La Agricultura

La agricultura.

La palabra agricultura proviene del latín agricultūra cultivo de la tierra, y este de los términos latinos agri campo y cultūra cultivo, crianza; por definición es el arte del cultivo y explotación de la tierra con el objeto de obtener productos con fines humanos o con destino a animales domésticos.

En el paleolítico los animales eran el alimento de pequeños grupos nómadas de cazadores-recolectores, que vivían de tomar de la tierra lo que podían, puede ser que al principio estos grupos comieron carne de grandes animales como carroñeros, hasta que tuvieron la técnica y las herramientas suficientes para cazar pequeños animales; este fue el modo de vida que sobresalió en todo el mundo durante millones de años; la organización social de estas comunidades no tuvo cambios en un gran periodo de tiempo, hasta que el fin de la era glaciar acabo con los grandes animales los cuales eran la fuente más importante de alimento para los humanos, y el retroceso del hielo en el oeste de Asia y en oriente había dado paso a expansiones de bosques y pastos en las cuales habían gran variedad de comestibles como el trigo; pero parece ser que los inicios de la agricultura se dieron en Mesopotamia al norte de Irak, al igual que la domesticación de animales, este periodo se denomina neolítico, el cual es la nueva edad de piedra, se dio hace más o menos 8.000 a 10.000 años; en este periodo fue en donde se dio origen a la agricultura; la cual fue probablemente una necesidad impuesta por las nuevas condiciones del ambiente y que pasaría a convertirse en el principal medio de obtención de alimento en muchas sociedades del mundo.

En cuanto a las herramientas, las primeras que se utilizaron en el neolítico eran casi las mismas que fueron utilizadas en el paleolítico, hechas de madera y piedra, posteriormente estas se fueron modificando para obtener herramientas más aptas y más eficaces en la siembra de alimentos, entre las innovaciones más destacadas esta la introducción del metal (aunque de manera algo pobre), hasta que más tarde se adapto el arado para ser tirado por los animales.

En el neolítico, alguien descubrió que las semillas permitían el nacimiento de nuevas plantas, al principio la agricultura no era tan especializada; los humanos, solo regaban las semillas sobre la tierra esperando que dieran una gran cantidad de alimentos, luego se dieron cuenta que las plantas crecían mejor cuando se enterraban las semillas, para enterrar muchas semillas se necesitaban herramientas, de apoco estas se fueron especializando dando lugar a diferentes herramientas agrícolas, más que la creación de herramientas uno de los problemas fue él como asegurar la fertilidad de las tierras, durante mucho tiempo observando el ser humano se dio cuenta de cuáles eran las mejores condiciones para sembrar, se supo de la importancia de arar el suelo, las cenizas y los desechos naturales como abonos y el riego.

Al comienzo los habitantes agrícolas estaban ubicados en las montañas los cuales bajaron a los valles atraídos por las condiciones de estas tierras, muchas veces para aprovechar el trigo silvestre, la ubicación en los valles posibilito que los primeros agricultores abandonaran la vida nómada, como ya se menciono, los grupos nómadas eran recolectores de frutos y semillas, estos grupos explotaban los suelos que les proveían de estos alimentos, tanto que solo podían volver a estas tierras después de algunos años cuando la vegetación aparecía nuevamente, pero en el valle era diferente ya que cada año quedaba renovado y el mismo terreno podía ser cultivado durante mucho tiempo sin que su fertilidad disminuyera. Por medio de la observación los primeros agricultores se dieron cuenta del beneficio que traía la inundación de los cultivos, gracias a esto los humanos pudieron desarrollar sistemas de riego; en estas zonas fue donde se comenzaron también a construir herramientas para el cultivo, así se comenzó a pensar en un arado sencillo de madera construido con palos, al principio era jalado por una persona y luego se comenzaron a utilizar los bueyes, fue un cambio importante en la manera de cultivar que hasta el momento solo se realizaba con las manos, el cambio de huecos por surcos empezó en Mesopotamia y en Egipto los cuales le dieron una nueva forma a los paisajes de las tierras cultivadas, el arada permitió cultivar grandes tramos de tierra.

Después del periodo mesolítico la vida social comenzó a estabilizarse y se iba separando de la vida nómada, ya que los pastizales atrajeron a animales como cabras, reses y caballos; los cuales al principio eran cazados, aparte de comenzar a sembrar cereales también empezaron a domesticar animales para su provecho,

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