LAS IDEAS DE BRUNER: “DE LA REVOLUCIÓN COGNITIVA” A LA “REVOLUCIÓN CULTURAL”

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INSTITUTO DE ESTUDIOS PARA LA EXCELENCIA PROFESIONAL

MAESTRÍA EN EDUCACIÓN

MODALIDAD EN LÍNEA

ASIGNATURA

SEMINARIO DE PSICOLOGÍA EDUCATIVA CONTEMPORÁNEA

ASESOR:

ALUMNA

SESIÓN 3

TAREA 6

SÍNTESIS: LAS IDEAS DE BRUNER: “DE LA REVOLUCIÓN COGNITIVA” A LA “REVOLUCIÓN CULTURAL”

LAS IDEAS DE BRUNER: “DE LA REVOLUCIÓN COGNITIVA” A LA “REVOLUCIÓN CULTURAL”

Jerome S. Bruner fue uno de los psicólogos y científicos de la educación más importantes de nuestros días. Consiguió revolucionar la psicología en dos ocasiones, la primera vez con la llamada “revolución cognitiva” y posteriormente en los años 50, cuando propuso una “revolución cultural”. Pasando de la consideración de la mente como la capacidad que nos permite representarnos la realidad a considerar la mente humana como un producto de las fuerzas históricas culturales que conforman toda la sociedad.

Las ideas pedagógicas de Bruner en la “etapa de la revolución cognitiva”

Mientras trabajaba en Harvard como profesor entre los años 1952 y 1972, Bruner desarrolló una teoría del aprendizaje en la que describió el proceso de aprender, los distintos modos de representación y las características de una teoría de la instrucción. Momento en el cual reaccionaba en contra de Skinner y el conductismo, decidió fundar y dirigir el “Centro de Estudios Cognitivos” (1962).

En 1956 cuando publicó El proceso mental del aprendizaje junto con Goodnow y Austin, estudiaron la como la inteligencia humana busca clasificar su entorno en clases significativas de hechos, tratando cosas distintas como equivalentes. Es el proceso de categorización o conceptualización (formación de conceptos, toma de decisiones, inferencia, etc.). Este libro se considera el inicio de la revolución cognitiva, es decir el paso de la conducta como objeto de estudio a la mente humana, como facultad que procesa, filtra y manipula la información que recibe (ambiente-cognición-conducta).

Al inaugurarse el Centro de Estudios Cognitivos de Harvard Bruner publicó su libro El proceso de la educación y seis años más tarde (1966) Hacía una teoría de la instrucción, como fruto de la urgencia ante el problema de la reforma educativa.

En su libro El proceso de la educación Bruner, concibe la instrucción como un vehículo que debe permitir penetrar en las estructuras subyacentes de proposiciones que contiene todo ámbito de conocimiento. Planteaba que el conocimiento verdaderamente adquirido es el que se redescubre. Un currículo se basa en pasos sucesivos por un mismo dominio de conocimiento y tiene el objetivo de promover el aprendizaje de la estructura subyacente de forma cada vez más poderosa y razonada: “currículo en espiral”.

Es por todo esto que el aprendizaje es un proceso activo, de asociación, construcción y representación. La estructura previa del alumno provee significado, permite organizar sus experiencias e ir más allá de la información dada.

Bruner distinguía tres modos básicos mediante los cuales las personas se vuelven a presentar (representar) la realidad. Estos son: a) el modo “enactivo” (representar una determinada cosa mediante la reacción inmediata con ella). b) “Icónico” (se utilizan imágenes o esquemas para representar). Y, finalmente,

c) el modo “simbólico” (representar una cosa mediante un símbolo arbitrario). Esta propuesta afirma que dichos modos de representación se desarrollan a medida que las personas cambian cognitivamente, tomando en cuenta las etapas de Piaget.

En su libro Hacia una teoría de la instrucción defendía que toda teoría pedagógica debe tener cuatro aspectos a saber: 1) la predisposición al aprendizaje; 2) el modo como un conjunto de conocimientos puede estructurarse para que sea interiorizado lo mejor posible por el estudiante; 3) las secuencias más efectivas para presentar un material; 4) la naturaleza de los premios y los castigos.

Las tres implicaciones educativas de esta primera fase cognitiva fueron:

1. Aprendizaje por descubrimiento. La motivación en los estudiantes para que ellos mismos descubran las relaciones entre los conceptos y los conocimientos.
2. La información o contenidos de aprendizaje se deben presentar de una forma adecuada a la estructura cognitiva (modo de representación).
3. El currículo debe organizarse en forma espiral.

Las ideas pedagógicas de Bruner en la “etapa de la revolución cultural”

En 1970, cuando publica La importancia de la educación, ya no se cuestionaba la reforma educativa como reforma del currículo sino se perseguía una reforma integral del sistema educativo, en fuente de discriminación y reproducción social.

Mientras trabajaba como asesor del Science Advisory Comitee Bruner se empieza a preocupar por las interrelaciones entre la evolución humana y la cultura, los efectos de la pobreza o la transmisión cultural promovida por el sistema educativo. Esto le lleva a proponer un programa educacional capaz de conferir al alumno la libertad suficiente para desempeñar sus habilidades e ir más allá de la información dada. Ya que consideraba que la educación debía responder a los retos y desafíos que plantean las necesidades sociales y en consecuencia ocuparse de aquellos que tienen una desventaja al nacer (bajo nivel socioeconómico). Así surgió el Proyecto Head Start (1973), el cual originalmente era un programa de verano que posteriormente se convirtió en un proyecto que pretendía mejorar la salud, el bienestar personal, afectivo y social, el rendimiento intelectual y el interés en la escuela en población considerada de riesgo de exclusión social.

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