Reseña el jurado seducido

EL JURADO SEDUCIDO

PRIMERA PARTE: CASOS DE AMOR Y DESAMOR

El autor Luis De La Barreda Solórzano realiza la obra “El Jurado Seducido. Las Pasiones Ante La Justicia” donde conjunta una serie de crónicas y reflexiones sobre la justicia y la pasión y como ambas coexisten en la realidad social y en el Derecho.

1. El jurado seducido

El autor comienza por contar la historia de su maestra de historia María Teresa Landa en la Preparatoria Uno, que tenía su sede en el Colegio de San Idelfonso. El relata la pasión que sentía por su maestra que tenía una gran devoción y vocación por su asignatura.

El autor, como un alumno interesado y encantado por su maestra y la asignatura, solía pasar tiempo con ella, ya habiendo creado una relación amistosa entre alumno y profesora, la maestra Teresa Landa le contó al autor un pasaje de su vida, un apasionante, decepcionante y desgarrador pasado.

La maestra María Teresa Landa fue la primera Señorita México de la historia en 1928, quien tras haber disfrutado de la fama conoció el amor cuando el general Moisés Vidal llego a su vida, quien tenía 35 años, 17 mayor que ella. Eso pasó un 3 de mayo de 1928 y contrajeron matrimonio en octubre del mismo año estableciendo su domicilio conyugal en casa de los padres de María Teresa. Como eran aquellos tiempos, ella se quedaba todo el día en casa, y él como hombre celoso no la dejaba sola, al igual que le prohibía leer el periódico con la excusa de que una mujer no tenía porque enterarse del crimen.

Una mañana del 25 de agosto de 1929 la pesadilla inicio, había un periódico de Excélsior sobre la mesa que en su segunda sección decía: “Acusan de bigamia al esposo de Miss México, María Teresa Landa”. La verdad era que Moisés Vidal ya había contraído matrimonio con María Teresa Herrejón en abril de 1923, tuvieron dos hijas y habían establecido su domicilio conyugal en Veracruz, sin embargo, al ser ascendido a general, Vidal viajó a la Ciudad de México donde conoció a María Teresa Landa. Vidal había sido demandado por su esposa, quien buscaba a su consorte. Él prometió una pensión para sus hijas y visitarlas seguido, eso nunca pasó.

La bigamia esta regulada en el art. 205 del Código Penal vigente para la Ciudad De México:

ARTÍCULO 205. Se impondrán de uno a cinco años de prisión y de ciento ochenta a trescientos sesenta días multa, al que:

1. Se encuentre unido con una persona en matrimonio no disuelto ni declarado nulo, y contraiga otro matrimonio; o
2. Contraiga matrimonio con una persona casada, si conocía el impedimento al tiempo de celebrarse aquél.

Ese mismo domingo 25 de agosto, cuando llego el marido se sentó en su sillón dejando su arma sobre una mesita. María Teresa la vio, la tomo y apunto a la sien de su marido, tras una discusión desesperada ella vació el arma en el cuerpo de su esposo.

En aquel entonces México tenía un jurado popular que debía escuchar planteamientos lógico-jurídicos, pero que era susceptible a escuchar dotes oratorios que daban golpes sentimentales al jurado, además, María Teresa Landa poseía una belleza que no requería descripción oral o argumentación alguna. La acusada fue absuelta, cuya sentencia no fue del agrado de los círculos jurídicos, tras cinco horas de alegatos finales por parte del abogado defensor. Eso marco el fin del jurado popular en México.

1. Ningún reloj para amar

Una historia de “amor” que trascendió a lo largo de los años en Estados Unidos, que inicia con la maestra Mary Kay, de 34 años, y su discípulo Vili Fualaau, de 13 años. Quienes, atraídos mutuamente, dejándose llevar por el deseo o el amor, tuvieron una relación hasta que la maestra fue denunciada por su esposo. La maestra fue a prisión algunos meses y fue liberada con la condición de no acercarse a Vili. Pero la pasión pudo más que una orden jurisdiccional, ambos regresaron a las andadas, nuevamente la maestra fue denunciada y permaneció siete años presa, en ambas ocasiones que fue aprendida, dio a luz a una hija de Vili.

Vili asegura que no puede ser feliz sin ella, que ninguna otra relación lo hace o lo hará feliz. Solo la prisión los ha mantenido separados, ahora Vili de 21 años y Mary de 42, siguen deseando estar juntos, Vili no deja de amar a su maestra y ella a él. Ambos han sufrido el linchamiento moral a lo largo de los años. Ya siendo ambos mayores de edad ¿Por qué Vili no logró olvidarse de la maestra? ¿Por qué no solo dejarlos amarse tras haber padecido el escarmiento y rechazo social?

1. Los besos de Eros y Thanatos

Eros y Thanatos fungen como entes completamente opuestos; el primero es el amor, mientras que el segundo es la muerte.

Así mismo el autor relata una serie de historias que combinan el amor y la muerte, el impulso del deseo que, llevado al extremo, el instinto erótico y el instinto de muerte que genera el odio y la destrucción por el deseo frustrado de algunos.

1. El delito de desear

Un pescador del puerto de Dzilam Gonzáles, Yucatán, se encuentra preso, sometido a proceso penal en el juzgado octavo de defensa social de Mérida, por enviar cartas de amor y deseo a una mujer ya separada de su marido. El cargo fue por ¿Ultrajes a la moral pública? Si, un agente del Ministerio Público ejercito acción penal por eso, solo por un pescador que declaro su amor en cartas, no se menciona si hubo algún tipo de abuso u hostigamiento sexual que agraviara a la mujer, simplemente un hombre que expreso su amor en cartas y fue denunciado por el padre de la mujer, y que lo extorsiono por 16 mil pesos.

1. El impedimento de la infidelidad

Los legisladores del PAN tienen algo en común con las naciones orientales que tienen legisladores israelitas, que en base a normas de índole religioso el adulterio era un delito. Los legisladores del PAN, así como los de otras naciones que sancionan el adulterio, no terminan por entender las relaciones y las pasiones de la sociedad, los impulsos que la fortísima atracción inspira, excitando la imaginación y engrandeciendo el deseo.

1. La absolución de Gloria Trevi

El caso de Sergio Andrade y Gloria Trevi tuvo un impacto nacional en las televisoras, ya que, se denunciaba que Gloria Trevi incitaba a integrantes del grupo de Sergio, en su mayoría menores de edad, a que tuvieran relaciones sexuales con él. Un caso que para el juzgador fue más difícil de solucionar de lo que parecía.

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