Prejuicios en "Clemencia"
Enviado por Ericoco Andy • 8 de Marzo de 2018 • Ensayo • 2.440 Palabras (10 Páginas) • 134 Visitas
Presentación.
En este escrito se dará al lector un trabajo de investigación en el cual se tratarán a fondo los prejuicios del Libro “Clemencia” de Ignacio Manuel Altamirano, estos prejuicios de los cuales con muy poca observación se pueden sacar a flota.
Esta obra es perteneciente a la corriente del romanticismo por lo cual esta tiene la idea de un libro en el cual se tratará de “amor” en este caso amor imposible, en el cual se pondrán conflictos para comprobar la veracidad de este amor.
Estos prejuicios se compararán con la actualidad ya que muchos de ellos siguen hasta la fecha solo o cambia un poco la forma de que se den tanto debido a la época como a la diferencia de la cultura.
Introducción.
Ignacio Manuel Altamirano Basilio.
Nació en Tixtla, Guerrero, México, el 13 de noviembre de 1834, fue un hombre con múltiples profesiones el cual fue un abogado, escritor, periodista, maestro y político mexicano.
El cual provenía de una familia indígena, pero gracias a que su padre fue nombrado alcalde de Tixtla tuvo la oportunidad de estudiar, tal parecía que el destino tenía algo deparado para él.
Cuando cumplió sus catorce años todavía no hablaba castellano, lengua de la cultura oficial, entonces, sin saber leer ni escribir; el empezó a trabajar por esa época un proceso de alfabetización el cual resulto muy sorprendente por su gran rapidez y consiguió, en 1849, una beca para estudiar en el Instituto Literario de Toluca, en este instituto impartía clases el maestro Ignacio Ramírez “El Nigromante” el cual tuvo gran interés por el chico por trabajar con el chico después el maestro terminaría trabajando con Porfirio Díaz siendo “Ministro de Justicia e Instrucción Pública.
Altamirano tuvo muchas más obras, fue un gran escritor y otras de sus obras fueron: Julia (1870), La Navidad en las montañas (1871), Rimas (1880), etc.
El deceso de Ignacio Manuel Altamirano Basilio ocurrió en San Remo, Italia en 1894, el cual estaba en un encargo de Porfirio Díaz, fue incinerado y traído a México.
Para recordar el centenario de su nacimiento sus cenizas fueron depositadas en la Rotonda de las Personas Ilustres en la ciudad de México, en su memoria se creó la medalla “Ignacio Manuel Altamirano” que se obtiene cuando se llevan 50 años de docente, inclusive se escribió su nombre en letras de oro en la Cámara de Diputados en 1993.
El romanticismo es un movimiento artístico que tuvo gran latencia en la literatura y la pintura de finales del siglo XVIII. Alemania e Inglaterra fueron los dos países donde se originó de la mano de varios artistas. Pero rápidamente se expandió al resto de Europa y las Américas durante la primera mitad del siglo XIX. Supuso una ruptura con la Ilustración y el Neoclasicismo que reinaban por aquel momento.
El romántico considera el paisaje como un elemento muy importante en su obra. Prefiere una naturaleza que conecte con sus sentimientos tumultuosos; por eso buscan paisajes agrestes, noches tormentosas, mar tempestuoso, ambientes nocturnos y sepulcrales, ruinas de castillos medievales... La naturaleza participa de los propios sentimientos del poeta y se convierte en una compañera con la que se comunica.
Se idealiza el amor hasta el punto de considerar a la mujer como un ser que lleva a Dios. El amor es considerado como un principio divino. A la par que esa mujer angelical, los románticos también ven a la mujer como un principio de perdición, como una fatalidad que destruye al hombre.
Ignacio Manuel Altamirano en su obra expreso una historia de amor, traición y un enredo amoroso entre los personajes muy interesante, los cuales desenlazan a una historia la cual termina trágica.
Este libro presenta muchas conductas humanas muy comunes como el juego de Clemencia con ambos hombres, el cual no ha cambiado para nada en la actualidad se sigue presentando en las relaciones, el crear cierta preocupación a la pareja por empezar a salir con otro para que así la pareja empiece a valorar más a su pareja, los celos, los amores prohibido, el sacrificio debido a una amistad y la ceguera por amor.
PREJUICIOS MASCULINOS.
En estos prejuicios se tendrá presente en bastantes ocasiones a Fernando Valle y a Enrique Flores. La mayoría de estos prejuicios vendrán referentes hacia el poderío y su apariencia.
Todo comenzaba desde la apariencia de Enrique Flores el hecho de que fuera un hombre atractivo le daba una facilidad para que las mujeres lo prefiriesen antes que otro hombre, que fuera un “partido bueno”, esto de hecho está relacionado científicamente con el hecho de que los hombres atractivos denotan una salud muy buena por lo cual las mujeres prefieren un hombre así ya que ellos tienen más posibilidades de procrear un hijo sano. El hecho de que tuviera una magnifica posición dice que este tenía una buena familia, económicamente buena, por lo cual las mujeres ven mucho mejor “partido” ya que nunca tendrán carencias, al contrario, podrían tener sus “caprichitos”. El hecho de que este fuese un hombre exitoso lo hacía ver muy pero muy superior inclusive esto psicológicamente se podría tornar que la mujer lo viera más guapo, un hombre exitoso siempre dejara ese sentimiento de grandeza y admiración, inclusive si es arrogante. Su vestimenta al ser un hombre guapo se veía una persona imponente, perfecto y le daba un toque de más categoría.
El ser un hombre tan influyente trajo que el pudiera tomar decisiones inclusive por el coronel, era muy respetado entre los soldados. Su fisionomía tan varonil lo hacía ver como un hombre “completo” y su personalidad hacia que este fuera “casi perfecto”. Enrique Flores era un hombre muy atractivo gracias a que se le añadía mucho por ser una persona bien vestida, de buena familia, exitoso, con rasgos europeos, a comparación de muchos hombres el destacaba esto se sigue viendo demasiado, muchas veces inclusive puede ser solo la portada de libro y que el hombre en realidad.
“Mandaba uno de los escuadrones otro oficial, el comandante Enrique Flores, joven perteneciente a una familia de magnífica posición, gallardo, buen mozo, de maneras distinguidas, y que a las prendas de que acabo de hablar agregaba una no menos valiosa, y era la de ser absolutamente simpático. Era de esos hombres cuyos ojos parecen ejercer desde luego en la persona en quien se fijan un dominio irresistible y grato”.[1]
Ahora se tomará el caso de Fernando Valle.
Valle es el caso contrario de Enrique, es una persona morena, esto lo hace ver muy normal entre todos los hombres, no tiene ningún rasgo característico, su pelo negro lo hace ver “normal” por lo cual la mujer pierde interés en él, inclusive un hombre así puede perder ante un hombre con apariencia europea por un trabajo, por el simple hecho de que el hombre “guapo” se ve “decente” lo cual es muy discriminante. El cuerpo raquítico lo hacía ver inclusive menos imponente lo cual hacia que no se le tomara tan enserio solo fuera alguien más.
...