Estufa Solar

Estufa solar plegable

Por Susana Cruz Martínez

Introducción

Una de las principales preocupaciones ambientales a nivel global, es el uso de energía, ya que la gran mayoría se produce mediante fuentes contaminantes. Además, todo indica que la energía producida por combustibles fósiles será cada vez más cara debido a su agotamiento.

Ante este panorama del calentamiento global por el excesivo uso de combustibles fósiles como el petróleo y gas natural, se hace necesario buscar alternativas viables, baratas y fáciles de realizar que aminore esta problemática.

Frente a este panorama, la energía solar se presenta como una interesante alternativa. Si bien en sus inicios era una tecnología poco práctica, además de cara, hoy existen formas más simples y eficientes de usar el poder del sol, incluso para cocinar.

Una alternativa ecológica para cocinar nuestros alimentos son las estufas solares, una estufa solar es un aparato que nos permite cocinar usando el sol como combustible o fuente de energía. Con el uso de estos aparatos sencillos, nos ahorramos miles de pesos anuales en la compra de combustibles, además reducimos el calentamiento global.

La mayoría de las cocinas solares que existen en la actualidad son fabricadas de forma artesanal. De hecho, se comercializan manuales para hacerlas, al estilo “¡hágalo usted mismo!”. Pero no todos pueden o quieren fabricar su propia cocina, por lo que ya existen empresas que ofrecen varios modelos.

Si bien en la ciudad, por la falta de espacio y tiempo, pueden ser poco prácticas, las cocinas solares tienen un gran potencial en el mundo rural y para salir de excursión. Otro factor clave es el clima. En zonas templadas funcionan a la perfección en verano, pero en regiones calurosas cómo el norte y sur de México, el sur de los Estados Unidos y los países tropicales en general, se pueden usar durante todo el año.

¿Qué es la estufa solar plegable?

La estufa solar plegable es una ecotecnia que promueve el uso de la energía solar y así reducir el consumo de combustibles como el gas, petróleo, y leña, sustituyendo la estufa convencional. Además no contamina y ayuda a la familia ahorrar dinero.

Con esta ecotecnia es posible cocinar algunos alimentos diarios y calentar agua- Su eficiencia depende del clima y temperatura diaria, lo que puede usarse frecuentemente siempre y cuando las condiciones ambientales lo permitan.

¿Cuántos tipos de estufas solares existen?

Básicamente hay cuatro (4) tipos clásicos de estufas solares:

Estufas de Enfoque, Directa o Parabólica: en la cual el recipiente que contiene los alimentos, se coloca en el punto focal de un reflector parabólico. Este tipo de estufas suelen basarse en un disco cóncavo que concentra los rayos del sol sobre el fondo de un bote. La ventaja de esta estufa es que cocina casi tan rápido como la estufa convencional. La desventaja es que son complicadas de hacer, que deben estar siempre mirando el sol y que pueden causar daños a los ojos si no son usadas correctamente.

Estufas de panel: Esta nueva estufa fue desarrollada por Roger Bernard en Francia. Este diseño, tiene varios paneles planos que concentran los rayos del sol sobre un bote dentro de una bolsa de plástico o debajo de un bol. La ventaja de este diseño es que puede ser montado en una hora, por casi nada. En Kenia estas cocinas se están construyendo para el Proyecto Refugio Kakuma por 2 dólares americanos cada una.

Estufas de Vapor: donde un colector plano calienta una cantidad pequeña de agua produciendo vapor, el cual por su baja densidad sube hacia el recipiente con alimentos. El vapor transfiere el calor a los alimentos, se condensa y vuelve al colector evaporándose otra vez provocando un ciclo continuo.

Estufas tipo Caja y Horno (o Kerr-Cole): que es una cámara aislada con una ventanilla a un lado a través de la cual penetra la radiación solar utilizando reflectores planos. Las ventajas de este tipo de cocinas es la lentitud, incluso cuando se están cocinando grandes cantidades de comida. Las variaciones van desde la inclinación hacia el sol y el número de reflectores.

Recientemente son introducidas las estufas de embudo, resultado de la combinación de las estufas parabólicas y de caja. Más económicas y seguras.

¿Cómo hacer una cocina solar?

Materiales necesarios

Los materiales necesarios para construir una estufa solar son económicos y fáciles de conseguir. Se requiere de dos cajas de cartón (figura 1), casi cualquier tamaño servirá. En general, las cocinas más grandes son más calientes. El factor limitante es la relación entre la cantidad de comida y el tamaño de la cocina. Se sugiere usar una caja interior que sea por lo menos 38 cm x 38 cm. La caja exterior deberá ser más grande, y la caja interior deberá tener al menos 2,5 cm de espacio entre las dos cajas. La distancia entre las dos cajas no tiene que ser igual en todos los lados.

También se necesita un plancha de cartón para hacer la tapa. Esta pieza debe ser aproximadamente 8cms más grande alrededor que la caja grande.

Un rollo pequeño de papel de aluminio.

Un tarro pequeño de pintura negra mate (sin plomo) o ceniza de madera limpia.

Pegamento o silicón para el sellado.

Papel aluminio.

Periódico como aislante.

Una plancha de vidrio de 3 mm del tamaño de la caja exterior o al menos 3 cm más grande que la caja interior.

Pasos de elaboración

Es bastante fácil hacer una estufa solar de caja plegable a partir de dos cajas de cartón. El truco está en cortar los fondos de ambas cajas, obteniendo así dos piezas con cada una (los lados y el fondo). Después de haber hecho esto, se plagan los lados de las cajas hacia dentro y ponerlos dentro de la base. Cuando queramos utilizar la cocina, basta con colocar los lados en su sitio. La tapa encaja perfectamente en la base de la caja más grande, por lo que, cuando la cerramos, se convierte en un maletín normal.

Corta el fondo de la caja más grande. Haz un “acordeón” plegando los lados más cortos por la mitad. Entonces, mete los lados dentro de la caja.

Haz dos dobleces en cada ala de tal manera que una vez plegados, formen una doble pared separada por 2’5 cm (aprox.1 pulgada). Fíjate que los lados más cortos deberán ser cortados (un poco más de 2’5 cm por cada lado) para poder ser doblados.

Pon dos topes de cartón en el fondo de la caja para que al meter el fondo de la caja pequeña se mantenga el espacio entre las cajas y rellena de periódico corrugado como aislante.

Corta el fondo de la caja

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