La Casa En Llamas Carl Sagan
Enviado por gelykius • 17 de Abril de 2013 • 4.516 Palabras (19 Páginas) • 1.552 Visitas
LA CASA EN LLAMAS carl sagan
Una de las razones que hace tan interesante escribir para la revista Parade es lo que recibo a cambio. Con ochenta millones de lectores se puede hacer un muestreo de la opinión de los ciudadanos de los Estados Unidos. Se puede entender qué piensa la gente, cuáles son sus ansiedades y esperanzas, y quizá incluso dónde nos hemos perdido. En Parade salió publicada una versión abreviada del capítulo anterior en el que se reflejaba la actuación de estudiantes y profesores. Recibí una montaña de correo. Algunos negaban que existiera un problema; otros decían que los americanos estaban perdiendo su aguda inteligencia y saber hacer. Unos pensaban que había soluciones fáciles; otros que la raíz de los problemas era demasiado profunda para resolverlos. Muchas opiniones me sorprendieron. Un profesor de décimo curso de Minnesota hizo copias del artículo y animó a los alumnos a decirme lo que pensaban. Transcribo a continuación lo que escribieron algunos estudiantes de enseñanza secundaria norteamericanos (respetando la gramática y puntuación de las cartas originales):
* No hay americanos estúpidos. Sólo sacamos peores notas en la escuela, y qué.
* A lo mejor es bueno que no seamos tan listos como los otros países. Así podemos importar todos nuestros productos y no tenemos que gastar todo el dinero en las piezas de las mercancías.
* Y si otros países lo hacen
mejor, ¿qué importa? Lo más probable es que acaben viniendo a Estados Unidos.
* Nuestra sociedad va tirando con los descubrimientos que hacemos. Avanza despacio, pero la curación del cáncer está en camino.
* Estados Unidos tiene su propio sistema de aprendizaje y a lo mejor no es tan avanzado como el de ellos, pero es igual de bueno. Por otra parte, creo que su artículo es muy educativo.
* A ningún niño de esta escuela le gusta la ciencia. Realmente no entiendo de qué va el artículo. Me pareció muy aburrido. Simplemente, no me interesa.
* Yo estudio para ser abogado y, francamente, estoy de acuerdo con mis padres cuando dicen que tengo un problema de actitud con la ciencia.
* Es verdad que algunos niños americanos no lo intentan pero, si quisiésemos, podríamos ser más listos que cualquier otro país.
* En lugar de hacer deberes, los niños miran la televisión. Tengo que reconocer que yo lo hago. Me he puesto el límite de unas cuatro horas al día.
* No creo que sea culpa del sistema de la escuela, me parece que todo el país pone un énfasis insuficiente en la escuela. Mi mamá prefiere verme jugar al baloncesto o al fútbol que ayudarme a hacer un trabajo. Conozco muchos chicos a los que les da totalmente igual no hacer bien su trabajo.
* No creo que los chicos americanos sean estúpidos. Sólo ocurre que no estudian bastante porque la mayoría trabajan... Mucha gente dice que los asiáticos son más listos que los americanos y que lo hacen todo bien, pero
no es verdad. No son buenos en deportes. No tienen tiempo de hacer deporte.
* Yo me dedico a hacer deporte, y tengo la impresión que los otros chicos de mi equipo te empujan a sobresalir más en el deporte que en los estudios.
* Para ser los primeros tendríamos que ir todo el día a la escuela y no hacer vida social.
* Ahora entiendo por qué muchos profesores de ciencias se enfadan con usted por menospreciar su trabajo.
* A lo mejor, si los profesores fueran más interesantes, los chicos querrían aprender... Si la ciencia se presentara de manera divertida, los chicos querrían aprender. Para ello, ya sería hora de empezar a dejar de enseñarla como meros hechos y números.
* Francamente, me cuesta creer los datos sobre la ciencia en Estados Unidos. Si estamos tan atrasados, ¿cómo es que Mijaíl Gorbachov vino a Minnesota y a Datos de Control de Montana para ver cómo funcionan nuestras computadoras y eso?
* ¡Unas 33 horas para los de quinto curso! En mi opinión es tanto que casi son las mismas horas que un trabajo de jornada completa. Así, en lugar de hacer deberes, podríamos ganar dinero.
* Cuando comenta lo atrasados que estamos en ciencia y matemáticas, ¿por qué no intenta decirlo de una manera más amable?... Debería sentir un poco más de orgullo de su país y sus capacidades.
* Creo que sus hechos son poco concluyentes y las pruebas muy flojas. En general, ha planteado un buen tema.
En general, estos estudiantes no creen que exista un problema
serio; y, si existe, no puede hacerse gran cosa al respecto. Había muchos que también se quejaban de que las conferencias, las discusiones en clase y los deberes eran «aburridos». Para una generación televisiva que sufre trastornos de déficit en diferentes grados, desde luego son aburridos. Pero pasar tres o cuatro cursos practicando una y otra vez la suma, resta, multiplicación y división de fracciones puede aburrir a cualquiera... y la tragedia es que, por ejemplo, la teoría de la probabilidad elemental está al alcance de esos estudiantes. Igual ocurre con la presentación de las formas de plantas y animales sin evolución; la historia como guerras, fechas y reyes sin el papel de la obediencia a la autoridad, la avaricia, la incompetencia y la ignorancia; el inglés sin la introducción de nuevas palabras en el lenguaje y la desaparición de las viejas; y la química sin el origen de los elementos. Se ignoran los medios para despertar el interés de estos estudiantes a pesar de tenerlos a mano. Dado que lo que queda grabado en la memoria de los alumnos a largo plazo, de todo lo aprendido en la escuela, es sólo una pequeña fracción, ¿no parece esencial plantearles temas que no sean aburridos... e inculcarles el deseo de aprender?
La mayoría de los adultos que me escribieron consideraban que era un problema importante. Recibí cartas de padres que me hablaban de chicos con curiosidad dispuestos a trabajar duro, con pasión por la ciencia pero carentes de un entorno adecuado o de recursos
para satisfacer sus intereses. Otras cartas eran de padres que no sabían nada de ciencia y sacrificaban su propia comodidad para que sus hijos pudieran tener libros de ciencia, microscopios, telescopios, ordenadores y equipos de química; de padres que decían a sus hijos que el estudio disciplinado los sacaría de la pobreza; de una abuela que llevaba el té a un estudiante que seguía haciendo los deberes a altas horas de la noche; de la presión de los compañeros para no destacar en la escuela porque «hace que los demás parezcan malos»,
Aquí hay una muestra —no una encuesta de opinión, pero sí comentarios representativos— de otras respuestas de padres:
* ¿Entienden los padres que no se puede
...