Totem y tabu Sigmunt Freud (1912-1913)

En el siguiente informe  se toman como eje las ideas planteadas Sigmunt Freud (1912-1913) en su obras Totem y Tabu de los capítulos "El horror al incesto y Ambivalencia de los sentimientos" .El autor Sigmunt Freud (1913) expresa como principal objetivo de este documento es presentar su punto de vista y aplicarlo en los hallazgos del psicoanálisis a problemas no resuelto en la  psicología social.

Para lograrlo Sigmunt Freud (1913)  toma como eje el análisis de los tabúes en forma de intentar una segura y exhaustiva solución al problema y mediante el totemismo mostrar que existe una relación con las sociedades salvajes contemporáneas y los pacientes neuróticos y por ende evidenciara que será algo cercano a nuestras creencias contemporáneas

I EL HORROR AL INCESTO

Este estudio se centra en el análisis del comportamiento   de aborígenes australianos sus costumbres y formas de representación social. Mediante la conexión que existe entre el totemismo y la exogamia en las sociedades primitivas.

Sigmunt Freud (1913) se refiere al tótem afirmando que “aquellos que descienden del mismo tótem son consanguíneos y forman una familia en el seno de la cual todos los grados de parentesco, incluso los más lejanos, son considerados como un impedimento absoluto de la unión sexual y por tanto, no deben casarse entre sí”.  (Página 3)

Esta   particularidad del sistema totémico es la que para el autor le  ayuda a comprender la relación del desarrollo psicológico que considera similar al de las primeras sociedades humanas. Dicho caso Freud lo denomina  ley de la exogamia.

Para Sigmunt Freud (1913)  la exogamia es el medio más eficaz que tenían las tribus de aborígenes australianas para impedir el incesto, el cual constituía la principal fobia. De esta manera el autor en el desarrollo de su obra muestra que esta “ley poco a poco va constituyendo la base  de todas las demás obligaciones sociales y restricciones morales de la tribu” (página  5).

El autor establece que desde el punto del psicoanálisis los primeros deseos sexuales del hombre están representando por la madre o la hermana y que su represión conduce a una actitud incestuosa desencadenando el complejo central de la neurosis dicho esto el Freud menciona que el temor al incesto constituye un rasgo esencialmente infantil y concuerda  con la  vida psíquica de los neuróticos.

II EL TABÚ Y LA AMBIVALENCIA DE LOS SENTIMIENTOS

Sigmunt Freud (1913)  se refiere al  tabú afirmando que se “manifiesta esencialmente en prohibiciones y restricciones las cuales  se someten los pueblos primitivos, ignorando sus razones y sin preocuparse siquiera de investigarlas, pero considerándolas como cosa natural y perfectamente convencidos de que su violación les atraería los peores castigos” (página 10)

Sigmunt Freud (1913) considera que la creencia en los espíritus y en los demonios que nace en los instintos primitivos del hombre; esto es, en temor a la acción de fuerzas demoníacas. Es la razón que lleva a  que “poco a poco a constituirse el tabú en un poder independiente, desligado del demonio, hasta que llega a convertirse en una prohibición impuesta por la tradición y la costumbre, y, en último término, por la ley”. (Página 10)

sin embargo el autor considera no pertinente explicar el concepto de tabú desde la consecuencia de la creencia en los demonios puesto que para él ni el mundo ni los demonios pueden ser considerados en Psicología como causas primeras, más allá de las cuales sea imposible remontarse “ya que solo son creaciones de las fuerzas psíquicas del hombre” (página 11)

 Sigmunt Freud (1913)  compara la psicologia de los pueblos primitivos con la psicología del neurótico y halla una familiarización del tabú con la parte inconsciente de la vida psíquica.

Para sustentar dicha familiarización Sigmunt Freud (1913) manifiesta la coincidencia de los síntomas de la neurosis obsesiva con las prohibiciones tabú en un ejemplo el que se refiere a  “un caso típico de délire de toucher el desarrollo ulterior de la neurosis se deriva de este duradero conflicto ante la prohibición y la tendencia.” (Página 12). Se evidencia según Sigmunt Freud (1913) que en este caso la prohibición impuesta al sujeto le genera “un deseo oculto insatisfecho es  sus más tempranos años infantiles y que se siguen desplazando y recaen en los nuevos fines elegidos por el deseo” ( página 13)

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