AUTOCONCEPTO, TRASTORNOS DEL ÁNIMO Y ALIMENTICIOS: ¿CÓMO HACER FRENTE AL CUADRO PSICOPATOLÓGICO EN LA ADOLESCENCIA?

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AUTOCONCEPTO, TRASTORNOS DEL ÁNIMO Y ALIMENTICIOS: ¿CÓMO HACER FRENTE AL CUADRO PSICOPATOLÓGICO EN LA ADOLESCENCIA?

Análisis a partir de la teoría psicoanalítica y sistémica aplicado a la serie “My mad fat diary”

FERNANDO IGNACIO AGUILERA NÚÑEZ

HISTORIA Y FUNDAMENTOS DE LA PSICOLOGÍA

FRANCISCO DIEZ BECKER

EL PESO MENTAL DE LA OBESIDAD ADOLESCENTE: ¿COMO FORTALECER EL AUTOCONCEPTO?

La adolescencia es entendida como la etapa del desarrollo ubicada entre la niñez y la adultez, donde se desarrolla un proceso madurativo creciente que comprende aspectos físicos, psicológicos y sociales. Según la organización mundial de la salud, es un periodo que comprende entre los 10 y 19 años de edad donde la tarea central es la búsqueda de la identidad y el fortalecimiento del autoconcepto.^[1]

La superación de la etapa, se da cuando el adolescente es capaz de encontrar su identidad diferenciándose de padres y grupo de pares en la construcción del propio rol. Para lograr una adecuada identidad debe fortalecerse el autoconcepto a través de la aceptación del propio cuerpo, el conocimiento objetivo y la aceptación de la propia personalidad, la identidad sexual, la identidad vocacional, y que el joven defina una ideología personal que incluya valores propios.^[2]

Durante el transito de esta etapa, las relaciones sociales principalmente las amistades y el comienzo de los vínculos sentimentales y sexuales tienen una importancia preponderante en el desarrollo de la personalidad de los adolescentes. Si al estrés propio de la etapa se suma la configuración de un trastorno alimenticio, el adolescente puede verse superado ante la situación y configurar sintomatología que ponga en riesgo su salud mental y/o su vida.

El desarrollo de la obesidad es el resultado entre la interacción de factores genéticos de predisposición a la acumulación de peso, y ambientales asociados a los malos hábitos alimenticios y estilos de vida sedentarios o poco saludables. La obesidad no es causada necesariamente por comer en exceso, si no por preferir alimentos procesados con alto contenido de azúcar y grasas, junto con un mayor sedentarismo^[3].

En ese sentido, es necesario analizar los factores que pueden estar a la base en el desarrollo de una obesidad adolescente, y que situaciones gestadas en el entorno más próximo del individuo gatillan la ingesta compulsiva de alimentos como un recurso.

La serie “My mad fat diary”, está situada en Lincolnshire en 1996, pese a los años de diferencia con el presente, las temáticas que allí se tratan siguen vigentes y en palestra. La historia se central en Rachel Earl, una adolescente obesa de 16 años, que acaba de salir del hospital psiquiátrico después de 4 meses internada tras un intento de suicidio. Con una salud mental afectada, Rachel debe hacer frente a la relación con su madre y particular carácter, y el reencuentro con su mejor amiga, que no esta enterada de su actual estado de salud. Esto la confronta entre la necesidad de buscar un espacio de identificación social haciendo nuevos amigos, lidiar con las dinámicas de su relación familiar, y hacer frente a su condición mental desde la soledad.

A través de la historia que se desarrolla en la primera temporada de la serie, se pretende retratar las dinámicas y conflictos en los que se encuentra un adolescente que padece un trastorno alimenticio y del animo y como repercute en la construcción de su identidad y autoconcepto. A partir de los principales tópicos de la teoría general de sistema y de la teoría psicoanalítica identificaremos el funcionamiento de la protagonista y la manera en que concibe el mundo.

Como hemos enunciado con anterioridad Rachel se encuentra atravesando la adolescencia. Pelea constantemente con su madre, en una necesidad extrema de diferenciación. Su madre se presenta como una persona que bordea los 40 años, es madre soltera y trabaja constantemente para llevar la casa. Presenta problemas con su peso, y constantemente oscila entre la devaluación y la idealización de personas y situaciones. Aunque emocionalmente inestable, intenta ser para Rachel una figura de autoridad y protección. La serie inicia cuando nos presenta su nueva pareja, un hombre turco indocumentado atlético y apuesto a quien lleva a vivir a casa. Esto gatilla no solo un cambio en la dinámica familiar sino también una reestructura de la misma que repercute y afecta a cada uno de los miembros del sistema. Esto puede entenderse mejor a partir del concepto de patron interaccional de la teoría de sistemas.

La teoría sistémica, pone el acento en las interacciones del individuo y como es afectado y afecta al sistema en el que está inserto (la familia). En ese sentido, cobra importancia el concepto “inter-personal”, que definiremos como las relaciones de interacción que se dan entre los miembros del sistema, esto supone, dejar una mirada reduccionista que solo se enfoca en un individuo para dar paso a una más global que mira las interacciones para entender las pautas que conectan ese sistema en totalidad^[4]. Las acciones de un individuo se aplican por lo que hacen otras, se entiende al individuo “en función de”. Como hemos explicado, las acciones de un miembro del sistema influyen en los demás, así como las acciones de los demás influyen en él generando una pauta recurrente que retroalimenta ese sistema con el fin de mantenerlo en equilibrio. Este patrón interaccional se entiende a partir de la causalidad circular donde las consecuencias influyen nuevamente en las causas volviéndolo un patrón recurrente.^[5]

Rachel, ha estado hospitalizada por 4 meses, esto ha repercutido en su sistema familiar, pues su madre ha debido enfocar sus energías y pensamientos sobre si misma y cargar con el intento suicida de Rachel. Por otra parte, ha iniciado una nueva relación sentimental y ha llevado a vivir a su pareja a la casa que, hasta entonces, solo compartía con su hija adolescente. Esta persona, además, no domina el idioma natal, por tanto, la comunicación se ve afectada. Pero no solo la comunicación, el hecho de enfrentarse a un extraño y ver a su madre en dinámicas que antes no estaban presentes, la mantiene en una posición de rechazo sobre esta persona, canalizando su preocupación en la comida, que finalmente conecta las dinámicas familiares hasta entonces, sin embargo, la salida del hospital trae consigo nuevas consignas, la mas importante es que “Rachel ya no come compulsivamente”, por tanto vive en el dilema constante entre ceder ante la comida e intentar algo diferente. Se muestra constantemente insegura y en el dilema entre ser parte de esta nueva dinámica o tomar distancia. Por otra parte, la madre lejos de incorporar a Rachel a estas nuevas dinámicas, no se relaciona afectivamente con su hija, naturalizando las situaciones y generando mandatos y ordenes mas que acuerdos. Esto responde a su manera de relacionarse desde siempre con Rachel, por tanto, se configura como un patrón de comportamiento lógico dentro de ese sistema familiar.

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