A Propósito De PISA

A propósito de PISA

No cabe duda, que el tema de la educación, sigue siendo el centro del debate en el desarrollo de los cursos de Administración Pública y Gobernabilidad. Los cuestionamientos, críticas, autocríticas y demandas provienen de los participantes que estamos inmersos tanto en la administración pública o privada; y es en este contexto, que existe el consenso de que nuestro sistema educativo enfrenta serios problemas, y nos plantea el desafío de “imaginar o avizorar”, diagnósticos y propuestas.

Educación, una palabra que es replicada en el principal buscador, con 18 500,000 resultados -sólo en español-, “una palabra con múltiples significados, pero cuya carencia determina fatalmente un pobre o inexistente desarrollo del ser humano y de los pueblos”, como bien lo han expresado los especialistas.

Se dice también, que la educación es el tesoro de una sociedad. Sin embargo, no todos los países la consideran como su prioridad, aunque siempre es un tema que genera interés, ya que el mundo ha experimentado un auge económico sin precedentes y en ello la ciencia y la educación han jugado un papel fundamental.

Y es a propósito de los resultados de la evaluación PISA 2012, que recientemente han sido dados a conocer; que nos hemos puesto a la tarea de redactar este artículo, con la loca idea de imaginar que algo podríamos aprender de otras realidades o en algo podríamos mirarnos y a partir de ello comenzar a “soñar” con una “buena educación”.

Pero antes, debemos saber ¿de qué se trata esta prueba?, ¿qué se evalúa? ¿estamos realmente en desventaja para resolverla?. Lo primero que convendría aclarar, es que PISA no es una evaluación curricular, ni de grado escolar, se evalúa a los estudiantes de 15 años, se basa en un enfoque de habilidades para la vida, de cuán preparados están los jóvenes al fin del ciclo educativo, para enfrentar los desafíos de una sociedad crecientemente tecnológica, ya que eso va a predecir si van a tener éxito en su vida adulta.

En esta prueba, se eligen tres disciplinas: matemática, lectura y ciencias, y el enfoque de PISA, es cómo usar estas materias para resolver problemas concretos, no hay preguntas de corte teórico. Asimismo, hay distintos tipos de preguntas: de múltiple opción, de respuesta construida, de opciones restringidas, hay algunas de verdadero o falso y combinación de situaciones. Y algo muy importante que debemos dejar en claro es que la prueba es exactamente la misma para los jóvenes de todos los países que participan en el examen.

Dicho esto, y a la luz de los resultados de la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA), la nota promedio que establece la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) para las tres materias son de 494, 501 y 496 para matemáticas, ciencias y comprensión lectora respetivamente, en donde nuestro país no solo obtuvo puntajes muy lejanos a este promedio, sino que ocupó el último lugar en todas las categorías, 368 matemáticas, 373 ciencias y 384 lectura, fueron las notas que obtuvo, todas superadas por los otros 64 participantes de la evaluación.

El organismo también señaló que quienes lideran el ranking son los países asiáticos, en donde varias regiones administrativas de China, con Shanghái a la cabeza, se sitúan entre los diez primeros puestos, mientras que el prestigioso sistema educativo de Finlandia, considerado durante años, uno de los mejores del mundo, desciende al doceavo lugar en el informe PISA.

Pero ¿cuál es la clave de estos países o regiones que demuestran un alto rendimiento?, si los países asiáticos tienen modelos educativos bastante autoritarios, basados en el rigor y la competencia, y demasiado dirigidos por el profesor; el sistema Finlandés se basa en ambientes de colaboración, creatividad, igualdad de oportunidades y la formación de educadores. ¿Podríamos aprender de ellos, siendo ambos modelos tan distintos?, ¿qué coincidencias tienes estos modelos?, ¿una de las respuestas podría estar dada en la inversión en la educación pública?.

Se dice que el Estado debe aumentar la inversión en educación y mejorar la ejecución del presupuesto. Los resultados PISA demuestran que a mayor gasto no siempre se traduce en mejores resultados, y el mejor ejemplo es Polonia, que sube cuatro puestos en comprensión lectora hasta ocupar la décima posición. En este sentido, se puede inferir que los recursos financieros son condición necesaria, pero no suficiente, para lograr un buen sistema escolar; no importa solo cuánto, sino sobre todo en qué y cómo se gasta.

Según se desprende de PISA, apenas un 20% de los resultados guarda relación con la cantidad de dinero invertido en la educación escolar. Estados Unidos por ejemplo, invierte mucho más por alumno que varios de los países con los que compite, y este año ha descendido 20 posiciones. En 2009, ocupaba el puesto 17, ahora está en el 36 y no supera la media de la OCDE

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