TEOLOGIA Y EDUCACION EN PERSPECTIVA DE REINO

En Juan 7: 14 - 18, la respuesta de Jesús a sus contradictores, acerca de su autoridad educativa, apunta a mostrar, que la verdadera fuente del conocimiento y la verdad están en asumir existencialmente en la historia, la voluntad divina, y que ello hace autentica la enseñanza. Jesús reformula el significado de la educación, el aprendizaje y el conocimiento auténtico, desde la histórica acción fiel (Juan 3: 21). Es desde la practica de la verdad, el amor, la obediencia e.t.c que se halla la interrelación fe y fidelidad, lo cual equivale a decir que quien practica el amor y la justicia, esta conociendo a Dios y su voluntad (practica fiel del pacto).

La vida de Jesús se traduce en términos de amor en la historia concreta, y tal amor se identifica con la rectitud y la justicia. Así pues, conocer y amar a Dios pasa por la opción, la condición y compromiso personales, esto es, compromiso coherente y activo con la política del Reino de Dios a la luz del pacto.

- El conocimiento como Obediencia:

Ir mas allá del idealismo y el dualismo propios de la teología clásica, implica partir del hecho de que no existe la verdad mas allá de la historia concreta (la verdad como pre - existente a su eficacia histórica) que involucra a los seres humanos como agentes y que, en consecuencia, no puede haber conocimiento excepto en la acción transformadora de la historia.

Se hace pues necesario, recapturar y reapropiar una visión bíblica del conocimiento y de la verdad tanto en la teología como en la educación.

Visión Bíblica: El conocimiento correcto puede o no darse y eso depende de la acción fiel en la historia. La visión bíblica de la Palabra de Dios es una realidad de un evento creativo y liberador, con pronunciamientos que hacen historia y redimen, a través del Jesús hecho carne, por lo que aquí de los que se trata, es de una correspondencia activa por parte del creyente, en la acción liberadora y creativa de Dios en el mundo. Entonces tenemos, que conocer a Dios es modelar la propia vida en concordancia con el carácter de Dios (jeremías 9: 23 - 24), quien es justicia. El autentico conocimiento bíblico es esencialmente ético en cuanto a su naturaleza, y la yuxtaposición de conocer y hacer justicia se funda en la naturaleza de Dios y en su acción en la historia, además de la justicia es el fundamento del pacto de Dios con su pueblo.

Una teología de la Praxis: De lo que se trata es que el quehacer teológico cumpla con su papel de proclamar la verdad (evangelio), con miras a la obediencia de la fe en la historia, y que por tanto se hace indispensable una reformulación epistemológica.

Para la teología de la liberación, la liberación de la razón se presenta en relación dialéctica con la liberación de la miseria humillante de la situación histórica concreta. Para la teología latinoamericana el compromiso teológico es primero y después viene la reflexión sobre las implicaciones teológicas de la acción.

- El discipulado como Discernimiento:

Para conocer a Jesús se hace imprescindible el seguirlo en la vida cotidiana, pues tal seguimiento ilumina y correlaciona el método teológico y la autentica experiencia religiosa de la espiritualidad cristiana. Aquí se sucede la ruptura epistemológica desde la experiencia, mas que del intelecto, pues se da un una nueva forma de conocer fundamentada en la praxis, y la cual se materializa en la conversión de vida.

El discernimiento: proceso y estructura: El discernimiento cristiano es la búsqueda concreta de la voluntad de Dios, no solo para ser captada, sino para ser realizada. Ahora ¿Como discernir? El primer paso es partir del rotundo y claro “No” de Dios al pecado que deshumaniza a los seres humanos y extender este “No” a toda la historia. En segundo lugar, hay que escucha el categórico “Si” de Dios a la reconciliación de la humanidad. Así pues, el discernimiento debe ser practicado en apertura a la praxis del amor y a la superación del pecado objetivo en la historia. Otro criterio de discernimiento es la encarnación que toma partido en favor de los empobrecidos y oprimidos, otro es el de los signos efectivos o mediaciones que procuran soluciones efectivas y particulares (milagros, perdón e.t.c.), otro mas, es el de la praxis del amor sociopolítico, el cual procura que la eficacia del amor se aplique a la configuración del conjunto de la sociedad.

Características formales del discernimiento practicado por Jesús: El involucramiento en un proceso de aprendizaje que tenga un desarrollo histórico, demanda de radicalidad y apertura a la verificación.

Las anteriores consideraciones, nos llevan a plantear que el conocimiento funda en la praxis es una epistemología de la obediencia.

- La fe en cuanto práctica de la justicia: La práctica de la justicia define el perfil distintivo de la fe en nuestra situación histórica presente.

El amor cristiano para la transformación social: La justicia es la forma de concretar el amor que busca eficazmente humanizar a las mayorías empobrecidas y humilladas, dando paso a la visibilidad histórica anticipada del Reino de Dios. Existen algunos rasgos históricos de la justicia y su conocimiento: La justicia toma en serio la existencia de las mayorías oprimidas y el mundo creado, lleva concretamente al redescubrimiento del pecado, intenta recrear a los seres humanos, y hacer que la vida sea posible para ellos, requiere la adopción de una perspectiva parcial y subjetiva en la practica del amor, promueve un autovaciamiento y la adopción de una actitud humilde, conduce a una conversión radical y personal, subraya el servicio como expresión de amor, recupera la noción bíblica del prójimo, tiende a desembocar en la persecución.

La justicia de cuerpo al amor Cristiano: El Reinado de Dios involucra la totalidad de las relaciones humanas, la justicia es una forma eficaz y necesaria de encarnar la verdad bíblica de que Dios toma partido por los empobrecidos, hace que el amor adopte el perfil concreto de la justicia y ahí se esta reconociendo el papel mediador y unificador de las cosas materiales, la justicia tiene que ver con esa clase de relaciones interpersonales y sociales opresivas que es pecaminosa por excelencia, involucra la totalidad de las relaciones humanas, afectando dichas relaciones, el amor impotente se torna en intensidad única y especial, es una necesidad histórica y de responsabilidad. Así pues, la fe y la justicia son la respuesta cristiana integral a la actividad creativa y liberadora de Dios en favor del mundo.

El discipulado para el Reino de Dios: La forma primera y fundamental de conocer y amar a Dios a través de Jesucristo, consiste en entrar en el ejemplo develador de su vida, una vida caracterizada por el amor en

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