Las Finanzas Publicas En Mexico

ÍNDICE

Introducción

Finanzas municipale

Antecedentes Históricos de las Finanzas Públicas Municipale

La Ley de Coordinación Fiscal 2008.

El Sistema Nacional de Coordinación Fiscal.

Fondos que Crea la Ley de Coordinación Fiscal 2008.

Fondo General de Participaciones, (FGP).

Fondo de Fomento Municipal, (FFM).

Fondo de Fiscalización.

Participación de los Fondos.

De los Fondos de Aportaciones Federales (ramo XXXIII).

Convenio de Colaboración Administrativa en Materia Fiscal entre la Federación y las Entidades.

Organismos en Materia de Coordinación.

Convenios de Colaboración Estado-Municipios.

Mecanismos de Distribución y Entrega de las Participaciones Federales a los Municipios del Estado de Puebla.

Marco Jurídico Municipal.

La Tesorería Municipal.

Funciones de la Tesorería Municipal.

Los Ingresos Públicos Municipales y su Captación.

Impuestos.

Derechos.

Productos.

Aprovechamientos.

Participaciones.

Ingresos Extraordinarios.

Créditos.

Subsidios.

Ramo XXXIII.

Los Ingresos Públicos Municipales y su Distribución en el Gasto Público.

Concepto del Gasto Público.

Clasificación del Gasto Público.

Clasificación Económica del Gasto Pública.

Gasto Corriente.

Gasto de Capital o Inversión.

Transferencias, Subsidios y Ayudas.

Bienes Muebles e Inmuebles.

Deuda Pública.

Bibliografía

Antecedentes históricos de las Finanzas Públicas Municipales

En este apartado, se toma como antecedentes, desde la época independiente hasta nuestros días (1824-2008), para llevar a cabo el bosquejo histórico de las Finanzas Públicas Municipales. El 4 de octubre de 1824 el Congreso Constituyente promulgo la Constitución Federal de los Estados Unidos, cuyo objetivo primordial era el paso de transición del orden colonial de prebendas y privilegios para el clero a un nuevo enfoque que trataba de construir un Estado Moderno Mexicano.

Con la promulgación de la Constitución de 1824, se reconoció bajo una organización dividida en tres poderes: Legislativo, Ejecutivo y Judicial a algunos Estados de la República; comenzando el país su etapa de Federalismo Político, mas no así el económico; ya que los privilegios que tenía el clero en esta época impidieron el mismo. Y que años más tarde, al promulgarse las Leyes Constitucionales de 1835 y 1836 nulificaron al Federalismo basado en una filosofía oligárquica; y no fue hasta 1841 en donde se recuperó el Federalismo al firmarse las “ Bases de Tacubaya” dando fin las Leyes promulgadas.

La Constitución de 1843, conserva todavía los privilegios del clero y la oficialidad de la religión católica.

Martínez Almazan, Raúl (1980, 21) establece que: al año de proclamarse el Plan de Ayutla, en donde se desconocía a Santa Ana como Presidente (1854), se expidieron tres Leyes que marcan un nuevo horizonte para el México Independiente, siendo estas:

1. “La Ley sobre Administración de Justicia, de 1855 (Ley Juárez), que suprimía el fuero eclesiástico y el militar en materia civil;

2. La Ley de Adjudicación de Fincas Rústicas y Urbanas, en 1856 (Ley Lerdo), para la adjudicación de los inmuebles pertenecientes a las corporaciones civiles o eclesiásticas, y

3. La Ley de tarifas por los servicios eclesiásticos de 1857, con la cual se trataba de evitar el abuso del clero contra las personas de escasos recursos.

La Constitución de 1857, estableció la República Democrática, Representativa y Federal, señalando como partes integrantes de la Federación, 27 estados, el territorio de Baja California y el Distrito Federal.

“De 1857 a 1917, el país vive tres periodos claramente definidos:

1. La guerra de Reforma, la intervención extranjera y el segundo imperio.

2. La restauración de la República;

3. El Porfiriato.”

Con la Constitución de 1857 se fortaleció el Federalismo.

La situación del país, sin embargo, no permitió el establecimiento de relaciones fiscales importantes entre el Gobierno Federal y los estados, ni la delimitación de facultades fiscales.

Martínez Almazan, Raúl (1980, 22 y 23), plantea que el programa financiero de Juárez, proyectaba “recoger y concentrar la recaudación y administración de los impuestos; hacer uso de una política de transacciones permanentemente revisables en materia de tarifas, creando el timbre con la tendencia de transformar la base de las rentas haciéndola interior principalmente; buscar una nivelación posible del presupuesto; organizar la cuenta del tesoro y perseguir el peculado y fraude.

El caos financiero (1857-1917) del periodo que analizamos determinó la existencia de un sistema fiscal desorganizado con una concurrencia impositiva que lesionaba a los gobiernos locales.

El choque de dos corrientes ideológicas y políticas -de contenido federal una, y central la otra- van a caracterizar las relaciones intergubernamentales en cada momento histórico.”

Se puede decir, que en esta etapa el país presento dos tendencias marcadas en política fiscal: la primera; gravando el gobierno federal las fuentes de tributación que por derecho le correspondían al Estado para hacerse llegar de recursos y la segunda, delimitar al Estado sus facultades impositivas.

Continuando con este orden de ideas; Martínez Almazan, Raúl (1980, 24-26), establece que: durante su dictadura, Porfirio Díaz estableció con los estados relaciones fiscales y financieras de tutelaje. En 1878 mandó pagar diversas cantidades a Sonora, Sinaloa, Chihuahua y Baja California como ayuda por la pérdida de sus cosechas. En 1894, mediante circular no. 170 de la Secretaría de Hacienda, Crédito Público y Comercio, señalo las cuotas de distribución a los Estados, de las contribuciones por producción de bebidas alcohólicas. También se ordeno que se distribuyera entre los estados -incluyendo el Distrito Federal y el territorio de Tepic- 500,000 pesos provenientes del impuesto sobre bebidas alcohólicas. La distribución no resulto equitativa; Jalisco, Michoacán, Morelos, Puebla, Veracruz, San Luis Potosí y Yucatán recibieron entre 21,000 y 70,000 pesos cada uno (un total de 308,800 correspondientes al 62%); Chiapas, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, México,

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