La Mujer En La Edad Media

A mediados del siglo X, se produce inevitablemente una sociedad cada vez mas violenta, producto del desorden político y la inserción de nuevas culturas. Frente a ello, algunos nobles y personajes poderosos decidieron evitar tal violencia habitual, renunciaron a sus cargos para dirigirse a un monasterio y hacerse monjes. Así mismo, surgieron nuevos lazos entre la Iglesia y las ciudades, acrecentó una oposición marcada entre una vida plena religiosa (cristiana) y la mundana, “…entre el mundo y el ideal monástico (…) la agitación violenta de los grandes señores y la calma de los monjes, las leyes de la carne y las del espíritu, se había hecho rígida (…)”. Estas diversas manifestaciones inspiraron en el año 1000 a trasformar la sociedad, la economía y su política, también comenzaron a aceptar al hombre corpóreo, con sus necesidades; aunque otros tantos eclesiásticos no adoptaron una compresión “(…) de la parte natural del propio hombre, de su carácter físico y de sus emociones. Así nació también la marginación de la mujer, considerada demasiado próxima a la naturaleza (…)”.

Las Imágenes de la Mujer

El resultado del choque entre las formas religiosas de la vieja Europa y las foráneas indoeuropeas se hace evidente en el destronamiento y hundimiento de las antiguas diosas con el solapamiento de la imagen femenina. Bien, nunca pudo ser eliminada totalmente de la historia, esta se mantuvo arraigada en la psique colectiva relacionándosela con ciertos ritos mortuorios, natales y de fertilidad de la tierra.

Su extinción solo podría ser con la desaparición del género. Fuimos cómplices del asesinato de las Diosas engendradoras, las grandes parturientas tales como Chantico.

La figura femenina se encuentra secundando a la masculina como respuesta a un sistema patriarcal y patrilineal, ya no son las Diosas partenogénicas, ahora son amantes, esposas e hijas de otros Dioses ensambladas bajo un principio de amor sexual ahora "la Madre Tierra carecía del poder de dar vida a las plantas si no mantenía relaciones con el dios trueno o del cielo brillante, en su aspecto de primavera". El termino Reina proviene de aquel efecto residual de la Diosa en la historia de la humanidad.

Por otro lado, la mujer en Mesoamérica aparece en igualdad con el hombre como lo refiere el mito "cuando Quetzalcoat viaja a Mictlan en busca de huesos preciosos para crear el hombre, tanto los de la mujer como los del hombre estaban contiguos; Quetzalcoat sangró su miembro sobre ellos y gracias a esa penitencia, junto con la de otros dioses, nacen simultáneamente"

En el Códice de Vindobonensis, el nacimiento de la mujer se produce primero que el del hombre. En la tradición oral Mixteca, el nacimiento de estos se da en forma de capullo entre las hojas de Ceiba blanca.

Las mujeres en Mesoamérica tenían sus propias Diosas. Diosas que presidían su vida femenina, una para cada mujer, no solo se veían reflejadas en ellas, sino que estas eran un ejemplo y referente del ser femenino, la diosa moldeaba su actitud mental determinando el comportamiento que cada una debía tener en todos los actos de su vida.

En Grecia y Roma el culto sobrevivió hasta los primeros siglos de nuestra era. El relato más inspirador de la literatura antigua se encuentra en el Asno de Oro escrito por Lucio Apuleyo en el siglo II d. C. en este se lo ve a Lucio invocando a Isis en la profundidad de su tristeza, ella se hace presente y le dice "yo soy la madre natural de todas las cosas, señora y rectora de todos los elementos, la progenie inicial de los mundos, poseedora de los poderes divinos, reina de todo... mi nombre, mi divinidad, se adora por todo el mundo y de diversas maneras, con costumbres variables y bajo muchos nombres" posteriormente en la era cristiana, la Madre tierra y la diosa parturienta se verían unificadas bajo la imagen de la virgen María, existiendo en ella una conexión con el agua vital, milagros curativos, con los árboles las cosechas, ella que " es pura, fuerte y justa"

La Mujer en la Edad Media

Ahora hemos de centrar nuestro trabajo en el papel de la mujer en la Edad Media. Como bien dijimos, la mujer fue despojada del centro de la historia asesinada por las blancas manos del hombre.

El medioevo es la etapa oscura de la historia, llamada así en contraposición a la etapa siguiente, el renacimiento. Una etapa llena de opresión: la de los hombres por la iglesia y de las mujeres por todos, el cinturón de castidad, el derecho a la pernada, el amor cortés, la persecución de las brujas y el concilio del año 585; en el cual se discutió si la mujer poseía o no alma. La mujer sufre una opresión total como ser humano.

La situación de la mujer no era muy favorable. La edad media fue la cuna del mayor genocidio de la historia, tiempos de misoginia. Edad en que el hombre podía matar a una mujer o hacer que el pueblo la perseguir a latigazos por y la multa impuesta a tan obsceno crimen, la mitad del precio de un niño de 14 años. Ella es objeto de pertenencia, no puede disponer libremente de su cuerpo; este, primero pertenece a su padre y luego a su marido.

La mujer no era más que una deficiencia de la naturaleza, o como la denomino Aristóteles “un hombre defectuoso”, una menor de edad, así la catalogó Tomas de Aquino, santo y doctor de la iglesia, a esta hija de Eva, concluyó que por naturaleza propia es de menor valor y dignidad que el hombre, afirmando:

"…el hombre ha sido ordenado para la obra más noble, la de la inteligencia; mientras que la mujer fue ordenada con vista a la generación (...)para cualquier obra que no sea la de la reproducción, el hombre podía haber sido ayudado mucho más adecuadamente por otro hombre que por una mujer…"

“…su naturaleza las hacía no sólo ser más débiles en los aspectos morales, sino también en los físicos, porque podía ser causante de todas sus enfermedades, entre ellas la menstruación -que no era sino todo aquello demoniaco que la mujer expulsaba por la vagina”.

Santo Tomas de Aquino es el reflejo una opinión generalizada de la época de oro de la escolástica; proclamase también que la continencia es indispensable para una religiosidad perfecta. Sostenía que sólo Jesús fue concebido de forma pura, sin infección sexual, sin sufrir el contagio del pecado original en el acto conyugal de la procreación.

Como el resto de los pensadores de la época, condenó a la mujer. En esta condena atribuyó a esta todas las desgracias de la humanidad. focalizando su mirada en Eva, vio en ella la expulsión del paraíso. San Agustín se encargó de engendrar en la mente de los clérigos la duda “¿Por qué el diablo se dirigió a Eva y no a Adán? “ Afirmó que el demonio interpeló

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