Vida en Santidad

COMO CONSERVAR MI SANIDAD

Aunque me sienta herida quiero sanar, no debo dejar que me afecte las dolencias guardadas en la memoria del alma  

Estas heridas del alma las podemos tratar a través del perdón. Si sentimos rechazo de niño estaré predispuesto a que me rechacen, Si fui maltratado maltrataré a alguien más, aquellos pensamientos que recordamos cuando fuimos niños …como burro, inútil, nos hace daño

Si recibimos a Jesús en nuestro corazón a nuestro, medico de médicos, Él es quien puede sanar esas heridas, esas dolencias del alma… cuando entregamos nuestro corazón, nuestras vidas, nuestras heridas a Jesús.

Alma:  pensamientos, emociones, voluntad

Al recibir a Jesús en nuestros corazones, empezamos a sanar, y debemos ser coherentes debemos cuidar como reaccionamos, Reaccionar con un espíritu afable mantener nuestra sanidad en el alma. El 90% de la vida es la reacción ante el efecto de los demás.

¿Qué hay dentro de mí? ¿Soy como un frasco de ácido o como un frasco miel, si se rompe, que se va a derramar de mi interior? Jesús espera que sea un corazón lleno de miel al comprender que somos nuevas criaturas.

Cuidar como reaccionamos ante las situaciones externas de la vida, para conservar mi sanidad. Debemos a refrenar la lengua, no hablar mal, tener pensamientos acordes a lo nuevo que hay dentro de mi ser, mi ser es TEMPLO DEL SEÑOR.

FIRMES EN LA LIBERTAD

Jesús murió por nosotros, dio su vida por nosotros para tener esa libertad espiritual y convencernos de qué somos hijos de Dios, que podemos confiar en El en todo el sentido de la palabra y valorar el momento en el que encontramos a Jesús en nuestros corazones como nuestro primer amor.

Los beneficios de la sangre de Jesús es la libertad que podemos tener con gratitud al Señor.  Por nuestra libertad pasamos de las tinieblas a la luz

Si recibimos a Jesús en nuestro corazón y nos hicimos amigos de Dios debemos tener en cuenta que el enemigo querrá achecharnos, querrá hacernos daño, querrá quitarnos la libertad que Jesús nos dio al morir por nosotros en la cruz, porque hemos elegido tener el amor de Dios en nuestra vida y en nuestra familia, debemos tomar la potestad de hijos de Dios, ser fuertes perseverar, alabar, orar ayunar, para que sepa que estamos firmes en Dios con confianza siempre.

Debemos andar en el espíritu y no caer en las tentaciones del mundo, debemos fortalecernos en el espíritu, someternos a Dios y huir del diablo, resistir al diablo con la espada del espíritu.

Debemos andar con la cobertura de los líderes, de los pastores, de DIOS, porque nueva criatura soy en Cristo, debemos pararnos con fe en la palabra de Dios frente a los ataques del enemigo

Ser sabios y edificar nuestra casa sobre la FE, sobre el poder de la palabra de DIOS, en la confianza de ser hijos de Él, con su AMOR ser fuertes hacer nuestra casa con solidez en Dios para que nada pueda arrebatarnos esa firmeza y libertad.

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