Errores alta gerencia

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Por: Katherine David González

Por años se le ha atribuido gran importancia a la alta gerencia en las organizaciones, comportamiento que resulta muy lógico, considerando que ellos son los que dirigen la empresa y sobre los cuales recae mayormente la responsabilidad de la misma; sin embargo el error más grande es pensar que son seres infalibles, que aciertan en todo, y nunca fallan en lo que emprenden. Si bien es cierto, que aunque se encuentran en la posición más alta de [pic 3]

la empresa, con esto no quedan exentos de fallar, y de cometer ciertos errores, que a la vista parecen comunes, pero considerando toda la responsabilidad que poseen, puede llegar a ser incluso mortales para la existencia de la misma empresa, pues las decisiones que ellos tomen beneficiaran o perjudicaran el accionar y efectividad de la misma.

A continuación, se hablara de forma específica de cuatro errores que suele cometer la alta gerencia, y se consideran dañinos para la organización.

GESTIÓN Vs LIDERAZGO

En los últimos años, se ha desatado una gran ola de convertirse en grandes líderes; hoy por hoy,  no se habla tanto de la gestión como en otras épocas, pero si se busca tener grandes líderes, personas que motiven a todos a seguir adelante, a cambiar, y muchos otros aspectos interesantes que encierra esta nueva tendencia, llevando a un segundo plano a la gestión, no sabiendo que puede ser algo perjudicial para las empresas al preferir uno más que otro, por lo que debe existir un equilibrio en la alta gerencia de las organizaciones, pues la gestión y el liderazgo son complementarios el uno con el otro, buscar más la gestión que el liderazgo, significa carecer de inspiración; y buscar más el liderazgo que la gestión, promueve la arrogancia y la autosuficiencia.

Este último aspecto, conlleva entonces a tener en nuestras empresas gerentes autacticos, que piensan que pueden hacer todo por ellos mismos, se comportan como agentes independientes, alejados completamente de todo los procesos que involucra la organización.[pic 4]

EXISTO, LUEGO PIENSO.

Aunque la expresión correcta es “Pienso, luego existo”, tal como lo dijo Descartes, parece que los gerentes tuviesen tergiversada esta frase.

Aunque parezca difícil de creer, la gran mayoría de ellos, primero actúan y luego es que reflexionan, en lugar de primero pensar, para así no cometer siempre los mismos errores.

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La reflexión viene a ser ese espacio entre la experiencia y la explicación, esta busca ir mas allá de lo obvio, de lo superficial, profundizando e involucrándose en una actitud como tal, que abre el paso a nuevas ideas, permitiendo a los gerentes percatarse de ellas, y así poder aprovechar todas las oportunidades de acción de estas incluyen.

Cabe anotar, que son procesos dependientes el uno del otro, pues la acción sin reflexión es inconsciencia, y la reflexión sin acción es pasividad, por lo que se complementan una con otra, y permite a los gerentes visionar y trazar el futuro de la empresa.

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