Capítulo 9- Roles sociales

Capítulo 9- Roles sociales.

Características de los roles. Las pautas de acción que indican el rango que se ocupa y el rango apropiado. Cada rango entraña ciertos derechos y obligaciones que determinan las normas que especifican los tipos adecuados de conducta. Ralph Linton define que los roles en función de las acciones que el individuo realiza para validar la ocupación de un rango.

Miller afirma: “Las mutuas respuestas de dos personas se explican frecuentemente mejor por los conceptos que comparten sobre la conducta apropiada a sus dos roles que por sus características psicológicas o por las cualidades singulares de la interacción social”.

Los roles recíprocos han sido establecidos por la cultura y la costumbre prevaleciente y son compartidos.

Miller observa que los roles sociales sirven para fijar límites a la conducta de los miembros de la sociedad, pero estos límites tienen sentido cuando nos damos cuenta de que los roles son esenciales para la estructura social.

Lo roles determinan la conducta se rige por el rango que el individuo ocupa, los rangos pueden cambiar a cada minuto en función de la situación prevaleciente.

-Reglas de los roles. Los roles que corresponden a determinados rangos tienen a ser más o menos uniformes.

-Tipos de rangos. Robert Linton, afirma que hay cinco diferentes de clases de rangos:

1) Agrupamientos según la edad y el sexo.

2) Agrupamientos de familia, parentesco, clan u hogar indicados por algún término genérico.

3) Agrupamientos por prestigio o posición.

4) Agrupamientos laborales.

5) Agrupamientos por amistad o intereses comunes.

Los agrupamientos de las organizaciones, Linton omitió esta sexta categoría porque se ocupó exclusivamente de las sociedades primitivas y no tuvo en cuenta las organizaciones que se han vuelto esenciales para el funcionamiento de las sociedades industrializadas y urbanizadas.

Podemos clasificar los rangos en dos grupos: los adscritos y los alcanzados. Los adscritos son aquellos que escapan al control del individuo, el sexo y la edad. Los alcanzados son lo que se consiguen con cierto esfuerzo.

-Los roles como expectativas aprendidas. Los roles son una serie de conductas aprendidas. De niños aprendemos primero a portarnos tal y como esperan nuestra cultura y nuestra familia. Este aprendizaje se extiende a nuestras experiencias fuera del hogar en donde la conducta suele diferenciarse según la posición social de la familia. También aprendemos a adoptar las pautas de conducta que son características de nuestro sexo. Aprendemos las creencias, valores y actitudes que brindan la motivación de la conducta que aprendemos.

-Roles recíprocos. Unas de las primeras cosas que, consciente o inconscientemente, aprendemos a hacer cuando conocemos a un individuo es establecer su posición en alguna estructura social, de preferencia la nuestra.

Roles de ambos sexos.

Los psicólogos sociales han investigado más las pautas de conducta que se relacionan con las diferencias entre ambos sexos que otros tipos de conducta apropiada.

-La disposición para arriesgarse. En la mayoría de las conductas se espera que los hombres sean más atrevidos que las mujeres.

-Agresividad. Los varones tienden también a ser más agresivos.

-Interés en la interacción social. Las mujeres tienden a ser más cautas, aceptantes y pasivas. Las mujeres tendrían más interés y capacidad en la conducta calculada para fomentar la paz y la mutua aceptación.

-El instinto. Los hombres son más agresivos, activos y competitivos y las mujeres son más pasivas, están más orientadas socialmente y son más aceptantes, también pensamos “que son así por naturaleza” Esto está de acuerdo con el sentido común y con la sabiduría convencional, ya que tanto uno como otra sostienen que las diferencias de conducta entre ambos sexos se deben totalmente a las tendencias que se heredan biológicamente, es decir, al instinto. Los psicólogos sociales, suelen recelar de todas las explicaciones basadas en el instinto.

La observación cotidiana brinda pruebas contrarias a la explicación de las diferencias entre los sexos que se basa en los instintos.

Los valores y las normas difieren mucho en las distintas culturas. Si a pesar de estas variaciones fuera posible establecer que ciertas pautas corresponden a uno u otro sexo, las teorías de los instintos podrían contar con algún fundamento.

-La cultura. Un aspecto de la conducta que ha sido desconsiderada en estos estudios es el rol de cada sexo en la guerra. Si las diferencias de la conducta de hombres y mujeres son enteramente aprendidas, debemos suponer que habrá algunas culturas en las que las mujeres se encarguen de guerrear.

-Determinantes biológicos.

-Interacción del aprendizaje social y la biología. Las pruebas aportadas para explicar la conducta de uno y de otro sexo según los instintos o el aprendizaje social pueden parecer contradictorias y confusas y quizá no sea posible determinar con certeza qué es realmente los masculino y lo femenino o cuál es la causa probable de que nos lo parezca. Debe haber una explicación razonable e intermedia.

Los hombres pueden aprender a ser maternales y las mujeres, acometedoras y competitivas; aquéllos pueden aprender a ser gráciles y socialmente sensibles; estás, ase rudas o insensibles, etc. La capacidad que los seres humanos tienen para aprender y perpetuar pautas de aprendizaje puede explicar las variantes.

La conducta humana parece estar determinada biológica y socialmente.

-Posición. La mayoría de las culturas, parecen estar dominadas por los hombres y en ellas las mujeres desempeñan roles secundarios y auxiliares.

-Cambios en las relaciones de ambos sexos. Hay escasos estudios comparados de los cambios de la posición de la mujer en el transcurso

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