Psicologia Del Mexicano

PSICOLOGÍA DEL TRABAJADOR MEXICANO

El mexicano se le tiene en un concepto general de "flojo", pero

definitivamente esta palabra le hace más alusión al ámbito del

trabajo. Sin embargo para que el mexicano haya conseguido esta

definición sobre él, no es porque en los últimos años no le haya

puesto ganas en su trabajo o porque llegó tarde a la junta, no.

Esta idea sobre nosotros los mexicanos la hemos venido adoptando

como una "cultura" desde muchos siglos atrás la cual es un factor de

suma importancia para la definición del comportamiento. Ya que

aunque todos formemos parte de una sola raza la humana somos muy

diferentes por el entorno que nos rodea desde que nacemos. Ese

entorno que es nos obliga a pertenecer a una cultura para poder

identificarnos del resto del mundo, esta pertenencia la va hacer

primordialmente por medio de los valores los cuales son elementos

dinámicos que definen a una cultura en los diferentes campos y su

principal transmisor va ser la familia.

Como mencionamos la cultura es la principal encargada de moldear a

una sociedad por tanto el comportamiento del individuo, pero para

que esta se vaya enriqueciendo se necesita de tiempo, lo cual va

crear una historia que va ir influyendo de una a otra generación.

Es por eso que para poder comprender la actual psicología del

mexicano dentro del ámbito laboral tendremos que dar una

retrospectiva hacia muchos siglos atrás, para darnos cuenta que este

comportamiento no es cosa actual sino que ya se había presentado en

otras épocas.

Se puede decir que la mexicanidad es una vocación y un estilo de

vida. Pero no siempre fue así, durante la dominación española hubo

muy poco interés en definir lo mexicano como tal, puesto que en

aquel entonces teníamos un sistema de gobierno monárquico donde

dependíamos de la corona española, fue hasta 1821 cuando se empieza

a crear por primera vez la conciencia nacional pero tuvimos que

esperar hasta principios del siglo XX para ver florecer

investigadores y reflexiones sobre la esencia de la mexicanidad.

Entre los pioneros de esta esencia se encuentran José Vasconcelos,

Antonio Caso y Samuel Ramos.

Es casi imposible que el mexicano se deslinde de este concepto que

se le ha creado alrededor del mundo, ya que su experiencia en la

rama laboral no fue precisamente la de un valor cuando durante la

colonia se enfrentó a miles de perversiones en su trabajo. Entre

algunas de las situaciones más notables que desafió podríamos

mencionar las siguientes:

- Destrucción violenta de los sistemas autóctonos de

organización laboral y de productividad.

- Sistema colonial en el que el poder, el dinero y el

prestigio dependían de nexos con la Corona española, no el trabajo.

- Corrupción administrativa que miraba en el pueblo el sentido

de honradez y compromiso. Los funcionarios de altos niveles eran los

primeros en dar malos ejemplos.

- Tomaban al trabajo como servidumbre, no como expresión

creativa de los sujetos.

- Existía la familia autoritaria.

- Se veía al trabajo como castigo de Dios, "Por haber

desobedecido… ganarás el pan con el sudor de la frente…"

Esto por mencionar algunas, ya que hubo una serie de acciones que

llevaron a que el mexicano no viera con placer el trabajo. Aunque

recientemente el Centro de Estudios Educativos encontró que el 83

por ciento de las personas se encontraba entre bastante y muy

orgullosa de su trabajo, el trabajo no es en sí el problema sino las

relaciones humanas y actitudes de las personas, porque podríamos

decir que nuestro principal motivador es el dinero,

inconscientemente el reconocimiento y motivación por parte de los

altos mandos lo es más. Muchas personas suelen decir que cuando algo

hacen mal, los jefes enseguida lo notan y empiezan las amenazas, sin

embargo cuando alguien hace algo bien pocas veces se lo reconocen y

cuando lo hace esto lo impulsa para trabajar con más ganas para

corresponder a esos halagos. Tristemente las expectativas de obtener

logros y reconocimientos son escasas en nuestro país, porque se no

se nos ha enseñado a reconocer el triunfo de los demás. Aunque se

dice que la intensidad de la motivación de una persona para actuar

depende de la fuerza con que cree que puede alcanzarlo que desea o

necesita

Pero retomando las situaciones que enfrentó el mexicano en el pasado

se podía ver a los nietos de los conquistadores llegando al poder

sin ningún esfuerzo y sólo para beneficio propio, lo cual podríamos

nombrar actualmente como "la palanca", lo cual a futuro sólo resulta

perjudicial puesto que no se contrata a personas preparadas sino

sólo a amistades que a la larga traerán perdidas ya que estas

tienden a hacer las cosas mal puesto que cuentan con el "jefe amigo"

que les "echa la mano". En contra parte a los nativos sólo se

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