ENSAYO SOBRE LA OBRA PADRE RICO, PADRE POBRE

CAMBIO DE VISIÓN, TOMA DE CONTROL

ENSAYO SOBRE LA OBRA PADRE RICO, PADRE POBRE

ROBERT KIYOSAKI

Cuando  hablamos de riqueza se asume que básicamente nos avocamos a hablar de personas ricas, personas que poseen mucho dinero, aquellas que han nacido predestinadas para encontrarse en determinado grupo social,  en donde el acceso es limitado y donde pocos de los que pueden ingresar se mantienen.

Es allí donde surgen interrogantes como: ¿será esta aseveración realmente cierta…o no?, ¿será verdadero decir que necesariamente se necesita dinero para ser rico?, ¿solo algunos pocos pueden encontrarse en determinado nivel social? o ¿Qué es lo que esos pocos hacen de lo que la mayoría no?

Al respecto, y tras la lectura de “Padre Pobre, Padre Rico” se obtienen conocimientos e ideas que nunca antes se habían tocado desde esta perspectiva o no  se habían tomado en cuenta desde el enfoque que realiza Robert Kiyosaki.  El criterio básico que se debe rescatar es sin duda alguna la educación financiera que no todos los integrantes de las sociedades recibimos durante nuestra educación básica regular, no de la misma manera, ya que dicha educación se da exclusivamente dentro del seno de los hogares, de padres a hijos. Es este uno de los puntos más relevantes del aspecto generador de riqueza, que  puede marcar el inicio de toda una revolución, si así se quisiera, aunque es poco probable que suceda pues no todos nos encontramos en la capacidad de desarrollarlo y además  de ello existen muchos factores que impedirían que esto se lleve a cabo.

Este aspecto podría tomar diversas connotaciones ya sean sociales, económicas, políticas, académicas, etc.; además podrían generar controversias  apasionantes  ya que se pondría en discusión opiniones desde el punto de vista rico – pobre, empleador – empleado, jefe – subordinado, etc. Todo ello debido a que cada una de las personas posee ciertas características e intereses que las diferencia las unas de las otras, motivo por el cual se “descuida” en gran medida la educación financiera.

Hay una serie de detalles que descuidamos en nuestra vida, las cuales nos mantienen en una posición u otra. Lo que el autor recomienda es comprender de manera sencilla y clara como se manejan los números, informarse constantemente, mantenerse alerta a las oportunidades que la vida pone frente a nosotros, las cuales muchas veces pueden pasar inadvertidas por falta de criterios y experiencias que el desarrollo de la inversión puede ofrecernos.

Para lograr el éxito económico no sería absolutamente necesario poseer solo educación financiera (aunque es altamente relevante), hace falta también ser poseedores de otros ingredientes tales como la audacia, emprendimiento, perseverancia, tolerancia al riesgo, adaptabilidad e ingenio; estos factores influyen de manera positiva en el desarrollo de la tan ansiada libertad financiera.

Kiyosaki, plantea que los individuos dejamos pasar años de educación en las escuelas asimilando conocimientos que son importantes para el desarrollo cultural, pero sin obtener muchos conocimientos acerca de cómo se mueve el dinero dentro de la sociedad (en realidad pocas son las personas que han dedicado parte de su tiempo en averiguar cómo funciona), cuando en realidad debería ser también una prioridad debido a que nosotros somos parte de la sociedad y movemos el dinero con cada acción que realizamos diariamente.

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