INVESTIGACIONES SOBRE LAS EMOCIONES POSTERIORES A LA EXPERIENCIA DE UN ROBO

CAPITULO 1 INVESTIGACIONES SOBRE LAS EMOCIONES POSTERIORES A LA EXPERIENCIA DE UN ROBO

1.1 Según Bouza de Suaya Graciela (2004, argentina). ”Victimas del robo”. Si se trata de un robo, asalto, el énfasis está puesto en el monto de lo hurtado, en la modalidad del delito y, en caso de saberse quién lo cometió, en las características del delincuente. Si el delito se acompaña de lesiones físicas, es posible que se las describa y las acompañe un pronóstico.

Exhaustivos estudios muestran las innumerables consecuencias que puede acarrear para alguien haber sido víctima de un delito. “Los mismos no han tenido, en nuestro país y en muchos otros, la difusión que merecerían, ni a nivel del público en general ni tampoco a nivel médico, salvo algunas especialidades, como la Psiquiatría por ejemplo”.

Bouza nos señala Pocas veces nos preguntamos qué pasa con las víctimas luego del momento agudo, y en general consideramos que si sobrevivió al mismo y las heridas físicas no fueron demasiado importantes, ella puede sentirse afortunada, lo cual es parcialmente cierto. Porque hay otro tipo de heridas, a menudo invisibles, que requieren un proceso de curación a veces muy largo, y que pueden dejar cicatrices más o menos duraderas.

Bard y Sangrey (1986), Burgess y Holmstron (1979), Kilpatrick (1987), Maguire (1980), Walker (1985), Wirtz y Harrell (1987). Nos señalan que concuerdan en que la victimización criminal produce una disrupción psicológica y conductual que oscila entre un malestar relativo, durante un corto tiempo, a trastornos serios y de larga duración, como en el TEPT APA 1985. Un hecho delictivo implica por lo menos un peligro para la víctima y va a desencadenar siempre un proceso de estrés.

1.2 Estudios realizados por Maguire y Corbett (1987) y por Hough y Mayhew (1985, Brasil) 35 % de las víctimas de robo sintieron temor, preocupación, nerviosismo, problemas de salud, estrés y/o malestar y los describieron como los peores problemas frente al incidente, 51 % dijeron no haber tenido problemas emocionales luego de haber sido robados, de los restantes, 27 % sintieron temor, preocupación y pérdida de confianza, 13 % padecieron malestar, 8 % se deprimieron, se estresaron, tuvieron trastornos del sueño y problemas de salud y una de cada 100 víctimas sintió enojo, frustración y rabia.

1.3 Kilpatrick (MEXICO 1990). En el estudio de realizo 65 mujeres afectadas por robo, de las cuales 8 % sufrieron un importante quebranto nervioso, 11 % consideraron la posibilidad del suicidio y 3 % atentaron contra su vida.

1.4 Estudio matemático ACTIVA (1990) En primer lugar, el concepto se refiere a la fuerza física y en tal sentido se excluyen otros tipos de agresiones que enmarcan en el ámbito de lo corporal. En segundo lugar, el concepto incluye también la variable de intencionalidad, la cual excluye aquellos hechos no intencionados que producen lesiones, es decir, los accidentes.

1.5 Organización (OPS, MEXICO 2004).Estudios realizados señala e que el problema del robo ha ido aumentando, también lo ha hecho la conciencia de su impacto en diversas áreas de la vida social, en especial el área de la salud. El robo, ante todo, tiene un impacto decisivo en las condiciones de vida de las personas, máxime porque atenta fundamentalmente contra su misma integridad física y su supervivencia al tiempo que menoscaba la calidad de la vida y, a la larga, erosiona las redes básicas de interacción social que sustentan el desarrollo de una comunidad.

Victima del robo en José Miguel Cruz (MEXICO 2004) En la actualidad, los enfoques adoptados en el examen de la victimización muestran, antes que diferencias, la proximidad de las características demográficas de las víctimas y los victimarios Así, desde la perspectiva de la salud pública, importan más saber quiénes suelen ser las víctimas más frecuentes desde el punto de vista demográfico y conductual que según categorías de la personalidad.

En ese sentido, la mayor parte de los estudios revelan que la victimización por el robo sobre todo la que termina con la muerte o con el daño físico de la persona, se encuentra asociada con ciertas variables demográficas.

CAPITULO II MARCO LEGAL EN MEXICO

2.1 CODIGO PENAL FEDERAL

Artículo 369.- Para la aplicación de la sanción, se dará por consumado el robo desde el momento en que el ladrón tiene en su poder la cosa robada; aún cuando la abandone o la desapoderen de ella. En cuanto a la fijación del valor de lo robado, así como la multa impuesta, se tomará en consideración el salario en el momento de la ejecución del delito.

Artículo 369 Bis.- Para establecer la cuantía que corresponda a los delitos previstos en este Título, se tomará en consideración el salario mínimo general vigente en el momento y en el lugar en que se cometió el delito.

Artículo 370.- Cuando el valor de lo robado no exceda de cien veces el salario, se impondrá hasta dos años de prisión y multa hasta de cien veces el salario.

Cuando exceda de cien veces el salario, pero no de quinientas, la sanción será de dos a cuatro años de prisión y multa de cien hasta ciento ochenta veces el salario.

Cuando exceda de quinientas veces el salario, la sanción será de cuatro a diez años de prisión y multa de ciento ochenta hasta quinientas veces el salario.

Artículo 371.- Cuando el robo

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