Test De Mis Manos

Test de mis manos

Como test de redacción apunta a explorar aspectos de la personalidad ligados al hacer del sujeto, como se siente respecto a eso, que privilegia su pasado, presente y futuro, que utilidad le brindan sus manos, cual es la representación simbólica que se construye en torno a ellas, en tanto son una parte importante de su imagen corporal y de su comunicación y acción con el entorno.

Como elemento de contenido hemos seleccionado en el dibujo de la persona (DFH):

Evaluación de la cabeza porque es el centro de percepción social del sujeto, y el criterio de realidad con que percibe su entorno.

Los rasgos faciales: porque son los elementos comunicacionales.

Manos y brazos porque son los medios por los cuales el sujeto interactúa prácticamente con el mundo.

En el caso del test mis manos, tomaremos el contenido o argumentación temática global sobre la que gira la argumentación.

Aplicaremos esta selección de pautas de contenido al material que acompañamos al final de este material:

Se trata de una persona joven que se postulaba para un puesto administrativo. El sexo de la misma es masculino.

DFH: ítems de contenido específicos (según los que hemos seleccionado precedentemente):

• la cabeza presenta distorsión, no esta delimitada su forma, no cierra por debajo, esta de perfil hacia la izquierda, y su límite se funde con lo que seria el cabello. El tamaño de la misma es grande.

• Los rasgos faciales también están realizados en forma alterada, la nariz muy grande y angulosa, la boca grande triangular con bosquejo de dientes, no hay mentón ni cierre inferior del contorno de cabeza. Vale comentar que en el dibujo de la persona bajo la lluvia que se administro a continuación, la persona graficó exactamente de la misma forma y misma postura y emplazamiento (eje vertical, posición inferior intermedia, eje horizontal: centro con tendencia a derecha), el tamaño es mediano. Oreja derecha destacada mal definida).

• Los brazos son cortos, alejados del cuerpo, las manos son poco discriminadas (solo dedos, sin dorso de la mano), los dedos son incorrectos en número y de formas angulosas, mas indefinidos los de la mano derecha.

• Otros, el piso es muy largo, la figura en su postura da la sensación de movimiento (el pie derecho mas largo y como adelantado, el tronco no se une a las piernas, ausencia de cuello.

TEST MIS MANOS:

Al leer el argumento con que resuelve la consigna “escriba un relato con lo que este tema le sugiere: “mis manos”, si la persona parece o dice no comprender la consigna, podemos agregar luego, debe ser referido a sus propias manos y lo que estas le sugieren.

En este caso: plantea como destacado la torpeza de ellas, aunque luego dice que “no quiere decir que sea una persona torpe (no se entiende lo que escribió) ni inferior”. Sino que es inquieto y de movilidad… Después dice un poco atolondrado, al finalizar el texto intenta forzar el usar las palabras del texto y dice: “lo peor que me puede pasar es no tener ocupadas mis manos”.

Lo que denota es que el hacer el sentimiento de fuerza constructiva que explora en parte la fantasmática subyacente a este test, es aquí de inestabilidad, nerviosismo, falta de estabilidad probablemente asociado a una dificultad para conectarse consigo mismo y hacer introspección, plantea el texto solamente en tiempo presente, no aparece el pasado ni el futuro. Podemos ver un singo de impulsividad y dificultad para concentrarse, anclar, y por otro el “otro” no aparece en su discurso, sus manos hacen referencia solamente a lo que el desea hacer con ellas. No hablan de intercambio interpersonal, dar…etc

Las manos, como antes hemos comentado, son después de la cabeza, los principales órganos externos del cerebro y los instrumentos de la acción. Son los órganos ejecutores del pensamiento, los instrumentos destinados a proveernos del alimento necesario a nuestra conservación, los instrumentos de aprendizaje que nos permiten manejar objetos, crear objetos nuevos, atacar y defendernos frente a las contingencias del mundo que nos rodea.

Los brazos y las manos se relacionan, íntimamente, con el núcleo de la personalidad y son, por decirlo así, el instrumento nuclear de la personalidad externa. En las manos, si no está escrito el destino, como pretenden los quirólogos, si que dependen de ellas gran parte de la evolución y del destino humano, pues, se piensa con el cerebro, pero se actúa con las manos y es en las manos donde tiene el hombre su destino personal, familiar, profesional, social, etc. y, sino, quitémosle las manos, ¬a ver que queda!.

Sin las manos, seriamos unos seres inútiles, incompletos, indefensos e incapaces de sobrevivir. De aquí la importancia que debemos prestar, en los DFH, al dibujo de los brazos y las manos.

En la manera de tratar en los DFH los brazos y las manos, se revelan importantes aspectos de la personalidad, tales como: la manera de entrar en contacto con el entorno (agresiva, cordial, generosa, tímida, coartativa, etc.); el grado de destreza y eficiencia en la actividad; las aspiraciones; la confianza en si mismo; los complejos de culpabilidad relacionados con las manos (apropiación ilegitima, masturbación, rotura de objetos que se quiere ocultar, etc.); las cualidades artísticas y otros aspectos relacionados con el cuerpo, con los sentimientos o con el espíritu.

1. manos grandes con palma ancha

Exteriorización de las necesidades de contacto y de acción referidas a todo cuanto puede hacerse con las manos: manipular objetos, relacionarse con otras personas, pegar, castigar, matar, apropiarse de algo, etc.

De algunas de las acciones que pueden realizarse con las manos se pueden derivar complejos de culpabilidad. La Dra. Koppitz observó complejos de culpabilidad en sujetos dados a apoderarse de lo ajeno y en muchachos que practicaban la masturbación.

Dedujo de las manos grandes la dificultad o incapacidad para entablar nuevas relaciones, ligado a torpeza o insuficiente destreza manual.

Nosotros, hemos visto figuras con manos grandes en sujetos con sentimientos de inferioridad y dificultades de adaptación, pero con deseos de compensar su bajo nivel en el C.I. con alardes de fuerza.

Unas manos grandes las tenía el célebre revolucionario Pancho Villa, responsable de centenares de asesinatos y de crímenes. También las tenía Adolfo Hitler. Y José Salín, famosos por sus tendencias sanguinarias. Para estos dictadores, matar era más fácil que persuadir. "Así como los dedos -dice Charlotte Wolff- se desarrollan paralelamente con la inteligencia y son el índice de la mente consciente, la palma tiene un sentido

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