EL IMPACTO DE LA INDUSTRIA TRANSNACIONAL EN EL DESARROLLO DE SAN JUAN DEL RÍO, QUERÉTARO.

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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

Facultad de Arquitectura

Taller Uno

EL IMPACTO DE LA INDUSTRIA TRANSNACIONAL EN EL DESARROLLO DE SAN JUAN DEL RÍO, QUERÉTARO.

     Integrantes:

• González Ortega Gabriela
• Morales Guadalupe Gabriela Nicole
• Salazar Reynoso Edgar Iván
• Servín García Angélica
• Ugalde Mazón Mireille Michell

Octubre 2015

Planteamiento del Problema y Marco Teórico Conceptual

San Juan del Río, y el país en general se encuentra en un desarrollo industrial trunco e incompleto, debido a errores administrativos y a una dirección deficiente por parte del gobierno local-nacional, lo cual propició una base estructural económica con múltiples fallas  que no se ha podido corregir; por lo que es de comprender la continua dependencia, en gran medida, de la tecnología y los bienes del capital extranjero.

Dado el panorama anterior, posiblemente no se termine con esta dependencia por completo, pero esto no debe ser un impedimento para elaborar estrategias hacia un desarrollo económico e industrial interno con el fin de reformar la estructura económica para dar óptimas condiciones y poder impulsar la industria nacional para generar ese desarrollo en la zona y el país.

Desde 1531, en la época de la colonización, San Juan del Río se formó como un lugar de paso obligado para quienes transitaban del norte al occidente del territorio de México, situación que le favoreció pues todas las caravanas se detenían en este punto para descansar y abastecerse de provisiones, llevando y trayendo lo necesario para el desarrollo de la minería, la agricultura, el turismo y la ganadería de la región; esto a su vez, propició un auge económico y social de la zona.

 A partir de la  reforma agraria, la cual formaba parte de la estrategia de desarrollo económica de la época de la posrevolución, Lázaro Cárdenas mantenía que ésta era diferente para el desarrollo del campo, ya que pretendía fomentar que en las regiones agrícolas se dieran cultivos industriales y de exportación para que los campesinos tuvieran una mejor forma de llegar a un desarrollo económico con potencial  productivo. Como consecuencia de esto las demandas de los campesinos, que consistían en la redistribución de tierras y reorganización de la agricultura, aumentaron a la par de la productividad de la materia prima a nivel industrial; teniendo como resultado una apertura de mercados e industria buscando la explotación de recursos naturales y mano de obra con principios propios del capitalismo.

Lo cual se vio potenciado a partir de 1950 en el periodo de sustitución  de importaciones, en donde se fomentó la producción de frutas, legumbres y cereales para el abastecimiento de importantes empresas procesadoras de alimentos, las cuales en su mayoría se veían obligadas a contar con tecnología y capital extranjero para continuar dentro del mercado interno; por lo que se podría deducir que la industrialización del país estuvo condicionada por la oferta tecnológica existente de los países capitalistas desarrollados, dejando de lado a las manufacturas tradicionales. Así fue como el periodo de sustitución de importaciones  orilló a un endeudamiento nacional, pues el acceso económico a las tecnologías industriales era cada vez más alto y la única forma de costearlo era a partir de la participación del sector público, el cual comenzó a depender, a su vez, cada vez más del capital extranjero haciendo cada vez menos accesibles los créditos y préstamos a las industrias nacionales.

Fue durante el período de 1960 - 1970 que se inició una fuerte transformación urbana, económica y social en el país como consecuencia del endeudamiento y los intereses generados, por lo cual se impulsaron nuevas políticas de “apoyo económico” con bases a la introducción de capital extranjero, las cuales fueron impuestas por Estados Unidos, quien generó la inflación de la deuda y exigió el cobro a sabiendas de que era incosteable, tomando como último recurso estas políticas que en un trasfondo su búsqueda era mermar el desarrollo y forzar a malbaratar los sectores productivos del país mediante la privatización.

Siendo así que el gobierno nacional no sólo permitió el desarrollo de dichas políticas, sino que las fomentó e impulsó con reformas como:

El GATT (Acuerdo General de Tarifas y Aranceles) cuyo objetivo fue constituir un  marco normativo de las relaciones comerciales internacionales favoreciendo a las empresas extranjeras con un trato especial, y que éstas pudieran aplicar garantías para promover su desarrollo económico, afectando al país y restando toda posibilidad de competencia, por consecuencia los países en desarrollo “no esperan reciprocidad” en negociaciones comerciales con los países desarrollados. En Querétaro el gobernador del Estado, el Ing. Manuel González Cosío, apoyó exhaustivamente la industrialización, creando por decreto el Consejo Económico de Querétaro, que establecía entre sus objetivos “conceder mayor impulso a la industrialización”, promoviendo una serie de reuniones con inversionistas nacionales y extranjeros, para traer sus capitales al estado.

Políticas de Industrialización Nacional bajo las cuales se promulgó el decreto que aprobó el convenio entre el gobierno estatal y el Grupo ICA, el cual se hallaba en dirección del Ingeniero Bernardo Quintana, quien aprovechándose de dicho convenio se hizo de varias tierras, teniendo en su poder para la década de 1960 toda una unidad industrial de más de 800 hectáreas en la capital del Estado; en las que estableció fábricas de maquinaria pesada para la construcción, además de promover la venta de lotes a otras empresas, tanto para el establecimiento de nuevas industrias como para la residencia de sus ejecutivos y el establecimiento de una zona comercial y de servicios.

Para 1984 el Gobierno expropió también una superficie de 1 018 788 m2 en San Juan del Río para dedicarlos a usos industriales. Siendo así y con motivo de la construcción de la carretera México-Querétaro, el Grupo ICA, estableció contacto con los grupos de empresarios de Querétaro y con el gobierno local, logrando su participación de manera destacada en el proceso de industrialización de San Juan del Río, gracias a lo cual Grupo ICA también logró adquirir terrenos de la ex hacienda La Laborcilla para continuar con la instalación de parques industriales.

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