Problemas Clave de la Filosofía
Enviado por Raul Reyes • 24 de Mayo de 2016 • Ensayo • 2.732 Palabras (11 Páginas) • 265 Visitas
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD DEL ZULIA
FACULTAD DE HUMANIDADES Y EDUCACIÓN
DIVISIÓN DE ESTUDIOS PARA GRADUADOS
MAESTRÍA EN FILOSOFÍA
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METAFÍSICA
Realizado por: Lcdo. Jairo Enrique González Morales
C.I: 20.660.713
Correo: jairoe_16@hotmail.com
Dirección: Sinamaica, Municipio Guajira, Edo. Zulia.
Telf. (0426)- 2562042
Materia: Problemas Clave de la Filosofía
Profesor: Luis Vivanco
MARACAIBO, 2015
Se emprenderá esta reflexión partiendo de la noción metafísica de la “Nada” y no propiamente de la argumentación filosófica de lo que es el Sér ya que considero ilógico realizar una intervención lógica del problema ontológico del Sér y sus manifestaciones en el existir de los entes y posteriormente negar absolutamente todo en cuanto al sér se refiere con la idea o posibilidad de lo que pudiera ser o no ser la “Nada”.
- NADA
Cuando se hace referencia a la nada no se parte de la definición propia de la misma, y es que sería antagónico concebir una definición de la nada, ya que equivaldría a la existencia del lenguaje en un concepto en específico y, lo que existe, niega toda posibilidad de que lo particular y lo general, el universo, lo completo y lo absoluto no exista. Sin embargo, la nada puede ser definida de forma relativa a su contrario del cual depende necesariamente y, que a su vez, éste rompe con la posibilidad de la no existencia o nada absoluta, es decir, del sér, lo que es, lo que está, lo que existe. Así pues, de la nada solo se predica que “es la negación o carencia de ser"[1]
A partir de la idea de la nada deviene la necesidad de profundizar en ella mediante cuatro divisiones correlacionadas al ser, a saber:
- Nada negativa: se entiende que la nada negativa “es la negación de una perfección no debida al ser.”[2]. Se puede tomar en consideración para comprender un poco esta división de la nada, la facultad corpórea e instintiva del águila, no propia de los hombres, el águila, necesita de sus alas, siendo éstas, partes constitutivas de su cuerpo para poder instintivamente alzar su vuelo, siendo el arte de volar una perfección propia de ella; en cambio, los hombres, no perteneciendo a la naturaleza especifica del águila, deviene la perfección de ésta ave en la nada negativa con respecto a la naturaleza y las facultades de los hombres puesto que no es propio de la corporeidad y facultad de los hombres ni las alas ni mucho menos el poder volar. Es decir, no son las alas, tampoco la facultad de volar, necesarias en el ser de los hombres, ya que no es propio de la esencia de los hombres que sea de este modo.
- Nada privativa: la nada privativa es considerada como “la negación de una perfección debida al ser”[3] en este caso, a diferencia de la nada negativa, se da un cambio accidental en el sér, pero, no una modificación de la esencia del hombre. Por ejemplo; si Aquiles en vez de ser asesinado por París, solo hubiese quedado herido de su talón, aún en el caso de haber perdido su pie, no hubiera dejado esencialmente de ser hombre, y más específicamente de ser el mismo Aquiles. De modo que, aunque permaneciendo sin pie, seguiría siendo él mismo, produciéndose en él la privación de una perfección, en este caso, de su pie, parte constitutiva de su corporeidad.
- Nada relativa: se entiende que la nada relativa “es la negación de tal sér o de tal genero de seres”[4] solemos utilizar en el lenguaje común esta división de la nada para negar la existencia de seres o entes particulares; por ejemplo, -en mi biblioteca de filosofía no hay nada que me sirva para conocer un poco del pensamiento mítico africano-, es decir, que no existe en mi colección de libros, uno que pueda utilizarse para tal fin. Asimismo, ¡no hay nada agradable en esta conversación! -para denotar que no existe empatía o agrado en ésta conversación en particular-. además, no hay nada de harina en la lacena, - para indicar que no hay o no existe en el depósito de la cocina éste producto en particular en éste momento particular-.
- Nada absoluta: se entiende que la nada absoluta “sería la negación de todo sér, inclusive del sér primero y necesario”[5] precisamente por la pretensión de esta negación absoluta hemos partido esta reflexión desde la Nada y no propiamente del concepto de Sér, ya que no puede negarse absolutamente el Sér por ser la nada necesariamente concebida solo respecto a aquello de lo cual es negación, es decir, con respecto al Sér.
Si mi existencia no fuera real, posible, si no existiera el género humano y con el todo lo que está en el cosmos, posiblemente existiera la nada absoluta, pero todo cuanto inmerso en el universo es posible y existe, niega toda posibilidad de concebir una nada absoluta. Se hace necesario preguntarnos lo siguiente: ¿Por qué en vez de no Sér, el mundo Es? ¿Por qué en vez de no devenir de un Sér necesario, todo necesariamente deviene el Él? ¿por qué en vez de no existir, existimos? Posiblemente todo pudo No sér, no existir, pero somos, existimos y esta realidad niega absolutamente la nada absoluta.
- SÉR
El concepto de sér es atributo generalísimo de todas las cosas; sin embargo, no se predica de todas en idéntico sentido, así pues, cuando nos referimos al ser entendemos que “la palabra sér corresponde al infinitivo latino esse. y denota directamente la acción de ser o de existir, o sea la existencia”[6]. Por ejemplo, todo cuanto tiene potencia para llegar a sér existe aunque sea, en un primer momento, pura potencialidad, de ahí que el sér está implícito en toda idea y pensamiento que guarda relación potencial con la realidad concreta del acto de existir. En otras palabras; “Sér es todo cuanto en cualquier forma existe o puede existir”[7]
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