cooperación ciudadana.
Los partidos conservadores suelen fijarse en los logros que ha conseguido la sociedad a lo largo de la historia. Ponen la vista en lo conseguido, y como no lo dan por supuesto, su afán principal es que no se pierda, que no se destruya.
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