El extranjero de Albert Camus.

El extranjero de Albert Camus

La novela empieza cuando Meursault recibe un telegrama, en el cual se entera de la muerte de su madre. Él se encontraba en la ciudad de Argel, ciudad en la que desempeñaba un trabajo sin ambiciones, sin metas. La actitud de Meursault  al pensar que debe viajar varios kilómetros para estar presente en el funeral de su madre es para criticar porque cualquier otra persona mostraría una preocupación pero él no evidencia dolor ante esto sino todo lo contrario su fastidio se fija en el cansancio y en calor que tanto le abruma. A pesar de eso, el ira, aun cuando todo este viaje solo se remite a un mero trámite. En fin, el regresa a Argel y su vida no sufre ningún cambio por la muerte de su madre, y quizás es entendible ya que hace mucho no vivía con ella y ni mantenía algún contacto.

La vida de Meursault, lleva un tono de aburrimiento; a pesar de tener un romance con María, antigua mecanógrafa de su oficina, su vida, su persona parece no tener ningún sentimiento ni de tristeza ni de felicidad.

En la novela, aparecen también algunos vecinos, que desean llevar una relación amical con Meursault, pero estos poco importan para él. Raymond se dirige hacia Meursault para contarle de sus amores y escuchar algún consejo de Meursault; pero él ni caso le hace.

En una ocasión, María le pregunta si el la ama, el responde sin desparpajo que no la ama y que eso no era importante. Incluso le piden hasta matrimonio y a pesar de que eso no representa nada para él, decide aceptarlo

En otra ocasión, Raymond le invita a la playa y le cuenta que es perseguido por un árabe que es hermano de una de sus novias. El día transcurre muy amenamente; suceden una serie de circunstancias: posee un arma; ya que se lo pide a Raymond para que no dispare a los árabes;  y después se encuentra solo con uno de estos,  y al ver que sacan un cuchillo, Meursault se vio obligado a disparar.

Luego de eso, fue llevado a un juez para ser interrogado. El, como a largo de toda la novela, se mostraba indiferente con las circunstancias. El abogado tuvo que ser designado por el juez; ya que a Meursault no le interesaba tener uno. Por otra lado, el abogado se entromete mucho con la muerte de su madre, y lo relaciona con el hecho. Eso le daba cierto enojo a Meursault; por consiguiente, el  protagonista desprecia desde el principio al abogado.

Luego de eso, el juez le hace una serie de preguntas, este simplemente se abstiene a contestar con la verdad por más fría que es. Ante todo esto, el juez empieza a aborrecerlo porque el protagonista ni se conmueve ante el crucifijo presente.

Pasado los meses, Meursault al no ver a su esposa, al no poder fumar, al ver que su libertad fue recortada y limitada comenzó a sentir extraño. Comenzó a sentir que extrañaba hacerlas y que tenía un profundo sentimiento de necesidad por volverlas hacer. Sus días eran muy aburridos, se centraba  en encontrar la manera de como perder el tiempo.

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