Reforma Y Contrareforma
Enviado por filip0702 • 26 de Septiembre de 2012 • 477 Palabras (2 Páginas) • 688 Visitas
− Reforma y Contrarreforma −
20. Renacimiento y Reforma
Llegados al final de la Edad Media, se observa en toda la Cristiandad una sensación de malestar general a
causa de la situación religiosa, especialmente por la racionalización desencarnada de la teología, que no llega
a la gente y se transforma en una ciencia especulatoria; y por la inmoralidad vigente entre el clero.
De esta situación, y animada por la nueva mentalidad, surge un espíritu común de renovación, de Reforma,
dentro de la misma comunidad eclesial. Ya desde la Baja Edad Media se vislumbraban movimientos de
retorno al evangelismo puro (en contra de la excesiva abstracción teológica).
Es importante tener en cuenta que esta nueva mentalidad pretende reformar la Iglesia sin separarse de ella,
con un espíritu renacentista, conciliador. Este humanismo cristiano es lo que se suele denominar la
philosophia Christi, cuyo máximo representante fue Erasmo de Rotterdam (1466−1536).
Su obra más conocida es El elogio de la locura (1509), en que con una fina ironía, critica la situación
intelectualista en que se halla la escolástica, y propugna la reconsideración de las dimensiones impulsivas y
afectivas, doctrina muy acorde con la revalorización humanística de la persona, del individuo. Su labor
humanística de retorno a los clásicos y a las fuentes se plasma en su edición crítica del texto griego del Nuevo
Testamento.
Este humanismo cristiano recogía en la medida de lo posible la herencia del nominalismo y corrientes del fin
de la E. Media: no cree en las ideas como entidades autónomas, refuerza el valor de lo individual
La philosophia Christi quedó hundida bajo el surgimiento de la reforma protestante.
Este sentimiento general de reforma de la Cristiandad, fue tomado a la tremenda por algunos (Lutero), llevado
así a la rotura de la unidad de la Iglesia, de la unidad religiosa que había mantenido unida a Europa, bajo la
bandera del Sacro Imperio Romano−Germánico.
La Reforma Protestante acentuó en sobremanera algunos aspectos de la mentalidad renacentista: valor de la
libertad y conciencia individual, el valor del retorno a las fuentes. Un claro ejemplo es la exaltación del
individualismo hasta el punto de contraponer el principio del libre examen de las escrituras, rechazando la
autoridad de la jerarquía eclesiástica.
La reforma protestante encontró un magnifico caldo de cultivo entre los pensadores humanistas, y muchos
reformadores fueron grandes humanistas (Melanchton, Zwinglio y Calvino), ya que estos humanistas eran
grandes críticos de la situación de degradación moral del clero y la jerarquía eclesiástica. También hay que
decir que algunos humanistas abandonaron las ideas reformadoras
...