RESUMEN DE INVESTIGACIÓN SOBRE VIOLENCIA EN LAS ESCUELAS Centro Gumilla Prof Ivis Rivas D1-2016

Según el informe final de la investigación sobre la violencia en las escuela menciona que la Organización Mundial de la Salud (2000) afirma que aproximadamente 1,6 millones de personas murieron en el mundo como resultado de la violencia. Este fenómeno empieza a ser notable en Latinoamérica a partir de los años ochenta, en Costa Rica y Argentina con bajas tasas de homicidios, como en Colombia y el Salvador donde ya las tasas eran muy altas(Briceño-León, 2002).

La violencia es un hecho que se ha desarrollado como una epidemia en todo el mundo, manifestándose de diversas formas y incluyendo espacios cada vez más amplios como en la familia, la institución escolar, las calles, entre otros, constituyendo un fenómeno que tiende a multiplicarse, agudizándose en los últimos 15 años en todas las sociedades de América Latina

De Roux en su texto Subdesarrollo, urbanización y violencia (1997) explica refiriéndose a América Latina, que la violencia ha venido incrementándose con una velocidad que supera incluso su crecimiento demográfico, llegando a adquirir carácter endémico en algunas ciudades. Briceño-León (2002) Para el autor los intérpretes de estos hechos de violencia pertenecen a la segunda o tercera generación urbana, es decir, individuos que nacieron en las ciudades que han perdido todo vínculo y memoria con su pasado rural. Estas últimas generaciones experimentan un quiebre de expectativas, la falta de crecimiento económico y las posibilidades de mejoría social, producen un abismo entre lo que se aspira como calidad de vida y las posibilidades reales de alcanzarla (Briceño-León y Mayorca, 2004).

Para De Roux (1997), la violencia es agenciada por varios actores sociales, así como también es resultado de la incapacidad de controlar la tenencia de armas por parte de las autoridades. En cuanto a los factores que influyen en los índices de violencia urbana este autor señala que, son las rupturas familiares, el desempleo, la desintegración de los valores tradicionales y culturales, las carencias afectivas, la falta de oportunidad, los factores de exclusión social y la marginalidad social los que estimulan a la mayoría de los jóvenes a identificarse con las pandillas. Siendo estos los principales victimarios y víctimas de este hecho, dándoles la ocasión y la justificación para violentar despóticamente, hasta llegar a cometer homicidios y los delitos contra la propiedad.

Durante los últimos años, la violencia ha representado uno de los principales factores involucrados en la morbilidad y mortalidad de la población juvenil; en las últimas dos décadas se ha constatado que en la República Bolivariana de Venezuela ha habido un proceso de transición epidemiológica de la violencia que se manifiesta en un incremento en la mortalidad por causas externas o violentas, siendo la segunda causa de muerte en la población, mientras que para los grupos entre 15 y 29 años de edad, el homicidio se estableció como la primera causa de muerte.

Actualmente los jóvenes están socializando en un habitual ambiente violento que va desde su familia hasta su entorno social y ellos mismos se establecen en actores de violencia (Organización Mundial de la Salud, 2002). Esa violencia juvenil daña profundamente no sólo a las víctimas, sino también a sus familias, amigos y comunidades así como la calidad de vida.

La violencia afecta con especial atención a un grupo etario de alta vulnerabilidad, los niños, niñas y adolescentes, haciendo necesaria la profundización en la investigación de este fenómeno desde los principales espacios de constitución social del sujeto, particularmente durante las edades en que adquiere especial relevancia la relación con el grupo dentro de los códigos de interacción social, que permanecerán en el “yo social” de las edades futuras. En tal sentido, el recinto escolar representa, no solo el segundo agente socializador del individuo, sino el primer escenario de representación de la interacción social del sujeto fuera del grupo primario: la familia, y es en dicho medio donde los individuos reproducen, en procesos dinámicos, la gama de conductas manifiestas que constituirán su forma de relacionarse con la sociedad.

En un mundo de múltiples complejidades como el contemporáneo, la Escuela debe responder a la histórica y peculiar realidad a la cual se enfrenta, todo esto como producto de diversos hechos sociales. Bajo esta perspectiva, los autores antes citados presentan un trabajo de investigación basada en la Violencia, sus características, implicaciones y su proyección, como parte de la vida cotidiana a la cual se enfrentan todos los actores del hecho educativo (estudiantes, docentes, directivos, padres y representantes), considerando todos los factores que fomentan el desarrollo de esta situación.

En este contexto se relaciona esto con la estructura social de América Latina, considerándola como un hecho bastante expandido, y que en la mayoría de loso casos se concentra en las ciudades más pobladas, ejecutadas por ciudadanos urbanos que han nacido y se desenvuelven en ese ambiente de violencia, que a propósito de las circunstancias, se convierten en una dicotomía de víctimas y victimarios. Ya en esta compleja relación dialógica para entender las causas, se pueden mencionar la exclusión social, expresado en problemas de índole familiar, cuya acción queda vinculada esencialmente a deficiencias en las políticas sociales, tales como desempleo, ausencia de valores, exclusión educativa, pocas oportunidades de acceso a servicios tecnológicos óptimos ,marginalidad, pobreza, drogas, violencia familiar, inseguridad, déficits alimentarios, atendiendo a los más relevantes, que no llegan a cubrir las necesidades básicas de la estructura familiar. En este sentido el espacio geográfico tiene gran influencia en el desarrollo de la violencia, el autor señala que en las

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