PARTIDOS Y SISTEMAS DE PARTIDOS GIOVANNI SARTORI

derecho constitucional mexicano

PARTIDOS Y SISTEMAS DE PARTIDOS

GIOVANNI SARTORI

PARTE I. EL MOTIVO ¿POR QUÉ HAY PARTIDOS?

1. EL PARTIDO COMO PARTE.

Este capítulo nos habla de la transición que hubo del término “facción” al término del “Partido” como hasta hoy en día lo conocemos. Se solía tener la errónea idea de que la palabra facción siempre tenía un enfoque de carácter malo, mientras que con la palabra “partido” no fue así, por lo que se opto por emplear la segunda. Ésta proviene del latín “partidare” que significa dividir. Todo este movimiento fue un verdadero cambio dentro de la política, llevo muchos años para que por fin pudiera ser aceptado en su totalidad, un tortuoso proceso.

El igual que se dio una transición del término “facción” a “partido”, también hubo un enorme cambio en cuanto a las tendencias políticas, esto gracias al Pluralismo. En la antigüedad era mal visto que existieran ideas distintas a las que la colectividad nos imponia, pero con el paso del tiempo, se fue aceptando la pluralidad de partidos y de ideas. El pluralismo se basa en tres importantes niveles; Social, Cultural y Político. Por lo tanto, podemos afirmar que gracias al pluralismo se consiguió una diversificación del poder.

Posteriormente también se habló de cómo fue que se fue incluyendo a los partidos dentro del gobierno, esto represento un gran cambio y fue benéfico para que el gobierno fuera más responsable, democrático y existiera un mejor pluralismo como ya se mencionó antes. Dicha coalición entre gobierno y partidos ayudo a que se eliminaran los gobiernos autoritarios.

Es necesario mencionar que todos estos antecedentes son de vital importancia para comprender a los sistemas de partidos, ya que éstos son un pilar fundamental del gobierno, y si analizamos la historia de éstos, podemos darnos cuenta de cómo han evolucionado con el paso del tiempo además de tener en cuenta tres premisas que nos ayudan a entender mejor; los partidos no son facciones, los partidos son parte de un todo y los partidos son conductos de expresión.

2. EL PARTIDO COMO UN TODO.

Este capítulo es sobre como los partidos políticos también existen en el entendido de que son un “todo” y en estos casos no existe el pluralismo del que se habló con anterioridad. El capítulo inicia hablándonos de cómo es que en el mundo existen o existieron gobiernos de partido único (Cuba, Alemania Nazi, Italia Fascista) y en contraparte, también existen gobiernos donde se da la no existencia de ningún partido (Arabia Saudí, Yemen, Jordania, etc.), por lo tanto se pone en tela de juicio un debate sobre cuál de estas dos formas de gobierno es más adecuada al momento de gobernar, así como sus similitudes y discrepancias entre ambas.

Otro punto importante es la crítica que se le hace a este sistema unipartidista, algo a destacar es que en este sistema se cuestiona si es necesario que exista un partido político, esto debido a que por ser un “todo” y sin tener competencia, las elecciones resultarían innecesarias, pero como contraparte podemos decir que la existencia de un partido le daría cierta legitimidad al partido y gobierno a pesar de ser un Estado-Partido.

Y para finalizar, se toca el punto de que dentro de los partidos puede existir o no, el pluralismo dentro de ellos, esto significa que subsistan varias unidades más pequeñas dentro del mismo partido, esto dependerá en cierta medida de las libertades y medidas de autoridad que existan dentro de un sistema monopartidista.

3. EL MARCO PRELIMINAR.

Existen tres funciones que se realizan sistemáticamente dentro de los partidos y a su vez, éstas tres pertenecen a niveles distintos de abstracción de los partidos, estamos hablando de la canalización, comunicación y expresión. Las tres tienen estrecha relación y a su vez cada una de ellas tiene un nivel diferente de aplicarse, por lo tanto, afirmamos que la comunicación es una herramienta menos empleada debido a que es de carácter general y existe dentro de todos los sistemas que tienen partidos o incluso en lo que no existen, mientras que la canalización tiene un ámbito más estrecho pues en las sociedades que no tienen partidos no se le da gran importancia, finalmente la expresión es aún más estrecha que la canalización, debido a que sólo se aplica en comunidades políticas con autonomía de partidos.

También se habla de la definición de “partido” la cual está poco delimitada e incluso podría tomarse como un sinónimo de facción. Podemos definir al partido como una macro facción con tintes normativos que aspiran al poder. Pero al mismo tiempo, nadie ha logrado definir concretamente este concepto y por lo tanto puede tomar diversas acepciones.

A raíz de lo anteriormente expuesto, se afirma que es imposible crear una teoría acerca de los partidos, esto es por diversas razones, por ejemplo, podríamos comenzar por decir lo que un partido no es, así como establecer sus funciones. Sería necesario concretizar una visión general sobre los partidos políticos para comenzar un estudio más preciso sobre éstos.

4. EL PARTIDO POR DENTRO.

Para poder estudiar un partido no sólo basta con un análisis tomándolo como un todo, sino que debemos de descomponerlo y adentrarnos en sus elementos interiores o también llamadas subunidades ya que aquí se encuentran muchos procesos interiores muy importantes, como la toma de decisiones, resolver conflictos, elegir dirigentes, etc. Incluso podríamos definir al partido como un sistema político miniatura, de ahí que es menester conocer su funcionamiento interno.

Es de aquí de donde se desprenden tres elementos que nos ayudan a entender el funcionamiento interno e un partido, nos referimos a las fracciones, facciones y tendencias. Podemos decir que las fracciones son todas aquellas subunidades en las que se fragmenta un partido y además de contar con las formas y medios de la interacción que existe dentro de un partido, después encontramos las facciones, que son todas aquellas organizaciones internas dentro de un partido con cierto grado de cohesión y disciplina y en un menos rango encontramos a la tendencia la cual es un conjunto de actitudes políticas dentro del partido pero que no alcanzan el grado de cohesión y organización que tiene una facción.

Con el surgimiento de estás tres ramificaciones se hace un profundo estudio de cómo se lleva a cabo la vida política interna dentro de un partido, por ejemplo, se habla sobre las motivaciones que impulsan a un individuo a querer formar parte de éste, ya sea por fines de organización, ideología, motivación o la oposición política. Con base en lo anterior se presentan varios casos en los cuales las fracciones, facciones o tendencias juegan un papel fundamental dentro de los partidos, por ejemplo, existe el supuesto de que subsistan facciones pero que no pertenecen a ningún partido y en caso contrario, también encontramos la situación de países como Alemania o Japón, en los cuales existen fracciones radicales dentro de los mismos partidos. Por lo tanto podemos concluir que dentro de los partidos existe mucha actividad la cual es necesario analizar para poder comprender su comportamiento, ya que las fracciones, facciones  y tendencias juegan un papel importante en el desarrollo del partido.

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