Tratamiento de un caso de buylling.

1. Introducción

- Consecuencias del maltrato

- Características de agresores y víctimas

2. Plan de intervención

3. Desarrollo de una sesión

4. Evaluación final

Introducción

Dan Olweus, fue uno de los primeros y de los más importantes investigadores del “buylling” o acoso escolar. Él dio uno de las primeras definiciones que sigue vigente hoy en día. Según esta, para considerar que estamos frente a un caso de acoso escolar debemos tener una conducta de persecución física y /o psicológica que realiza un alumno contra otro, que se mantiene en el tiempo de forma negativa e intencionada.

Se debe considerar como un subtipo dentro de la agresión. No es un agresión tal cuál dado que no son dos partes con intereses contrapuestos. Es un proceso de victimización y debemos resaltar que no es un problema individual, sino que es un fenómeno de grupo.

CONSECUENCIAS DEL MALTRATO

Estas conductas tienen consecuencias tanto en la víctima como en el agresor. En las víctimas rápidamente se pueden ver actitudes de ansiedad, soledad, depresión e, incluso en algunos casos, ideas suicidas y/o suicidio. Conlleva a fobia al centro social, así como pérdida de interés en todos los aspectos de su vida ya que fomenta la imagen negativa de si mismo en todas las áreas. Se culpabiliza de su situación, y a largo plazo le condiciona sus relaciones interpersonales en la vida adulta.

Por el contrario, al agresor esta conducta le lleva a un aprendizaje de cómo conseguir sus objetivos, estatus y reconocimiento social; y generalizar esta conducta a otros ámbitos e incluso en la vida adulta (relaciones de pareja, mundo profesional…); aunque generar un rechazo social que suele perdurar hasta la vida adulta.

CARACTERÍSTICAS DE AGRESORES Y VÍCTIMAS:

Agresores

Diversos estudios (Olweus, 1998; Ortega, 1994) señalan al género masculino como principal figura agresora; aunque cada vez aparecen más casos en los que las acosadoras son de género femenino (utilizan agresiones psicológicas en sus intimidaciones de forma más sutiles). Físicamente suelen ser superiores a sus iguales (ya sean de fortaleza en los hombres, y de belleza en las mujeres). Su forma de ser es agresiva e impulsa, con dificultades en las relaciones sociales. Se plasma en ellos falta de empatía y de sentimiento de culpa hacía la víctima. Bajos niveles de tolerancia a la frustración así como sesgos altos de hostilidad que hace que todo lo interprete como fuentes de agresión y menosprecio hacia su persona.

Generalmente están poco interesados por la escuela, carecen de lazos fuertes de familia y suelen ser los mayores de clase por ser repetidores. Esto añadido a su carencia de habilidades sociales, posiblemente, le hace estar más cargado de ira. Están menos aceptados que el resto de sus compañeros, pero más que las víctimas.

Hay dos prototipos generelas de agresores: el directo o indirecto. El primero ejerce la gresión de forma directa con su víctima. El segundo, lo ejerce a veces desde la sombra, mandando a otras personas. En base a esto, deberíamos añadir un tercero: el que realiza el papel de brazo ejecutor cuando lo manda el agresor “en la sombra”.

Víctimas

Ambos sexos implicados por igual, aunque se notan diferencias dependiendo de la cultura (por ejemplo, más casos de chicas en países orientales).

Suelen ser débiles, inseguras, ansiosas, tranquilas, tímidas y con bajos niveles de autoestima. Suelen caracterizarse por mantener un fuerte arraigo al hogar, por padres sobreprotectores. Especialmente con sus madres.

No tienen redes sociales de apoyo en el centro escolar. Suelen ser personas aisladas que no tienen amigos en la clase, si lo tienen son 1 ó 2 y le cuesta hace

Físicamente suelen tener algún rasgo característico

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