Trabajo de Filosofía. La Libertad

La libertad, según la RAE, es “la facultad humana de determinar los propios actos”. Pero claramente, en la filosofía tenemos distintas acepciones. Usando la definición de Arthur Schopenhauer, este dice que la libertad es “la conciencia lanzada a través de la existencia”1. O de acuerdo a Immanuel Kant, “(...) la libertad es la facultad de iniciar por sí mismo una serie de cambios”2 O en cambio, siguiendo la opinión del ya conocido Frederick Nietzsche, “El hombre es la criatura más libre que conozco…Lástima que siempre lo encuentre encadenado”.3

Pero la libertad en sí, tiene muchísimas formas de ser explicada y entendida. En general, son tres tipos de libertad los aceptados por la comunidad filosófica. Existe la libertad física, la libertad intelectual y la libertad moral. Por lo cual, comenzaremos definiendo y hablando sobre estos tres conceptos.

La libertad física se entiende por sus mismas palabras que es la libertad dirigida  a la falta de obstáculos materiales, al no tener ataduras palpables, como tal puede ser, un hombre libre, un riachuelo libre, un pájaro libre… En fin, la ausencia de límites –tal como se dice en el concepto- físicos. Pero en la libertad física, hay un factor que la condiciona, que es la voluntad. Sin voluntad, claramente no se podría conseguir la libertad física que se anhela. Ejemplarizando; si hay un hombre encerrado en una casa, jamás conseguirá su libertad si él no se lo propone… Si se queda sentado en una esquina, simplemente esperando a que de alguna manera se termine liberando de su presidio, no pasará nada. Pero quizá, con solo algo de voluntad, podría darse cuenta de que escapar era tan fácil como encontrar la ventana… Por lo cual, en este concepto nos queda claro que es un tipo de libertad que además de requerir esfuerzo propio, depende de factores externos para poder conseguirla.

La libertad intelectual, se da a entender como aquella libertad que consiste básicamente en la capacidad del ser humano para decidir, aquella que le permita el poder elegir sus acciones sin prejuicios ni consecuencias externas a la circunstancia; es decir, que uno pueda llegar a tomar decisiones solamente pensando en los factores que rodean a la situación y sin las intervenciones siempre inevitables que extiende la sociedad y sus prototipos. (Aunque esto último se acerca más al tercer tipo de libertad, del cual hablaremos más adelante). Este concepto deriva, de esta manera, en la facultad del pensamiento. Pero, ¿Qué nos lleva a conseguir la libertad intelectual?  ¿El solo pensar y pensar no tomando en cuenta las opiniones externas? Pues claramente no. En esta acepción de libertad, la clave para llegar a disfrutar de ella plenamente, es usando la inteligencia.  

1.Schoponhauer, Arthur. Schopenhauer en sus páginas. Mexico, Fondo de la cultura económica, 1991, pag 210

2.Imanuel Kant, Fundamentación de la metafísica de las costumbres, Capítulo Tercero   (Mare Nostrum Comunicación. Traducción: Manuel García Morente)

3.F. Nietsche. Humano demasiado humano. I, Akal, 1996. 225, p. 152

4.Wolfson, H. A.. (1969). The Philosophy of Spinoza. Unfolding the latent Process of his Reasonning. Vol. I. New York, Schocken Books

Si uno actúa inteligentemente, tomando decisiones de buena manera y no afectando al exterior, puede llegar a alcanzar la libertad intelectual, ya que esta, como se puede inferir, es una libertad que reside en uno mismo. Cada uno decide que tan alta esta su concepto de libertad, y que tan difícil sea alcanzarlo. Una persona esclava puede llegar a sentir que la libertad es solamente el que le dejen expresar su opinión, mientras que un terrorista puede que piense que su libertad intelectual plena es que todos acepten su opinión y la pongan en práctica. Tal como se muestra, la libertad intelectual es solo cuestión de límites.

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