El Mercader

El mercader de Venecia. Una película muy interesante que interpreta a la antigua Venecia del siglo XVI en donde todos los judíos eran discriminados, se tomaban medidas para hacer saber cuál de la población era judío, señala que los que eran judíos tenían que portar un gorrillo rojo en sus cabezas a si se diferenciaban de la demás población que en su mayoría eran cristianos. Se menciona que los judíos no podían poseer ninguna clase de propiedad por lo tanto la mayoría de los judíos empezó a practicar la usura que es el préstamo de dinero con intereses que en ese entonces era una práctica contraria a la ley que tenían los cristianos que eran la mayoría de la población. Ya en este punto podemos observar que con esa práctica los judíos ya empleaban lo que eran los contratos que son el acuerdo de dos o más voluntades, en este caso el judío que prestaba dinero y el que aceptada el préstamo pero con un interés extra que se tenía que pagar por el préstamo echo. La mayoría de la población dejaba de paso esta práctica de los judíos pero para los cultos y fanáticos religiosos se tomaban las cosas muy apecho y todo es distinto ellos discriminaban, reclamaban, encerraban y mataban los judíos que practicaran la usura.

Nuestra historia empieza con el joven noble Bassanio que le ha pedido a su amigo Antonio que le preste una gran cantidad de dinero lo que son 3000. Para poder estar al nivel de los demás pretendientes de una dama muy hermosa llamada Porcia. Necesita el dinero para estar a nivel de los demás y poder ir a verla hasta su tierra. No obstante la fortuna de Antonio se halla comprometida en sus negocios, todos sus barcos están diseminados en distintos puertos y en el mar. En esa situación, no pueden hacer gran cosa, excepto recurrir al prestamista Shylock quien está resentido con Antonio por que éste le ha escupido en el mercado y le ha tratado como perro en más de una ocasión. De hecho, Shylock está perfectamente al corriente del desprecio que los cristianos sienten hacia él y todos los judíos. Pero lo que Antonio le está proponiendo tan sólo es una transacción comercial un préstamo el no busca su amistad ni reparar sus ofensas. Finalmente el prestamista accede pero no sin antes imponer una condición, una gran condición la cual consiste en que si Antonio no devuelve el préstamo a tiempo, Shylock le arrebatará una libra de carne de su cuerpo como pago y le será arrancada de la parte del cuerpo que Shylock desee, sin duda alguna se trata de un pacto muy cruel. Sin embargo Antonio está convencido de que no tendrá ningún problema en la devolución y por tanto lo acepta el préstamo y la condición pactada. Ya que según Antonio un mes antes de que llegue la fecha de vencimiento de su adeudo el recibirá mas de 4 veces lo que debe gracias a sus negocios en altamar. Como podemos observar este contrato con estas condiciones en nuestra actualidad seria nulo ya que la carne humana no es comerciable. Ya lo pactado, pactado esta.

Lo que el prestamista no sabe es que su hija Jessica se ha enamorado de un noble cristiano llamado Lorenzo. El judío ha perdido a su esclavo Gobbo en favor de Bassanio, y ya no le queda compasión alguna para los cristianos. Mientras Shylock ha salido para asistir a una cena que fue invitado. Lorenzo, sus amigos, Bassanio y Graciano protegidos por la oscuridad y unas máscaras, ayudan a Jessica a escabullirse sigilosamente de casa de su progenitor. La joven judía se lleva consigo el dinero de su padre para poder afrontar su nueva vida. Más tarde, Lorenzo y Jessica parten hacia Belmont.

Mientras tanto, en Belmont, la bella dama Porcia se ve abrumada por la creciente cifra de pretendientes que acuden a su casa. De un modo u otro, ninguno resulta apropiado, pues la voluntad de su padre ha establecido que quien sepa elegir el cofre correcto será dueño del corazón de su hija y de toda su fortuna. Hasta ahora, lo que la alivia es precisamente el fracaso de todos ellos. Y entonces, aparecen Bassanio y los suyos. Porcia la bella dama cae rendida ante el porte y la imagen del joven y comienza a albergar la esperanza de que él sea su marido. Y en éstas que Graciano también

...