El Valor De Educar
Enviado por irvin1006 • 24 de Marzo de 2012 • 2.001 Palabras (9 Páginas) • 620 Visitas
EL VALOR DE EDUCAR
FERNANDO SAVATER
CAPÍTULO 1
El Aprendizaje Humano
En líneas generales, la educación está orientada a la formación del alma y al cultivo respetuoso de los valores morales y patrióticos, considerada de más alto rango que la instrucción, la cual da a conocer destrezas, técnicas o teorías científicas. Pero separar educación de instrucción resulta imposible, porque no se puede educar sin instruir ni viceversa, ¿cómo puede instruirse a alguien en conocimientos científicos sin inculcar el respeto y los valores?, Es claro que no existe una dicotomía entre educación en instrucción.
Para John Passmore, la enseñanza tiene capacidades abiertas y cerradas. Las capacidades cerradas son estrictamente funcionales, como caminar, vestirse y otras más complejas como leer y escribir. Estas capacidades se pueden ir perfeccionando con el tiempo y la práctica. La característica de esta capacidad es su sentido de utilidad y lo imprescindible que resultan para la vida diaria.
Las capacidades abiertas a diferencia de la anterior son de dominio gradual e infinito, algunas son elementales y universales, como hablar y razonar y otras optativas como escribir poesía o componer música. Su característica, también a diferencia de la anterior es que nunca puede ser dominada de forma perfecta, su pleno dominio jamás se alcanza. Cada individuo va desarrollando su conocimiento sin que nunca pueda decirse que pueda ir más allá.
En las capacidades cerradas, una vez dominadas, la persona pierde interés en sí misma, aunque siguen teniendo sentido utilitario. Por el contrario las capacidades abiertas se van haciendo más sugestivas e inciertas a medida que se progresa.
El éxito de las capacidades cerradas es ejercerlas olvidando que las sabemos, mientras que las capacidades abiertas implica ser más consciente de lo que aún nos queda por saber.
La propia habilidad de aprender es una capacidad abierta, aprender es una actividad permanente del alumno y nunca de aceptación pasiva de los conocimientos ya deglutidos por el ma-estro, siendo lo más importante de la enseñaza, enseñar a aprender.
En la actualidad se exige una educación abierta, tal como lo dice Juan Carlos Tudesco: “ La capacidad de abstracción, la creatividad, la capacidad de pensar de forma sistemática y de comprender problemas complejos, la capacidad de asociarse, de negociar, de concertar y de emprender proyectos colectivos son capacidades que pueden ejercerse en la vida política, en la vida cultural y en la vida en general. (...), lo cual implica que la educación deberá incorporar de forma sistemática la tarea de formación de la personalidad.
La escuela debe reforzar la autonomía personal, el conocimiento veraz, el coraje. Como dice Jerome Bruner, “la escuela compite con “antiescuelas” con relación a la distinción, identidad y autoestima, tales como los medios audiovisuales, las pandillas, movimientos políticos violentos o simplemente el modelo de aquellos que pertenecen a los grupos indiferentes. Estos modelos que compiten diariamente con la escuela traen consigo lamentables consecuencias para la humanidad.
CAPÍTULO 2
El Eclipse de la Familia
En este capítulo se hace referencia al papel que juega la familia como institución educativa.
Lo que los niños aprenden dentro de la familia, relacionado con su convivencia y relación con otros, participación en juegos colectivos es lo que los estudiosos llaman Socialización primaria, en donde el niño se convierte en un miembro más o menos estándar de la sociedad.
La socialización secundaria es pues la continuidad de la socialización del niño, la cual queda a cargo la escuela, grupos de amigos, el trabajo etc. Si la socialización primaria se realizó de modo satisfactorio la socialización secundaria será más fructífera, ya que cuenta con una base sólida sobre la cual asentar conocimientos y enseñanzas.
Dentro del ambiente familiar el niño aprende de una forma diferente de la que aprende en la escuela. Dentro de la familia el clima está dotado de afectividad. Por la afectividad que el niño pueda percibir dentro de su familia, el aprendizaje familiar tiene un trasfondo de coacción en el sentido de la amenaza de perder el cariño de aquellos seres, que sin ellos, el niño no sabe aún cómo sobrevivir. Existe por tanto el miedo de dejar de ser amado. Por esto Goethe afirmaba que da más fuerza saberse amado que saberse fuerte.
La educación familiar funciona por vía del ejemplo, de gestos, humores compartidos, hábitos del corazón, chantajes afectivos junto a la recompensa de premios y castigos, no por sesiones de trabajo como en la escuela. Este aprendizaje resulta de la identificación total con sus modelos o rechazo a tales modelos.
En resumen la familia brinda un menú lectivo con mínima o nula elección de platos pero con gran condimento afectivo. Lo que se aprende en la familia tiene una indeleble fuerza persuasiva. La carga afectiva que recibe el niño en la familia sirve para el fortalecimiento de principios morales que le ayudará a resistir las tempestades de la vida, en los casos favorables, en los que no hubo esa carga afectiva los niños se llenan de prejuicios que son difícil de extirpar.
Las familias están sufriendo una crisis seria en cuanto a su funcionamiento como familia. Para que la familia funcione educativamente es imprescindible que alguno de los padres se resigne a ser adulto. Los padres quieren figurar como “el mejor amigo de su hijo”, un arrugado compañero de juego y la madre cuya única vanidad profesional es que la tomen como la hermana mayor de su hija. Estas situaciones hacen que la familia se vuelva más informal por lo que la formación moral y social de los hijos se encuentra en la cuerda floja; por lo que las instituciones educativas tienen ahora una carga más allá de lo académico.
Los padres están delegando estas responsabilidades a la escuela, la cual no solo tiene que educar en cuanto a una exigencia curricular, sino también a llenar esos vacíos en cuanto a moral, ética y valores en general que las familias están dejando a un lado.
En conclusión, el eclipse en la familia se refiere a que las nuevas generaciones están padeciendo de la ausencia de “buenos modelos ” a seguir, debido a la ausencia de padres y madres en los hogares, la convivencia familiar se hace cada vez más escasa. Los niños pasan más tiempo conviviendo con el televisor que con sus padres. Ante tal carencia la escuela en el
...