Asertividad
Enviado por joel.alejandro_q • 9 de Febrero de 2015 • 1.651 Palabras (7 Páginas) • 172 Visitas
1. INTRODUCCIÓN
Presión de grupo y consumo de drogas
La presión ejercida por el grupo de iguales es uno de los factores que más se asocian al inicio del consumo de drogas, así como a las
situaciones de abuso.
Sin embargo, antes de empezar a hablar sobre las estrategias a seguir, si queremos aumentar la resistencia a la presión de grupo, hay que
puntualizar algunas cosas.
Uno de los elementos que todas las investigaciones señalan como relevante en el inicio del consumo de drogas, es la presión ejercida por el
grupo de iguales. En esta edad el grupo de amigos y amigas se convierte en un aspecto fundamental para el adolescente. El adolescente es
especialmente vulnerable ante la presión del grupo de iguales pues necesita sentirse partícipe de él, compartir los rasgos que lo definen,
tener un papel que desempeñar en el mismo, sentirse valorado por sus amigos, etc.
La presión del grupo se manifiesta de diferentes formas. Algunas veces la presión del grupo puede ser negativa o perjudicial. Es el caso, por
ejemplo, de la presión para hacer cosas perjudiciales o poco inteligentes, como beber alcohol, fumar, violar la ley o destrozar cosas. El actuar
así supone ser aceptado por los miembros del grupo y ganarse el aprecio de sus amigos. El no hacerlo puede entrañar el riesgo de ser
expulsado del grupo. Son muchas las estrategias que utilizamos las personas para intentar convencer a otros de que hagan lo que deseamos.
A continuación te presentamos algunas de las más habituales. Es importante que el individuo las conozca ya que así le será más fácil darse
cuenta cuando le estén intentando convencer.
Estrategia Ejemplo
Ridiculizar “Eres un gallina”
“No insistáis más, lo que pasa es que es un niñato”
Retar “A que no te atreves”
“No eres capaz”
Adular, hacer la “pelota” “Con lo inteligente que eres, no te costaría nada”
Amenazar “Como no lo hagas, dejaremos de ser tus amigos”
Prometer recompensas “Si lo haces, te daré lo que quieras”
Insistir “Venga, ven con nosotros. Di que sí.
Venga. Vamos, anímate. Vente....”
Engañar “Yo ya lo he hecho antes y no pasa nada”
Sin embargo, la presión de grupo no siempre es negativa. No siempre que nos intentan persuadir es para hacer algo malo; a veces los otros
pueden tener razón, por lo que la forma adecuada de responder a la persuasión no es negarse sistemáticamente a hacer lo que nos piden. El
adolescente debe aprender cuándo es conveniente que se resista a la presión de sus iguales y cuándo no es necesario. Primero se debería
escuchar lo que nos piden, compararlo con lo que nosotros deseamos y después tomar la decisión por uno mismo, escogiendo lo más
conveniente. De esta manera, evitaremos por tanto, las respuestas impulsivas o casi inconscientes.
Pasos para responder a los intentos persuasivos:
1. Escuchar lo que la otra persona nos dice.
2. Comparar lo que deseamos hacer nosotros con lo que quiere la otra persona.
3. Decidir por nosotros mismos lo que debemos hacer.
4. Comunicar nuestra decisión. Si decidimos no hacer lo que nos piden debemos rechazar la propuesta de forma clara y sencilla. Para
ello, es importante poseer la habilidad para decir “no” e imponer unos límites a las actuaciones de los demás si es necesario.
Según se ha demostrado, aprender a decir NO es parte de un proceso a través del cual adolescentes y jóvenes pueden resistirse a la presión
04/11/13
www.psicologia-online.com/autoayuda/asertividad/decir_no_a_las_drogas.shtml 2/6
negativa de los compañeros. Y eso se puede aprender.
2. EL COMPORTAMIENTO ASERTIVO
Cuando vayamos a decir que “No” a alguien, debemos ser capaces de defender nuestros propios derechos al mismo tiempo que respetar que
los demás puedan tener opiniones distintas de las nuestras. Para aprender a decir NO es necesario aprender primero a comportarse
asertivamente.
La asertividad es un comportamiento verbal (lo que se dice) y no verbal (como se dice), que defiende nuestros derechos personales al mismo
tiempo que se respetan los derechos de los demás.
Así, una persona se comporta asertivamente cuando:
Conoce cuáles son sus derechos e intereses personales.
Los defiende mediante una serie de habilidades de conducta.
Estas habilidades le permiten ser objetivo y respetuoso consigo mismo y con los demás.
Los comportamientos no asertivos pueden ser de dos tipos: agresivos y pasivos. Veamos las diferencias entre los tres:
Conducta pasiva
No se expresan los sentimientos y pensamientos, o se expresan de manera ineficaz, negativa e inadecuada (excusas, sin confianza, con
temor...). Sólo tiene en cuenta los derechos de los demás.
Conducta agresiva
Se expresan sentimientos, ideas y pensamientos, pero sin respetar a los demás, emitiendo normalmente conductas agresivas directas
(insultos, agresión física) o indirectas (comentarios o bromas sarcásticas, ridiculizaciones). Sólo tiene en cuenta sus propios derechos.
Conducta asertiva
Se expresan directamente sentimientos, ideas, opiniones, derechos, etc., sin amenazar, castigar o manipular a otros. Respeta los derechos
propios y los de los demás.
Características del estilo de respuesta pasiva, adecuada (asertiva) y agresiva:
PASIVA ASERTIVA AGRESIVA
Frases genéricas
No se dice nada o se utilizan
expresiones indirectas.
“Quizás…”, “No tiene
importancia pero…”
Frases en primera persona
Expresión de preferencias y
Ruegos
“Pienso”, “Siento”,
“Me gustaría”
Frases en segunda persona
Acusaciones, críticas y
Exigencias
“Deja de …”, Harías mejor
en…”. “Ten cuidado”
Tono de voz bajo.
Discurso dubitativo y
vacilante.
Tono de voz firme y audible
Discurso calmado
Tono de voz elevado
Discurso rápido y atropellado
Contacto visual mínimo
Postura corporal hundida
Contacto visual.
Postura corporal firme pero
relajada.
Mirada fija y agresiva
Postura
...