EL PODER DE LA PALABRA.

ENSAYO:

EL PODER DE LA PALABRA

PRESENTADO POR:

JAMEL ALEJANDRO MESA RODAS

DOCENTE   :

GABRIEL ANTONIO ECHEVERRY

UNIVERSIDAD CUNDINAMARCA

POSTGRADOS

ESPECIALIZACIÓN EN GERENCIA PARA EL DESARROLLO ORGANIZACIONAL

EXTENSIÓN FACATATIVÁ, SEPTIEMBRE 26 DE 2016

INTRODUCCIÓN

Debo expresar el placer que siento de hablar de un tema tan importante como el poder de la palabra. Los seres humanos nos hemos enredado en la palabra, ya que en muchas ocasiones no la hemos utilizado correctamente, a  través de este ensayo quiero mostrar como el ser humano la ha utilizado para destruir a sus semejantes en vez de utilizarla para edificar a .sus semejantes.

También manifiesto como el ser humano en busca de la perfección y al sentirse impotente por no lograrla se martiriza mentalmente. De cómo el ser humano vive de las suposiciones y no corrobora lo que se ha dicho de él con sus semejantes sino que por el contario da las cosas por hecho.

EL PODER  DE LA PALABRA

Desde los tiempos  antiguos la palabra ha jugado un  papel muy importante en la relación de los seres humanos, a través de ella el ser humano la ha utilizado para hacer el bien o el mal. La lengua es un órgano muy pequeño que a veces no controlamos y que cuando la movemos puede llegar a destruir a las personas inclusive a las naciones, de ahí la importancia de usarla correctamente para edificar y no para destruir.

A veces consciente o inconscientemente herimos los sentimientos de las personas con palabras que no edifican sino que por el contario destruyen, destilamos ese veneno que llevamos por dentro, porque de la abundancia del corazón habla la boca, es decir damos de lo que tenemos en nuestro corazón como el odio, el rencor, la amargura, la envidia, el egoísmo etc. , ni somos felices consigo mismo porque no hay una paz  interior.

Cuando nos liberemos de todos estos males que nos aquejan, empezaremos a gozar de la paz interior, a llenarnos de la libertad de las cadenas y a gozar de la felicidad. No podemos dar de lo que no tenemos, como vamos a dar amor si tienes odio en tu corazón, o cómo vas alegrarte con el vehículo que compró tu vecino si tienes envidia en tu corazón.

Utilicemos entonces la palabra  correctamente en pro de construir y de edificar a las demás personas haciéndolas sentir bien, que ellas sientan que son importantes para nuestras vidas  y no nos desgastemos  mentalmente ,en las ofensas o improperios que nos han hecho nuestros semejantes. Las cosas viejas pasaron he aquí son hechas nuevas.

Cuando las personas se refieran a usted con palabras destructivas hacer caso omiso de estas, decir más bien  decir esas palabras son anuladas en el  nombre de Jesús y no las recibo para mí. Cuando suceda esto, es cuando más tenemos que estar fortalecidos mentalmente, estando seguros que la gloria postrera será mayor que la primera.

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