Procesos Neuropsicológicos

2.1 Procesos Neuropsicológicos

De acuerdo con la Evaluación Neuropsicológica Infantil (ENI), realizada por Matute, Rosselli, Ardila, y Ostrosky-Solís (2009), los procesos neuropsicológicos son el conjunto de atención, habilidades constructivas, memoria (codificación y evocación diferida), habilidades perceptuales, lenguaje, habilidades metalingüísticas, habilidades matemáticas, y funciones ejecutivas, los cuales serán explicados a continuación.

2.1.1 Atención

Tomando en cuenta que la atención es el primer proceso neuropsicológico mencionado, es importante mencionar la definición que proponen Ardila y Roselli (2007, en Orozco, 2011), dos de los creadores de la Evaluación Neuropsicológica Infantil, ellos la definen como la capacidad de procesar la cantidad de información que puede ser atendida y respondida en un periodo de tiempo definido.

Otra definición que puede resultar de utilidad es la propuesta por Sternberg (2011), él define la atención como el medio por el cual procesamos de manera activa una fracción limitada de la gran cantidad de información a la que tenemos acceso por medio de los sentidos, de nuestros recuerdos almacenados y de otros procesos cognitivos.

Para Orozco (2011), la importancia de la atención radica en la capacidad que nos proporciona para seleccionar entre una amplia gama de estímulos que recibimos del entorno sólo la información que resulta útil o funcional para las tareas o acciones que se desempeñan

2.1.2 Habilidades construccionales

De acuerdo con la definición propuesta por Asili (2004), sobre las habilidades construccionales, menciona que éstas se refieren al conjunto de procesos no verbales que abarcan la habilidad para dibujar, construir y manipular formas y dimensiones, pero para que esto se pueda lleva a cabo se requiere la integración visoespacial además la una adecuada integración de las funciones de los lóbulos frontales, parietales y occipitales.

Una situación que conlleva al sujeto al utilizar varias funciones cognitivas al mismo tiempo es la realización de tareas constructivas, que impliquen el procesamiento visual, la planificación, la organización y la ejecución en el caso de tareas de construcción visual (Hales, Yudofsky y Gabbard, 2009).

2.1.3 Memoria

La memoria es aquello que nos permite almacenar la información que vamos adquiriendo sobre el mundo a lo largo de la vida y en determinado momento, para después recuperarla y utilizarla en el momento que se requiera (Gómez Pérez et. al, 2003 en Orozco, 2011).

Este mismo autor menciona que la memoria es un concepto amplio que se refiere a los proceso de codificación y evocación de información, lo anterior hace referencia a una de las clasificaciones de la memoria, esta clasificación fue establecida por Baddeley y Mesulan (1990), tomando en cuenta al procesamiento de la información como intermediario entre la codificación, almacenamiento y evocación de la información.

Otra clasificación propuesta es la de Atkinson y Shiffrin (1968, en Orozco, 2011), en la que se divide a la memoria en memoria sensorial, memoria de largo plazo y memoria de corto plazo, de acuerdo al tiempo de duración de cada una y el tipo de información que almacene.

2.1.4 Habilidades perceptuales

Para poder entender de forma clara éste término resulta importante mencionar primeramente la definición de percepción, la cual se refiere a la interpretación que realiza el organismo de cada individuo en respuesta a los estímulos ambientales que chocan contra sus receptores sensitivos (Downie, 2006).

Por su parte, Gragorc (1982 en Salas, 2008), define las habilidades perceptuales como medios a través de los cuales es posible captar la información, implica que cada persona pueda percibir el mundo de determinada manera, concreta y abstracta por tener la habilidad perceptual para hacerlo, de igual manera Downie (2006), realiza una división de las habilidades perceptuales, clasificándolas en innatas y adquiridas, menciona que estas habilidades se pierden si los estímulos se encuentran ausentes o distorsionados, por lo que llega a la conclusión que la interacción entre el organismo y el ambiente es normalmente estimulante.

2.1.5 Lenguaje

De acuerdo con la definición propuesta por Sternberg (2011), define el lenguaje como el uso de medios ordenados que se utilizan mediante la combinación de palabras con el fin de comunicarse, él menciona que de igual manera el lenguaje hace posible que concibamos procesos y elementos que comúnmente no podemos ver, oir, sentir, tocar u oler.

Brown, Clark y Clark y Glucksberg y Danks (1965, 1975, 1977, en Sternberg, 2011), distinguen seis propiedades propias del lenguaje, las características propias del lenguaje son:

1. Comunicativo: por permitirnos comunicarnos con otras personas.

2. Regularmente estructurado: ya que al ordenar los símbolos de determinada forma ellos conllevan a un significado y si se les ordena de una manera diferente produce un significado diferente, lo cual nos indica que posee estructura.

3. Arbitrariamente simbólico: por crear una relación estrecha entre el símbolo y su referente correspondiente, tal es el caso de una idea, un proceso, un objeto, una descripción o una relación.

4. Generativo, productivo: por poseer un gama ilimitada de oportunidades para producir nuevas expresiones.

5. Estructurado en múltiples niveles: ya que el lenguaje y su estructura tienen más de un nivel disponible para su análisis.

6. Dinámico: debido a que el lenguaje se encuentra en constante evolución

De igual manera el lenguaje posee dos aspectos fundamentales, el primero de ellos se refiere a la comprensión receptiva y la decodificación de entrada del lenguaje, el segundo aspecto hace referencia a la codificación expresiva y la producción de salida, lo fundamental de estos dos aspectos radica en que mediante ellos se puede realizar una transformación de nuestros pensamientos que tienen la posibilidad de ser expresados como un resultado lingüístico (Sternberg, 2011).

2.1.6 Habilidades Metalingüísticas

Gombert (1992), Kamhi, Lee y Nelson (1985) y Van Leeck (1995) (en Flórez et. al, 2005), mencionan que las habilidades metalingüísticas se relacionan con la capacidad que los seres humanos tenemos para describir y analizar el sistema lingüístico, ya que se poseemos la capacidad de analizar, pensar, reflexionar sobre la forma y contenido o el uso del lenguaje con el que nos comunicamos según el contexto en el cual nos desarrollemos.

Para que lo anterior se pueda llevar acabo es necesaria una base cognitiva que permita seleccionar, analizar, atender y examinar los procesos del

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