Transdisciplinariedad

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL

“ROMULO GALLEGOS”

DECANATO DE POSTGRADO

DOCTORADO EN CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN

Transdisciplinariedad

San Juan de los Morros, Junio de 2013

Las situaciones y realidades que se presentan a nivel mundial para el momento en los aspectos biológico, psicológico, social, económico, político, cultural, tecnológico y sobre todo en el aspecto ecológico son cada vez más complejas. Estamos inmersos en una crisis paradigmática que afecta en general todo nuestro contexto incluyendo la escuela como institución complementaria en la formación y enseñanza del individuo. Las interrelaciones y las interconexiones tanto a nivel de las naciones como en general, se han incrementado de tal manera, que exigen ser abordadas a través de la confluencia de nuevas disciplinas que más allá de presentar un enfoque corto, reduccionista, limitado e insuficiente presenten mas bien la concurrencia de distintos conocimientos que permitan converger en un intercambio de múltiples saberes para abordar así las diferentes problemáticas que vivimos para el momento. Indudablemente todo lo planteado anteriormente requiere de un panorama teórico fundamentado principalmente en una educación transdisciplinaria sustentada en la complejidad.

Pero ¿Que es la transdisciplinariedad? Según Nicolescu (1996) La transdisciplinariedad Concierne como el prefijo “trans” lo indica, lo que está a la vez entre las disciplinas, a través de las diferentes disciplinas y más allá de toda disciplina. Su finalidad es la comprensión del mundo presente en el cual uno de los imperativos es la unidad del conocimiento y su interés es la dinámica de la acción inscrita en distintos niveles de realidad, y se apoya en la existencia y percepción de los mismos, en la aparición de nuevas lógicas y en la emergencia de la complejidad. En función de lo anterior es posible decir que la transdisciplinariedad puede ser concebida entonces como una visión del mundo que busca ubicar al hombre y a la humanidad en el centro de su propia reflexión, para desarrollar así una concepción integradora del conocimiento. A su vez y con relación a la complejidad Morín (1994) la expone como parte de un pensamiento sistémico, esto quiere decir reconocer la interdependencia de los hechos y el azar o lo impredecible como integrante distintivo de la época. Este modelo de ciencia intenta superar a la ciencia. Todo esto tiene que ver con la diversidad de elementos que componen una situación, un todo que se compone de partes que interactúan y que estas a su vez se encuentran en contacto con el medio ambiente. Toda nuestra vida esta rodeada de situaciones complejas.

Se puede expresar en función de lo anterior que la complejidad es un asunto trans-disciplinar y la transdisciplinariedad es un tema complejo. Ya definidos en forma general los términos referidos, es conveniente ahora considerar como aplicar los mismos en un espacio tan importante y fundamental que determina en gran medida el carácter, la manera de pensar y el comportamiento de los ciudadanos como lo es la educación. Es bueno comenzar diciendo que si no logramos propiciar un verdadero cambio en la educación actual del ciudadano entonces no encontraremos la tan ansiada paz y justicia que el mundo entero reclama hoy en día. La educación para el momento arrastra múltiples fallas tanto en lo estructural como en lo pedagógico, en vista de que los docentes y los planificadores del currículo se han centrado en facilitar mucha información llenando de contenidos a los y las estudiantes y el conocimiento que verdaderamente es lo que importa en realidad es poco.

Para Altschuler (2005) La educación actual sirve entre otras cosas para promover situaciones de conflicto entre los que participan en este proceso y eso lo evidenciamos con tantos problemas que existen para el momento como la violencia, la delincuencia y los diferentes conflictos bélicos presentes en el planeta. En vez de educar para producir ciudadanos responsables y comprometidos con la patria y con la defensa de su país producimos ciudadanos individualistas. En vez de educar para construir comunidades que valoren sus costumbres y tradiciones educamos para construir centros comerciales y gastadores de dinero en potencia.

Es imposible entonces esperar que la persona que sea formada bajo estas concepciones educativas y asuman cargos de relevancia en el país demuestren precisamente humanismo y consideración hacia el prójimo, es aquí donde se hace presente la utopía abstracta que expone Narváez (2006) en la complejidad en la complejidad dialéctica. Considerando todo lo planteado anteriormente se trata entonces de promulgar la libertad y la fuerza de las buenas voluntades y de favorecer las acciones solidarias a través de una buena educación, la cual debe estar dirigida a enseñar a razonar y a cuestionar, enfatizar y estimular el pensamiento solidario y ético para cuestionar directa y especialmente todo lo impuesto por los distintos poderes. De esta manera todos podremos demostrar en su momento una posición crítica ante la creciente avalancha informativa que manipula y desvía la verdadera esencia del ser humano. Razonar y cuestionar es la base para lograr una ciudadanía que posea facultad crítica y que exija a los gobernantes que los lleve por el mejor

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