Amor Negativo
Enviado por rogeliojos • 6 de Junio de 2013 • 9.484 Palabras (38 Páginas) • 396 Visitas
I.- Amor Negativo
PROLOGO DEL AUTOR
EL PROBLEMA
NEUROSIS: UN ESTADO DE SENTIRSE
INDIGNO DE SER AMADO
La causa de la deshumanización de la humanidad consigo misma, es parte de la enfermedad llamada neurosis universal. Esencialmente, desde un punto de vista amplio,la neurosis no es más que un estado de sentirse indigno de ser amado. Sin embargo, históricamente, el dolor y el conflicto causados por las actitudes “neuróticas” negativas, por los sentimientos y comportamientos neuróticos, han originado infelicidad personal y errores sociales incalculables. Estos comportamientos son los obstáculos reales a la realización personal y a la paz mundial. A todos nos afecta diariamente la negatividad de la neurosis, tanto a nivel personal como colectivo. Desgraciadamente, los líderes mundiales y los tiranos viven sus neurosis en sus acciones, reacciones e interacciones, igual que cualquiera de nosotros. El genocidio de Adolfo Hitler contra los judíos fue uno de los ejemplos más extremos de esta insania. En su fascinante libro, “Por tu propio bien”, la psicoanalista suiza Dra.Alice Miller acompañó la neurosis de Hitler desde su infancia, y demostró como fue negativamente programado, para poder ser capaz de cometer terribles atrocidades contra la humanidad. Al darse esto, se hace imperativo poner al descubierto y desenraizar todas las causas de las neurosis que han llevado a tan monstruoso y devastador comportamiento. Al hacerlo, quizás sea posible influenciar positivamente a los niños de hoy, futuros líderes de mañana para que conduzcan a la humanidad por un camino constructivo y no destructivo. Es un concepto bien conocido y aceptado el de que, cuando niños, nosotros aprendemos comportamientos positivos y negativos por medio de la programación de nuestros padres. Aquí antes de seguir, es importante declarar, sin sombra de dudas, que nuestros padres , que inconscientemente nos programaron, aunque sean la causa, NO TIENEN CULPA. Ellos también fueron programados por sus padres: antes también lo fueron sus padres... Somos todos culpables de nuestros comportamientos negativos, pero no tenemos la culpa. Es una circunstancia desdichada que pasa de generación en generación . Este libro no pretende ser una acusación formal contra los padres o contra Ud., si Ud. es padre ó madre. Sin embargo, le ruego que lo lea, independiente de su edad. Le ruego que se relacione con lo que lee como si fuera hijo/a de sus padres.Todos compartimos el denominador común de haber nacido de un hombre y de una mujer, un padre y una madre. Cuando niños, éramos totalmente dependientes de nuestros padres con relación a la comida, a la orientación ,ayuda y amor. Ellos eran nuestros modelos y ejemplos.
Desgraciadamente, la mayoría de nosotros tuvimos padres que retrataban ó manifestaban programas y patrones negativos.Al no conocer nada mas, aprendimos y adoptamos estos programas y patrones como nuestros.
Pero, ya que estos patrones han sido aprendidos, ¡pueden ser desaprendidos!. Al vivenciar estas mentiras adoptadas, olvidamos nuestra verdadera y básica esencia: amor y el espacio interno. Sin embargo, podemos recordar y reivindicar nuestro ser real positivo innato, y crear una vida mejor...!Hay una salida!.
Toda nuestra programación básica negativa ocurre antes de la pubertad (la edad de madurez biológica). El adulto en el que nos transformamos después de la pubertad, actúa automáticamente según su modelo de infancia. Algunos de Uds. Han perdido sus padres en la infancia, sea por muerte o separación. Algunos de Uds. Fueron abandonados por uno ó ambos padres, vivieron con padres sustitutos o en instituciones ó internados. Si fue así, la ausencia de los padres biológicos y la falta de sus sustento y amor (sin importar cuanto hayan recibido de sus padres sustitutos), ha sido la causa básica de su falta de habilidad para relacionarse con el amor, consigo mismo y con los demás.
Muchos de Uds. tuvieron padres físicamente presentes, pero emocionalmente ausentes. El resultado es el mismo. Desgraciadamente, nosotros pasamos la vida rechazándonos y creando situaciones en las que nos rechazan los demás. Abandonado físicamente ó no, Ud. dejó de sentir y recibir amor de sus padres de una forma palpable. Por ello, Ud. siente que no merece amor. Fue así que comenzó la falta de autoestima, junto con sentimientos de invalidación y de incapacidad de amar, el flagelo de la salud mental. Varias técnicas psicoanalíticas y movimientos de crecimiento nos aconsejan que nos hagamos responsables de nuestras acciones, que soltemos la negatividad y que enfaticemos la positividad (como si ello fuera fácil). Algunas de esta técnicas métodos aparentemente producen cambios, pero en muchos casos este cambio es temporal. Estos cambios pueden compararse con gruesas capas de crema puestas sobre la basura de la desoladora programación infantil, pero la raíz básica y principal permanece intacta.
Cuando el paso del tiempo deshace esta capas de crema, los problemas reaparecen de nuevo, con un gran impacto. Me refiero al bienintencionado fenómeno de la pseudopositividad, pero para que ocurra la transición real, tenemos que desenraizar la basura de nuestras vidas. Sólo entonces la negatividad podrá ser reciclada y convertirse en un comportamiento positivo. Sólo así la vida podrá ser vivida y experimentada en toda su plenitud.
Nuestros problemas comenzaron a germinar a partir del momento en que fuimos concebidos. Si nuestros padres se hubieran amado nos hubieran deseado, querido y criado hasta la pubertad con un flujo de amor consistente, no posesivo, no sofocante y con aprobación incondicional, hubieran podido ser evitados los devastadores efectos de la neurosis y sus consecuencias. Rara vez este es el caso. Si nos sentimos sobrecargados con la enfermedad de la programación negativa, entonces nuestros padres, consciente oi nconscientemente, son los causantes de nuestra neurosis. Cuando nosotros, desde el nivel más profundo de nuestro ser, aprendamos a perdonarles, experimental y emocionalmente en vez de intelectualmente, podremos entonces perdonarnos a nosotros mismos, y encontrar la paz. Para alcanzar esta meta tan deseada, debemos llegar a un profundo estado de compasión, de perdón, comprensión sin condena y aceptación de los niños, que nuestros padres fueron un día. Al alcanzar esto, estaremos verdaderamente libres para aceptar, perdonar y amar a los adultos en los que ellos se trasformaron.
Haciéndolo podremos liberarnos del comportamiento negativo compulsivo y encontrar dentro de nosotros autoaceptación, autoperdón y amor a nosotros mismos. Antes de que podamos borrar nuestros comportamientos, sentimientos y actitudes negativamente programadas y llegar a un estado en que nos sintamos dignos de ser amados, debemos romper con la dependencia y la necesidad psicológica
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