Trabajo sobre la mujer en la edad media

Trabajo sobre la mujer en la edad media:

[pic 1]

 Al comienzo de este trabajo mi idea sobre la mujer medieval y su rol era una esclava puesta al servicio del hombre por dios y sin derecho a voto, a prácticamente nada. Sin embargo, mi idea es ahora otra, gracias a la gran influencia del cristianismo, las ideas del norte francés a las que hay que sumar las ideas germánicas, al comienzo de la Edad Media, la mujer comienza a adquirir un papel más relevante en la sociedad europea, aunque hay que mencionar que hay periodos o situaciones en las que las mujeres quedaban relegadas a un segundo plano. Como contrapunto a lo anterior también hay aspectos en los que algunas mujeres se convirtieron en piezas clave como es el caso de Leonor de Aquitania, que lidero una revolución contra uno de sus esposos y más tarde sería la regente de uno de sus hijos, incluso fue mecenas de varios trovadores. Por tanto, la mujer tuvo un pale mas importante del que yo me imaginaba, pero ¿cómo podía estar tan equivocado?, lo más importante ¿qué es lo que me ha hecho cambiar de parecer? Esto es lo que tratare de exponer o explicar a continuación.

• En primer lugar, lo que más me sorprendió es la cuestión del matrimonio, las diversas formas que tenían establecer una relación. Primero hay que aclarar que gran parte de la idea de matrimonio que tenemos hoy surge en este periodo de la de las manos del cristianismo, como puede ser, salvando las distancias, la edad mínima para el matrimonio, para las mujeres esta edad oscila entre los 12 y 15 años de edad y en los hombres entre 13 y 18 años. También se empieza a elegir “libremente” a las parejas y se establece la posibilidad de anular el matrimonio, aunque es cierto que bajo una serie de premisas como podría ser la no consumación o el matrimonio clandestino. El ritual llevado acabo para empezar la cuestión del matrimonio es la ceremonia de los esponsales, donde de da a la familia de la esposa una cantidad de dinero para la compra, simbólica, del poder paterno. A continuación, se llevaría a cabo la traditio puellae, la boda, en ella se lleva a cabo la incorporación de la esposa a la familia de su marido, tras la ceremonia se lleva a cabo un banquete, cuyo tamaño dependía de la posición de las familias.

Esta forma de matrimonio es la que podemos llamar “matrimonio legal” y estaba reconocido por la Iglesia, sin embargo, no es el único que existió: también hubo “matrimonios” que se realizaban sin el consentimiento paterno como el matrimonio a furto y matrimonios sin finalizar, lo que llamaríamos hoy estar prometidos, matrimonio a juras. Sobre el siglo XI la Iglesia cambio du percepción del matrimonio, pasando de considerarlo algo que incitaba al hombre a pecar a verlo como un elemento que evitaría a los hombres desviarse del camino de dios convirtiendo lo en un sacramento y oficializando sus formas y su derecho durante los siglos XII y XIII. Este derecho busco su base jurídica en el derecho romano, en los periodos de crecimiento del cristianismo, la Iglesia coincidió con una Roma de carácter monógamo lo que favoreció a la reducción de la actividad sexual que buscaba la iglesia, que intentaba frenar el desenfreno y libertinaje que había habido en periodos anteriores. En cuanto al aspecto del consentimiento, este proviene de las tradiciones germanas, en las que se entregaba primero a la esposa y a continuación se realizaba la confirmación del acuerdo con la unión carnal. Esto lo recogen los cristianos, dándole cada vez mayor importancia a la consumación, ya que era una alegoría a la unión de Cristo con la Iglesia. También fue la Iglesia la que adopto o impuso, bajo pecado, el matrimonio hetero sexual a través de la carta el bien del matrimonio de San Agustín, cuyos sermones sobre el matrimonio fueron utilizados en las ceremonias. También hay que mencionar la cuestión del amor extraconyugal, las relaciones conyugales dentro del matrimonio estaban consideradas para la procreación, sin embargo, consideraban “el amor” como un impulso irresistible por lo que se creó el concubinato, esto fue fundamentalmente usado por los clérigos, ya que no se podían casar y esta era la forma que tenían de mantener relaciones. Los clérigos y las barraganas lejos de ocultarse actuaban como si fuesen un matrimonio, aunque esta práctica tenía grandes críticos como el Papa Gregorio VII que instauro el celibato, sin embargo, no se le hizo gran caso. Cabe destacar que la iglesia al inicio consideraba el matrimonio como un pecado, recordaba al pecado original cometido por Adán y Eva. Esta relación es importante ya que dará “base” a un argumento que la Iglesia usará para la dominación de la mujer o la superposición del hombre sobre ella, Dios crea al hombre y la mujer sale del cuerpo del este por lo tanto es más carnal que el hombre, por lo que es más propensa al pecado.

Para entender el papel de la mujer en la edad media hay que tener en cuenta que la sociedad de este periodo esta muy marcado por el cristianismo, la mayoría de las fuentes que nos han llegado son cristianas. Con la nueva concepción del matrimonio aportada por los cristianos, en un primer momento de considera que la mujer debe de ser virgen, pura para purgar el pecado de Eva, en algunos casos esa entereza y su rechazo a los pecados carnales las hizo merecedoras de atención, como puede ser el caso de Santa Tecla, seguidora de San Pablo, incluso llegando a participar en las ceremonias eclesiásticas, pero tras el concilio de Éfeso se apartó a la mujer de los oficios relegando su papel al ámbito social, del que se servirán para intervenir en las cuestiones religiosas. Esto en un punto muy importante porque le brinda a la mujer cierta relevancia que hasta este momento no había periodo no podía acceder, ya su papel estaba ligado a las tareas domésticas.

Tras diversos concilios la Iglesia da forma a sus dogmas y asigna roles a los dos géneros, formando así también una idea de mujer cristiana muy específica, quedando esta relegada a la sombra del hombre, además servirán para realzar la honra y el prestigio del hombre. También tendrán importancia las mujeres que crean un linaje, las reinas, que con el tiempo ocuparán puestos de gran importancia. A medida que le cristianismo se consolida comienzan a fundarse monasterios y abadías donde la mujer tendrá la oportunidad de ser abadesas y madres superioras de conventos.

Ya hemos hablado anteriormente de la existencia del concubinato, pero con el paso del tempo a los sacerdotes se les pide que dejen a sus mujeres, ya que muchos de estos habían tenido descendencia y habían heredado. Para evitar esto con las reformas gregorianas se les amenazo con degradaciones, esto en cuanto se refiere a los clérigos de Occidente, en Oriente la situación es distinta. Los clérigos pueden mantener sus relaciones con una mujer, pero solo con una, sin embargo, serán los obispos los que se alejen de los placeres de la carne y de la vida conyugal.

...