PRIMER CASO EL TULIPAN NARANJA,

PRIMER CASO

EL TULIPAN NARANJA, empresa comercial holandesa,  dedicada a la venta de flores en todo el territorio de la unión europea,  realiza oferta de compra de 15.000 unidades de Begonias, de calidad M-15, denominada como Premium por ser  cultivada  con lava extraída del volcán azufral durante la erupción de 1914, material ampliamente reconocido en el mundo de la floricultura  por la riqueza de los minerales que emanaron de la profundidad de la corteza terrestre, y que le confiere a las flores cultivadas con ella, una riqueza cromática única en el mundo por sus tonalidades bombón cereza, mandarina ph  4.5 y azul fresh mentolado; este  ofrecimiento se le comunica a  SOLO FLORES COLOMBIA, empresa exportadora con  establecimiento en Tuquerres, Nariño, por ser la única empresa cultivadora de flores en ese lugar.

La empresa colombiana acepta la oferta y realiza los trámites correspondientes para el envió de las flores solicitadas. Al momento de realizar la labor de empacado y  embarque se despachan 20.000 Begonias, es decir 5.000 unidades por encima de la cantidad  originalmente ofertada.

Dentro de los acuerdos que se establecieron para colocar la mercancía en el puerto de Rotterdam, con destino a una filial de EL TULIPAN NARANJA en la ciudad de Berlín, Alemania, se estableció que la empresa vendedora se encargaría del transporte con sus propios recursos, desde la zona de los cultivos, recibo en el puerto de Rotterdam y por último, entrega al primer porteador, quien haría entrega de la carga al segundo porteador,  en un punto determinado de la frontera Germano Holandesa, puesto que, y con el propósito de economizar gastos, se decidió que el trayecto en territorio Alemán lo realizara una empresa de ese país. Se infiere así que el costo de transporte a partir del segundo porteador seria asumido por la compañía Holandesa. Dentro de los compromisos para el transporte de las flores se acordó que se debía realizar el traslado en Camiones equipados con aire acondicionado, esto con el propósito de preservar la calidad y frescura de la carga.

Luego de la travesía, que se tuvo que realizar por medio de otros dos porteadores, la mercancía llega por fin a la bodega filial de la firma holandesa en Berlín, teniendo de presente que esta llegó  15 días antes del plazo acordado en el contrato. Estando allí  la empresa holandesa se percata de que se le envió una cantidad superior a la que se había acordado dentro de las cláusulas del contrato, sin embargo no informa de esta situación a la empresa colombiana, y en su lugar procede a darle entrada a las bodegas que tenía destinada para el efecto; una semana más tarde, una vez realizados los tramites de pago de la mercancía, incluidas las 5.000 unidades extra, y realizando la tarea de revisión, esta compañía detecta que el embalaje de la mercancía se realizó sin los debidos cuidados que se tenían establecidos en los acuerdos; al realizar una indagación preliminar, se pudo evidenciar que el primer porteador, es decir quien cargo las mercancías a su llegada al puerto holandés, por efectos de un obstáculo que apareció en la vía, se  desconecto el sistema de refrigeración del vehículo el cual  era imprescindible para  conservar la calidad de la mercancía transportada, haciendo por este motivo que se malograra aproximadamente el 80% del total de las flores transportadas.

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