Cuadro Comparativo

WINNICOTT, DONALD RODULFO, RICARDO MELANIE, KLEIN

Piensa que el bebé no depende de la madre para su crecimiento y desarrollo lo define “como una empresa en marcha”, la madre debe proporcionarle el medio adecuado y satisfacer sus necesidades. Ella debe confiar en sus instintos para cuidarlo y el placer debe estar presente en este cuidado.

Durante este crecimiento se produce un desarrollo emocional que comienza desde el primer momento y establece la base de la salud mental en el desarrollo del individuo, y es la madre quien esta apta para protegerlo durante esta etapa (actitud afectiva). Este desarrollo emocional consta de: Tendencia innata al desarrollo, corresponde al crecimiento del cuerpo y al desarrollo gradual de sus funciones. Dependencia total al medio físico y emocional dado que el bebé no tiene conciencia de ella y pasa por ella para llegar a la independencia. Integración, al año la personalidad del bebé ha llegado a integrarse, es una persona total. Se desarrolla gradualmente y depende de las condiciones ambientales que proporciona la madre. Personalización, la psiquis y el soma llegan a un acuerdo recíproco. La psiquis in madura no está ligada estrechamente al cuerpo y a la vida del cuerpo. Mente y psique soma la psique se relaciona con el soma y el funcionamiento corporal y la mente, que ya se ha desarrollado rudimentalmente, depende de la existencia y el funcionamiento de esas partes del cerebro que se desarrollan después que las partes vinculadas con la psiquis, la madre puede permitirse fallas en la adaptación porque la mente y los procesos intelectuales del niño le permiten entender y tolerarlos. Fantasía e imaginación, se entiende como la elaboración imaginativa de la función física; realidad personal, el mundo interno del niño se concierte en una organización definida. Preserva lo bueno y isla lo malo, los objetos tienen interrelaciones vivas, excitantes, agresivas y afectuosas (posición de esquizoparanoide de Klein). Vida instintiva, al comienzo está basada en las funciones relacionadas con la alimentación, el bebé se interesa en la mano y la boca, gradualmente las funciones excretoras también participan. Relaciones objetales, al comienzo hay una relación con objetos parciales (el pecho). Este se experimenta como una parte de una persona total. Cuando reconoce el objeto total, acompaña el sentimiento de dependencia y luego la necesidad de la independencia. Antes de que el niño actúe como una unidad, las relaciones objetales representan la unión de una parte con otra (posición depresiva de Klein). Espontaneidad, es el impulso instintivo que tiene el bebé que termina con una satisfacción, insatisfacción difusa o un malestar general psíquico y somático, éstas son importantes para él y no puede soportar la espera. Capacidad creadora, se debe realizar en contacto con la realidad externa. El niño debe recrear el mundo (el pecho). Depende de la adaptación que la madre hace de las necesidades del niño. Motilidad –agresión, la agresión a actividades prensibles y masticatorias y la motilidad es precursora de esta agresión. Capacidad para la preocupación, depende de la integración de la personalidad infantil en una unidad y de que le niño acepte su responsabilidad con respecto a la fantasía total de la que corresponde al momento instintivo. Debe estar la madre presente en forma continua. Posesiones, adquirir ciertos objetos blandos, representan objetos parciales (pecho). Puede asumir una importancia vital y es intermedio en el self y el mundo externo (objeto transicional). Se manifiesta a la hora de dormir en momentos de soledad, tristeza o angustia. Amor, se modifica a medida que crece o incorpora nuevos elementos.

Winnicott reflexiona sobre la primera posesión del bebé (objetos- distintos-que-yo), estos objetos representan al pecho materno.

Esta relación con la primera posesión se vincula con el tiempo con los fenómenos autoeróticos y la succión del puño y del pulgar, y más adelante con el primer animal o muñeca blandos y con los juguetes duros. Tiene vinculaciones con el objeto exterior (el pecho materno) y con los objetos internos (el pecho mágicamente introyectado), pero es distinta de ellos.

El objeto transicional no es un objeto interno (Melanie Klein), el cual constituye un concepto mental, es una posesión. Pero para el bebé tampoco es un objeto exterior. El bebé puede emplear un objeto transicional cuando el objeto interno está vivo, es real.

Los objetos y fenómenos transicionales pertenecen al reino de la ilusión que constituye la base de la iniciación de la experiencia

La madre ofrece al bebé la oportunidad de crearse la ilusión de que su pecho es parte de él, pero luego debe desilusionarlo, el destete (concepto de posición depresiva de Melanie Klein).

Cuando

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