Autonomia, Decision, Concecuencia

Hoy puedo decir que soy feliz, siento por fin que todo va a estar mejor y que estoy en un momento en mi vida en la que tengo que tomar muchísimas decisiones que seguramente se van a ver reflejadas en un futuro especialmente en el mío. Cada acción que haga o decisión que tome tiene sus consecuencias, pero ahora más que nunca es cuando tengo que pensar con claridad y hacer lo que verdaderamente siento y no dejarme influenciar por nada ni por nadie. Debo aprender a tomar mis propias decisiones y a saber cuándo y cómo tomarlas. Debo empezar a ser totalmente autónoma pero también debo recordarme que nunca voy a estar sola porque si pienso que estoy sola me perjudicaría a mí misma mentalmente. No alejarme de las personas equivocadas. Ser autónoma no significa estar sola y mucho menos alejarme de las personas que más quiero. Ser autónomo es la capacidad de saber tomar decisiones por uno mismo. Ser autónomo también es ser responsable y hacerse cargo de los errores propios. Muchas personas piensan que la palabra “Libertad” no es un sinónimo de “Autonomía” y la verdad es que no es tan así. Como dije anteriormente, una persona autónoma debe saber tomar sus propias decisiones, pero lo que la mayoría de las personas no notan es que al ser “Libres” también estamos tomando decisiones. En cada segundo, minuto, hora, de nuestras vidas estamos tomando decisiones constantemente. Por ejemplo, ahora yo estoy tomando la decisión de escribir todo lo que siento ya que me hace sentir de alguna manera más “Pura”. Hoy a la mañana decidí prender la calefacción y olvidé completamente apagarla, y como consecuencia mamá acaba de venir a retarme por prenderla. Las acciones que hacemos o llevamos a cabo no siempre tiene consecuencias malas. Aunque no nos demos cuenta la gran parte de nuestras acciones terminan siempre siendo acciones beneficiosas, pero siempre sin ninguna razón marcamos o solo recordamos las acciones erróneas. E incluso yo hago eso. Creo que es algo que hacemos todos o una gran parte de los humanos. No está mal, pero tampoco está bien. Si bien de cada error que cometemos aprendemos algo y es muy bueno poder tomar conciencia o simplemente darse cuenta de los errores propios, pero no siempre tenemos que tomar los errores en cuenta. También tenemos que ver las acciones beneficiosas o puras que hacemos y estar orgullosos de ellas porque eso demuestra la personalidad de uno.

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