Kant Educación y Pedagogía

Kant Educación y Pedagogía

Sentido de la educación

• El hombre es la única criatura que requiere educación, cuidado, disciplina e instrucción.  El hombre llega a ser hombre exclusivamente por la educación.
• La educación es un fenómeno socio-cultural e histórico de carácter intergeneracional.
• Kant considera que la educación es un arte. El origen del arte de educar, puede ser

mecánico, son plan alguno o razonado. El proceso educativo debe ser racional.

• Cuyos principios de la pedagogía es que no se debe de educar con base en el estado actual de la especie, sino teniendo en cuenta un posible mejor en el futuro.
• El fin de la educación es construir un mundo mejor, el perfeccionamiento de la humanidad.
• “Las bases de un plan de estudio deben ser trazados con un carácter cosmopolita”.
• Lo que Kant busca es salvar la virtud de la especie. Teniendo en cuenta la finitud del individuo, solo en la especie, por medio de la vida en sociedad y mediante el trabajo, puede darse la transición de la vida natural a la vida civil. Así el hombre se ve obligado a obrar consultado a la razón antes que recurriendo a sus instintos. Esa transición es la principal responsabilidad de la educación.
• Debemos desarrollar en los alumnos un sentido cosmopolita.
• “El esbozo de una teoría de la educación es una noble idea, y en nada nos perjudica que no estemos en capacidad de realizarlo todavía, pues no se debe de tomar por quimérica una idea y despreciarla como un hermoso sueño porque se presentan obstáculos en su realización.
• La educación es un arte cuya aplicación debe ser perfeccionada por muchas generaciones y en múltiples dimensiones.

Dimensiones de la educación

• Cuidar: es una acción previsora en relación con posibles errores.
• Disciplinar: es domesticación del salvajismo y precisamente por eso, debe iniciarse a temprana edad.
• Cultivar a los hombres: se trata de desarrollar la habilidad o la posesión de la aptitud para orientarse a todos los fines posibles.
• Hacer prudentes a los hombres: que aprendan a vivir en sociedad, que desarrollen ciertos hábitos propios de una vida civilizada.
• Moralizar: es importante no perder de vista que es engañoso fundar la ley moral en inclinaciones y necesidades naturales. Es la más importante de las dimensiones de la educación, pero la menos puesta en práctica.

• “Nosotros vivimos en una época de disciplina, de cultura y de civilización, pero no todavía, de moralización. En la situación actual, se puede decir que la felicidad de los estados crece al mismo tiempo que la desgracia de los hombres. Y cabe preguntarnos, si seríamos más felices en un estado primitivo sin toda la cultura actual. En verdad ¿Cómo puede hacerse feliz a los hombres, sino se les hace morales y sabios?
• La educación no debe ser una actividad mecánica. Debe orientar la autonomía.
• Kant propone que se debe de buscar que el estudiante actúe bien de acuerdo con sus propias máximas y no por costumbre, y que no solamente practique el bien, sino que lo haga porque es el bien.

La pedagogía

• Kant considera que la pedagogía busca transformar el proceso espontáneo de la educación en conocimiento sistemático. En este sentido habla de Ciencia de la Educación que, a su juicio es educación física o educación práctica.
• En la primera rige una fuerza mecánica; en la segunda, una fuerza moral; la primera descansa en el ejercicio y la disciplina, y la segunda se basa en máximas.
• La educación pragmática hace referencia al sentido moral, guarda relación con la voluntad, el deber y la libertad.
• En la educación pragmática es esencial la formación moral que nos da el valor como especie humana.
• Kant distingue claramente las esferas de la naturaleza y de la libertad. En la primera se orienta a buscar la explicación de los fenómenos; en la segunda, no tiene que buscar fuera de sí los principios que justifiquen y legalicen su acción, sino que se determinan así mismo, en forma autónoma.

Del mismo modo como en el campo teórico no se rige el conocimiento por el objeto, sino éste por aquel, en el terreno práctico es el deber puro él marca la pauta frente a lo empíricamente real. De aquí se desprende que la educación, como el derecho y la política, no puede dar un solo paso sin controlar a la moral.

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