Puerto Rico En El Imperio Español:comercio

Puerto Rico en el imperio español: el comercio

Cuando hablamos de negocio nos referimos a la acción de vender, comprar o intercambiar géneros o productos para obtener beneficios. En cuanto a comercio se refiere, Puerto Rico tuvo un papel estratégico y de vital importancia para la defensa de los intereses de la Corona española en América. Geográficamente hablando, la Isla era la más cercana ya que está ubicada en el centro del arco antillano. También dominaba parte de las rutas de acceso del océano Atlántico hacia el mar Caribe, lo que la hizo presa codiciable para los enemigos del imperio. Como consecuencia, España la convirtió en un bastión militar de primera magnitud. Durante los siglos 16 al 18 Puerto Rico vivió sometido a las incursiones de piratas y corsarios.

Sevilla jugó un rol trascendente en ese comercio ya que todos los barcos que iban a América lo hacían a través de esta. Al inicio del siglo XVI los castellanos no tuvieron grandes dificultades en cuestión de asaltos por parte de piratas; por lo que viajaban casi sin preocupaciones. Sin embargo, esto cambió cuando surgió el descubrimiento de la plata en Méjico y Perú, debido a que el mismo constituía gran valía económica. De ahí surge que los españoles adoptaron la estrategia de ir acompañados por convoyes los cuales además de ir armados para defenderlos de los enemigos, llevaban ellos el preciado botín.

Puerto Rico se asoció con España por lo que formó parte del desarrollo comercial trasatlántico. No obstante, durante la crisis del 1530 al 1536 la Isla se afectó y tuvo que entrar en tratos y comercio con Santo Domingo. Por otro lado, ya para los anos de 1540 y 1550 el trabajo mercantil se acrecentó. Ese fue un movimiento crucial y cumbre para el comercio. De ahí surgieron inversiones por parte de los habitantes en la empresa del azúcar. Estos negocios dependían del contacto con la nación española.

En nuestra Isla se importaban y exportaban diversos productos hacia España y otros lugares de América. Entre estos productos estaba el azúcar, el cuero, el jengibre, el tabaco y la madera, entre otros. Para la década del 1570 y 1580 el comercio del azúcar sucumbió y no pudo recuperarse. En cambio el cuero se mantuvo invariable. Cabe destacar que debido a la facilidad de su cultivo, el jengibre fue en incremento total. Esta actividad se convirtió en una sumamente atrayente al extremo de que muchas personas de diferentes oficios dejaron los mismos para dedicarse a cultivarlo.

En conclusión, la ubicación geográfica de la Isla de Puerto Rico fue un punto a favor y bien utilizado por la nación española ya que esta obtuvo provecho de eso y se engrandeció económicamente. Los descubrimientos de tesoros y el metal preciado que es la plata promovieron un gran comercio para el imperio español. Por otro lado, otras naciones como Francia y Holanda envidiaban y deseaban estar en la posición de España.

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